En el 2002, la película brasileña Ciudad de Dios revolucionó toda Latinoamérica, con un éxito que en aquel entonces no se había visto en las producciones de aquel país. La película se convirtió en un ícono tan importante del cine que incluso algunas universidades la utilizan en sus clases de cinematografía.
Ahora, Ciudad de Dios vuelve con una nueva serie llamada Ciudad de Dios: La lucha no para. Ambientada más de 20 años después de la película original, seguimos la historia de un Buscapé ahora adulto, quien se dedica a la fotografía. A modo de homenaje a la película original y también para crear una narrativa con más cohesión, la serie incluso hace uso de flashbacks, utilizando fragmentos de aquel film del 2002.
Para celebrar el estreno de la serie en Max, pudimos conversar con Aly Muritiba, director de la serie, Alexandre Rodrigues, quien interpreta a Buscapé, y Roberta Rodrigues, actriz que encarna a Berenice, quienes nos contaron las diferentes experiencias de haber sido parte de esta peculiar secuela, mucho más personal y con una búsqueda diferente a la de la película original, pero igual de cruda e impactante.
Te invitamos a ver nuestra entrevista en video, o a leer una transcripción.
—Bueno, empezando por… ¿Cómo los encontró, digamos, cómo fue en cada caso este regreso a Ciudad de Dios, en esta oportunidad en formato serie? ¿Cómo fue?
Roberta Rodrigues: —Creo que es importante en una serie que podemos contar historias con más detalle, tenemos más tiempo, tenemos más tiempo para desarrollar la historia de nuestros personajes. Y esto es maravilloso porque la película “Ciudad de Dios” es un gran ícono. En mi caso, en la historia de Berenice, una mujer muy poderosa, es muy importante contar una historia de resistencia y contarla al mundo es un privilegio.
Alexandre Rodrigues: —Bueno, de hecho, volver a “Ciudad de Dios” es algo increíble. Volver a “Ciudad de Dios”… No hay como no volver a la “Ciudad de Dios” sin hablar de este personaje tan icónico como Buscapé, mi personaje. Bueno, “Ciudad de Dios: La Lucha no Para”, ahora una serie es algo muy importante. Es importante que tengamos la oportunidad de hablar un poquito más sobre los personajes, sobre sus conflictos, la vida familiar que tienen con sus familiares, todo eso es muy importante. Bueno, creo que faltó un poquito en la película “Ciudad de Dios” por cuestiones de tiempo. En el caso de Buscapé, que tiene siempre un sueño, en la serie tenemos la posibilidad de desarrollar un poquito más la trama.
—Y bueno, Aly, con respecto a lo que tiene que ver con la dirección y el guión y demás, ¿en qué momento decidiste o cómo decidieron ubicar la historia en el momento en el que la ubicaron? Además de cómo lograste mantener la esencia de la película y llevarla a la serie.
Aly Muritiba: —Bueno, la idea de seguir contando la historia de “Ciudad de Dios” fue de la productora de la serie, Barata Rivero, que tenía los derechos de seguir contando la historia, pero me decía que hacía más de cinco años que no encontraban un punto de partida. Y entonces decidieron que sería importante traer a algunos personajes que estaban en la película de vuelta a la serie. Sería importante que los actores y las actrices viviesen esos personajes nuevamente y por eso sería importante que los personajes tuvieran las edades que tienen hoy. La película se hizo hace 22 años, entonces ubicamos la historia 20 años después de la película. La serie empieza en 2004 para que tuviéramos los actores y las actrices con su edad real, sin preocupar con la caracterización de los personajes.
Y entonces pasamos a estudiar el contexto histórico de Río de Janeiro y brasileño para que encontrásemos la historia que íbamos a contar. Y decidimos contar la historia de una comunidad formada por personas que resisten y que luchan para permanecer en sus comunidades, que luchan para transformar la “Ciudad de Dios” en un mejor lugar para vivir y no un lugar donde se quiere salir, como era el caso de la película. Yo, como director, tenía el desafío de hacer al espectador que conoce la película entender que estaba viendo “Ciudad de Dios”, pero que entendiesen que no estaban viendo solamente “Ciudad de Dios”. No quería repetir la película, quisiera darle al espectador un lugar donde empezar. El primer episodio tiene un lenguaje estético cerca de la película, pero a lo largo de los episodios este lenguaje empieza a transformarse según mi abordaje estético.
—Y con respecto a los personajes de ustedes, de sus protagonistas digamos, me parece muy interesante ver cómo ellos van evolucionando y nosotros podemos ver lo que… Cómo crecieron. Así que me gustaría que me cuenten ustedes, sin caer en spoilers, cómo los encuentra a cada uno en esta serie, en este momento particular de la historia.
Roberta Rodrigues: —Bueno, Berenice es una mujer que tiene mucho poder en la comunidad. Tiene un salón de belleza, tiene una hija y compañero, pero igual tiene el trabajo de ser madre. Por supuesto que una comunidad es una gran familia. Todos se preocupan unos con los otros. La comunidad es un lugar de respeto donde las personas pueden contar unas con las otras. Entonces vemos su trayectoria. Ella transformándose en esa mujer, entendiendo el lugar que quiere ocupar. No voy a decir nada más porque si sigo voy a darles un spoiler y no quiero hacerlo.
Alexandre Rodrigues: —Buscapé, mi personaje, ya entendemos que siguió su sueño, que se encuentra en su carrera que eligió, y también que ha sido elegido después que sacó la foto desde pequeño y la foto fue publicada. Bueno, él sigue un camino de un personaje más maduro, tiene su familia. Es decir, siempre tuvo su familia, pero ahora vamos a identificar quiénes son los miembros de esa familia, los dramas internos y todo lo que pasa en su familia. Vamos a entender este personaje como ser completo. No tuvimos la oportunidad de contar su historia en “Ciudad de Dios” porque es una película que tiene su limitación. A pesar de dos horas y media de película no tuvimos tiempo, pero creo que básicamente es eso. El personaje ahora tiene su propia trama, tiene su vida un poquito más detallada.
—Perfecto. Y… Bueno, una de las cosas que a mi siempre me gustó… A mi me encanta “Ciudad de Dios”, siempre me gustó mucho la película, me está encantando la serie, y… En la Universidad de Cine era una película que sí o sí te mostraban en la facultad. O sea, vos tenías que ver esta película. ¿Por qué creen ustedes que “Ciudad de Dios” es tan importante para la historia del cine y se convirtió en un clásico?
Roberta Rodrigues: —Sí, “Ciudad de Dios” es todo un clásico, y creo también que tiene una función importante para nuestro país. Ha sido una revolución en Brasil, ha sido un cambio muy radical en términos de lo audiovisual, donde entendimos que hacemos productos increíbles con gran calidad, y también producimos una gran… Una nueva estética en aquel momento. Y al mismo tiempo pudimos abrir las miradas hacia la periferia, los lugares que están al margen de la sociedad, y con eso todo el mundo de alguna manera se ha conectado porque en todos los lugares del mundo tenemos periferias, lugares abandonados, lugares olvidados, pero son lugares que hacen que el sistema del país funcione, donde está la gran masa de personas.
La “Ciudad de Dios” creo que es revolucionario en ese sentido y también hizo que todo el mundo pudiera asistir a un producto brasileño y ver que la calidad es tan increíble como cualquier otro producto de cualquier parte del mundo. Y eso también nos ha fortalecido en cuanto artistas y nosotros que trabajamos en audiovisual en nuestro país.
—Gracias y bueno, Aly, algo que me gusta mucho, me parece que está muy bien logrado como conectaste los flashbacks de lo que vemos en la película con el momento del presente que están viviendo sus protagonistas. ¿Cómo hiciste para balancear esas dos cosas?
Aly Muritiba: —Bueno, esta fue una decisión tomada cuando estábamos escribiendo el guión, la decisión de utilizar fragmentos de la película como flashbacks, pero no apenas utilizarlo para los fans de la película, pero hacerlo para que el espectador, incluso el nuevo espectador, entienda rápidamente el pasado de los personajes. De los personajes principales de la serie. En el piloto creo que logramos darle al espectador el contexto para que todos acompañen la historia de nuestros protagonistas sin necesariamente tener que haber visto la película. Al hacerlo, lidiamos con una emoción primaria del espectador, que son los recuerdos. Los espectadores que han visto la película hace 10 o 20 años empiezan a ver la serie con el chico pequeño que estaba disparando. Bueno, que era un niño en la película y ahora es un hombre. Creo que todo tiene que ver con una estrategia narrativa que hace que el espectador se involucre en la historia. Lo que hice fue ver la película como 100 veces para poder construir esos flashbacks, para que no fueran simplemente escenas sueltas.
—Y, bueno, nosotros algo que recordamos mucho de la película y que creo que también la hizo tan importante, fue que vivimos una experiencia muy cruda y visceral en su momento. ¿Con qué nos vamos a encontrar ahora cuando veamos la serie?
Aly Muritiba: —Bueno, la crueldad, la violencia de la película permanece en la serie de alguna manera, pero de manera mucho más sutil, porque ahora la cámara está directamente en la vida de la comunidad. Mostramos la violencia, pero también mostramos la música funk de la favela, de la comunidad, pero también mostramos mujeres fuertes que se unen para evitar que sus hijos entren en el tráfico de drogas. Mostramos conflictos físicos, peleas, pero también mostramos personas que juegan al fútbol, que hacen barbacoa. Creo que en la película hacemos algo más equilibrado entre la vida y la muerte en las comunidades.
—Bien, perfecto. Y ya para cerrar, Roberta y Alexandre, que me gustaría saber cómo los encuentra a ustedes como actores, como personas, este regreso a la serie. ¿Cómo los encontró en ese sentido desde un ámbito más personal?
Roberta Rodrigues: —Bueno, estoy apasionada por la “Ciudad de Dios”. Me apasiona el personaje de Berenice, y también por todos los personajes que forman parte de esa historia. Y también me siento como que, bueno, que en “Ciudad de Dios: La Lucha no Para” hemos logrado hacer esta conexión entre los nuevos actores, que son también actores de la “Ciudad de Dios”, de la comunidad “Ciudad de Dios”, que es un grupo llamado “Os Arteiros”, que han conectado con nosotros de manera excepcional. Bueno, es eso, es como conectarse. Si conectamos, cosas buenas pasan. Y estoy muy feliz con todo lo que producimos. Estoy segura que todos los que ven la película van a entender cada escena, cada mirada. La serie tiene mucho que ver con la mirada, cómo nos comunicamos, esa cosa tan real, tan humana que es el alma. Y nuestro director ha sido capaz de captar esos momentos que hablan más que mil escenas juntas. Creo que es eso. Creo que ahora tenemos una película con mil detalles, una riqueza de detalles y de manera más afectuosa.
Alexandre Rodrigues: —Bueno, a mí me gusta decir que cuando vi “Ciudad de Dios”, la realidad que estaba allí formaba parte de nuestra realidad. Pero ahora con nuestra serie, y esta es una mirada personal mía, creo que ahora podemos contar la real historia desde mi punto de vista. ¿Qué es lo que pasa dentro de la favela? Son estas personas que tienen poder, que se autoprotegen. ¿Qué es la base de la comunidad? Lo que me gusta en esta serie, que faltó en “Ciudad de Dios”, ahora lo vemos en la serie. No solamente explica, sino también trae una nueva mirada, diferente, abordando temas que la película no logró abordar.
—Muchísimas gracias por su tiempo y felicitaciones en el proyecto. Me está encantando la serie.