Robert Moore es un hombre fanático de los perros que cumplió recientemente 100 años, su familia tenía planeado algo especial para celebrar su siglo de vida: conseguir la mayor cantidad de caninos para que pudiera pasar tiempo con ellos.
Alison, su hija, realizó una serie de publicaciones en diferentes grupos vecinales de San José, California, para pedir de favor a dueños de perros que llevaran a sus mascotas a la fiesta de cumpleaños de su padre para que él los pudiera acariciar.
En entrevista para el periódico The Washington Post, Alison comentó que “muchos de sus mejores amigos ya no están con nosotros” y por eso decidió que sus animales favoritos tenían que compartir ese día con él. “Simplemente ama, ama, ama a los perros. Cada perro que ve, lo quiere acariciar. Así ha sido toda su vida”, aunó.
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La planeación del cumpleaños
Seis días antes de que su padre cumpliera 100 años, Alison explicó a los vecinos su idea: hacer un desfile de caninos para que Robert Moore pudiera acariciarlos un poco. La hija pensó que la convocatoria atraería a un máximo de 30 perros, sin embargo, se llevó una gran sorpresa cuando vio a más de 200 animales afuera de su casa esperando felicitar a su padre.
“Me sorprendió”, dijo Alison después de ver una gran fila de mascotas afuera de la casa, se quedó atónita al ver que personas viajaron más de 16 kilómetros para celebrar el cumpleaños de su papá.
Según el periódico estadounidense, los dueños y sus perros comenzaron a llegar desde las 11 de la mañana. “Era tan dulce y hablaba con los niños y acariciaba a todos los perros y decía sus nombres. Fue muy divertido”, comentó sobre lo querido que se sintió Robert con los animales.
El señor de 100 años fue decano de ciencias aplicada y artes en la Universidad Estatal de San José por 25 años, durante la celebración de su cumpleaños se sintió conmovido al ver cientos de sus animales favoritos afuera de su casa.
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Caroline Moore, su nieta de 24 años, comentó que toda la familia y los asistentes no paraban de sonreír, muchas personas desconocidas habían llegado para celebrar ese momento familiar tan especial. “Aparecieron muchos extraños. No solo se presentaron, sino que hicieron tarjetas y carteles, le trajeron pastelitos. Fue lo más conmovedor de todo”, comentó.
El desfile de perros
La familia de Robert comentó para The Washington Post que lo más destacado era ver un larga fila de caninos y compartieron que ellos han sido amantes de estos animales desde pequeños. Aunque han pasado varias décadas desde la última vez que el señor tuvo una mascota, él le transmitió el amor que siente por los canes a sus hijos y nietos.
Caroline relató que Benny, su labrador amarillo, era el nieto favorito de su abuelo y explicó que cada vez que lo van a visitar procuran llevar a can para que pueda convivir con el señor. “Cada vez que alguien lo visita y no trae un perro con ellos, se nota que está decepcionado”, aseveró.
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Robert explicó que su cumpleaños fue un sueño hecho realidad, pues tuvo la oportunidad de acariciar y conocer una gran cantidad de caninos. Su hija explicó que estos últimos años no han sido fáciles para él, pues extraña a su esposa y amigos, no obstante, en el momento en el que vio a personas con tarjetas y flores derramó algunas lágrimas.