Después de la realización del cortometraje de La Voz Humana en pandemia y de la más reciente Extraña Forma de Vida con Pedro Pascal y Ethan Hawke, el cineasta español Pedro Almodóvar regresa con La habitación de al lado, película que se llevó el León de Oro en el Festival de Venecia.
El film, que podrá disfrutarse en todos los cines a partir de este jueves, gira en torno a la relación entre dos amigas de la juventud que se distanciaron por las circunstancias de la vida. Años después, vuelven a encontrarse en una situación extrema, pero extrañamente dulce. Pudimos hablar en una ronda de prensa con Tilda Swinton (Las crónicas de Narnia, Suspiria, Constantine) sobre su experiencia filmando con Pedro, la barrera del idioma y mucho más.
La actriz empezó la charla haciendo hincapié en uno de los focos centrales de la película: “Cuando leí el guion por primera vez, se sintió como una continuación de Dolor y Gloria (2019), retomando la idea de un amigo que regresa a nuestras vidas después de años sin verlo. Es sobre la amistad y lo importantes que son los vínculos que formamos a través de los años“.
Lu Agosta: —Siempre mencionás que Pedro fue para vos un maestro. ¿Cómo fue trabajar con él y el proceso general durante el rodaje?
Tilda Swinton: —Fue una experiencia extraordinaria para mí, porque Almodóvar filma de una manera muy diferente a la que estoy acostumbrada.
Habíamos hecho un cortometraje juntos durante la pandemia (La Voz Humana) y en ese momento pensé que el motivo por el que se filmó tan rápido fue porque solo teníamos nueve días y estábamos en cuarentena.
No sabía que a él le gusta filmar así. Prefiere ensayar durante seis meses y que sus rodajes sean cortos. Para mí esto fue increíble porque tiene una forma distinta de trabajar a la que estoy acostumbrada y amé la experiencia por completo. Me gusta entrar a un lugar con mentalidad de principiante. Me sentí de nuevo con 18 años pisando un set por primera vez.
La razón por la que trabaja tan rápido es porque sabe exactamente lo que quiere. Por momentos, pensaba que quizás lo hacía así porque estaba cansado o ansioso pero ahora sé que se debe a que realmente sabe cómo quiere que sean las cosas y una vez que obtiene la toma que necesita está listo para seguir adelante.
Otros medios: —Aunque esta no es la primera vez que trabajas con Pedro, es la primera vez que él estrena una película en inglés. ¿Lo sentiste presionado por esto en algún punto?
Tilda Swinton: —Sí. Él mismo siempre fue muy honesto sobre la presión que tuvo al filmar esta película. Durante años la gente le venía preguntando cuándo iba a trabajar en una producción en inglés y él simplemente no había sentido la necesidad ni el deseo antes.
Y se entienden las razones. En primer lugar porque no es su idioma nativo y él es escritor y escribe en su propio idioma, pero también porque su inglés tampoco es demasiado bueno.
Así que fue increíble estar en los mejores asientos para presenciar este enorme desafío al que se estaba involucrando.
Lo interesante es que él no escucha el idioma que se habla, sino la música. Nos pide que repitamos nuestras líneas una y otra vez. Intenta entender la música del inglés.
No es realista y no está interesado en el naturalismo. Busca darle una cualidad de cuento de hadas a todas sus historias. El idioma solo le importa como escritor, pero no como director. Como cineasta le importan los movimientos de cámara, las caras, la música. Pero en resumidas cuentas, entiendo que él trabaja de la misma forma en inglés que en español.
Otros medios: —Tu personaje es corresponsal de guerra y aunque no vemos muchas escenas de ella ejerciendo la profesión, esto continúa siendo parte de su esencia y es muy comentado a lo largo de la película. Como actriz, ¿cómo lograste incorporar elementos y emociones sobre el trabajo del corresponsal?
Tilda Swinton: —Tuve mucha suerte de conocer a varios corresponsales de guerra y leí muchas biografías sobre Martha Gellhorn, Mary Colvin y Janine entre otras. Es muy importante para el film que ella se dedique a esto por la temática que atraviesa. Más allá de que se aborden los elementos de amistad y reflexiones sobre la vida y la muerte, La habitación de al lado nos habla sobre lo que significa ser testigos de algo y sobre no mirar para otro lado.
Martha le pide a Ingrid que la acompañe en sus últimos días de vida y creo que siente que puede pedir esto porque en su propia carrera se dedicó a ser testigo de los eventos del mundo.
La película tiene que ver con lo que significa estar en la habitación de al lado en la que estamos siempre. Lo estamos cuando hablamos de Gaza, de Siria, de Beirut o de Estados Unidos. Lo más importante es que intentemos recordar esto y que no miremos para otro lado, como les pasa a Ingrid y Martha.