Juegos que cambiaron la historia #14 | Final Fantasy VII

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Cuando vemos listas que enumeran a los mejores videojuegos de la historia, juegos favoritos o los más relevantes de la industria siempre hay algunos exponentes que dicen presente casi de manera obligatoria. Uno de ellos es Final Fantasy VII, título que salió en 1997 de manera exclusiva para PlayStation y que marcó un antes y un después tanto a nivel industria como también emocional hacia los jugadores.

Es imposible describir toda la relevancia que tuvo esta entrega en la industria por lo que intentaré centrarme en algunos aspectos que considero fundamentales para entender su trascendencia hayan jugado o no al título. En primer lugar, Final Fantasy VII es el juego que popularizó e hizo masivo el género JRPG que, hasta el momento, solo era exitoso en Japón.

Desde su lanzamiento, el título fue un éxito rotundo de ventas superando las 10 millones de unidades vendidas en PlayStation convirtiéndolo en uno de los juegos más vendidos de dicha plataforma. Además, obtuvo cifras inimaginables en regiones que le eran ajenas al género como Estados Unidos y Europa.

Para explicar este éxito y popularización del género hay que comprender su contexto. Otro de los puntos fundamentales de Final Fantasy VII es que fue el primer título de la franquicia en 3D. El pasaje de 2D a 3D es, sin lugar a dudas, uno de los mayores puntos de inflexión en la industria de los videojuegos a nivel tecnológico y de capacidades.

En esta época nos encontrábamos en un momento de revolución y cambios en la industria. Solo para poner otros ejemplos, en 1996 salió Super Mario 64 y en 1998 iba a salir The Legend of Zelda: Ocarina of Time, juegos que también pisaron fuerte en el 3D y cambiaron la manera de pensar a los videojuegos.

A este contexto se le suma que Final Fantasy VII fue una obra insignia de PlayStation y bandera de su consola. En un primer momento, el juego estaba siendo desarrollado para Nintendo. Sin embargo, debido a sus fuertes aspiraciones gráficas y las limitaciones de almacenamiento de los cartuchos de la Nintendo 64, hicieron que Squaresoft tenga que optar por PlayStation y sus innovadores CD-ROM.

Los personajes renderizados en escenarios prerenderizados se convirtieron en un ícono de la industria. La jugabilidad de Final Fantasy VII que combinó los gráficos tridimensionales con escenas cinematográficas alucinantes y un mundo abierto completo con locaciones icónicas se volvieron en algo nunca antes visto en los videojuegos. El solo hecho de que el título estuviera dividido en 3 CD-ROM era algo sorprendente para la época.

Final Fantasy VII fue una superproducción que costó alrededor de $45 millones de dólares. A esta cifra hay que sumarle $100 millones de dólares que Sony invirtió en publicidad y marketing, una maniobra muy arriesgada no solo por ser un número muy grande sino también por apostar a un género que realmente no era relevante fuera de Japón. Incluso títulos anteriores como Final Fantasy VI no habían tenido buenas ventas.

El juego, finalmente, tuvo su lanzamiento y fue un éxito abismal no solo por sus ventas sino también por el impacto cultural que logró. Los jugadores no solo mostraron interés por el JRPG sino que realmente amaron a Final Fantasy VII, sus personajes, su historia y, aún a día de hoy, es el juego favorito de millones de personas.

Antes de continuar sobre por qué Final Fantasy cautivó a tantas personas quiero destacar un punto que también me parece relevante para entender su trascendencia y su masividad. Final Fantasy VII fue el primer juego de la franquicia que tuvo traducción al castellano, algo que comenzó a ser más habitual gracias al éxito de este juego y la demostración de que había mercado para el género fuera de Japón. Eso sí, la traducción de esta entrega fue muy mala y hay mucho material memético alrededor de eso pero es una historia para otra nota.

Por más de que Final Fantasy VII fue un cambio fundamental a nivel industria en cuanto a su producción, a la utilización de gráficos tridimensionales y lo completo y gigante de su experiencia, no estaríamos hablando de él si no fuera porque cautivó a millones y millones de jugadores y fanáticos de todo el mundo.

La historia de Cloud, Tifa, Aerith, Barret, Red XIII, Yuffie, Vincent y Sefirot entre muchos otros cambiaron la idea de lo que podíamos sentir y encontrarnos en los videojuegos. Hoy en día ya estamos acostumbrados a que algunos títulos nos puedan emocionar y cautivar de manera diferente con historias crudas, personajes carismáticos y universos que se sienten reales. Sin embargo, en 1997 esto no era tan habitual.

Final Fantasy VII fue el primer videojuego para toda una generación que produjo enamoramiento en el sentido literal de la palabra hacia sus personajes. Lo perturbado de Cloud, la bondad de Barret, la ternura de Aerith, la fuerza de Tifa y la dualidad de Sephiroth entre muchas cosas más cautivaron a los jugadores y le cambiaron su vida desde un lado que solo se puede explicar desde lo sentimental.

Más allá de ser un gran videojuego con un mundo abierto abismal, un sistema de combate innovador y desafiante, elementos cinematográficos y una historia atrapante, Final Fantasy VII brilla y destaca por sobre el resto por ser ese videojuego que realmente cambió la noción de lo que podíamos jugar. Su impacto fue tan grande que su universo fue expandido con películas, libros y otros videojuegos más pequeños que funcionaron como precuela y secuela de los acontecimientos del juego.

Aún a día de hoy, el título sigue vigente con el lanzamiento de su remake que se dividirá en tres partes y de las cuales ya salieron dos: Final Fantasy VII Remake y Final Fantasy VII Rebirth, demostrando que el juego sigue más vigente que nunca. Aún recuerdo en 2015 cuando se anunció en la E3 que Square Enix estaba trabajando en estos remakes y fue uno de los anuncios más aplaudidos y ovacionados de la historia de dicho evento.

Estos son algunos de los motivos por los cuales Final Fantasy VII se encuentra en un pedestal en la historia de la industria de los videojuegos ya que fue tanto una obra revolucionaria desde lo técnico como también una obra cautivante que muchísimos fanáticos llevan hoy en día en sus corazones. Seas fanático de la franquicia o no, todos aquellos que jugaron a la entrega saben que se trata de un título especial y diferente al resto.