Warner Bros. Games Montreal, conocido por títulos como Gotham Knights y Batman: Arkham Origins, habría despedido a 99 trabajadores, en su mayoría empleados tercerizados de su equipo de control de calidad, tras los decepcionantes resultados de Suicide Squad: Kill the Justice League.
Según fuentes internas, los afectados recibieron la noticia mediante una videollamada, apenas días después de que Rocksteady confirmara el fin del soporte para el juego a menos de un año después de su lanzamiento.
La medida ha generado críticas y molestia entre los empleados. Durante una entrevista a un medio radial, un trabajador anónimo expresó: “Me siento estresado y deprimido. Siento que la compañía arruinó 99 vidas”. Señalaron que durante la reunión semestral del estudio, celebrada en invierno, la administración había asegurado que había suficiente trabajo y que los despidos no estaban en sus planes.
Suicide Squad: Kill the Justice League, lanzado en febrero de 2024, no logró cumplir con las expectativas comerciales. Aunque Warner Bros. no ha compartido cifras específicas, se sabe que las pocas ventas del título contribuyeron a una caída del 41% en los ingresos referentes a videojuegos de la compañía durante el segundo trimestre.
Con un mercado saturado y pocas opciones, muchos de los trabajadores despedidos enfrentan inquietud sobre su futuro laboral, mientras el estudio ofrece la opción de reincorporarlos, como muy temprano en 2026.
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