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Lo venimos diciendo desde hace un par de semanas y, finalmente, se confirmó. El gran enfrentamiento que cierra la temporada será el que siempre tuvo en vilo a los fanáticos de los X-Men: el profesor Charles Xavier contra su viejo amigo Magneto. O mejor dicho, las ideologías opuestas de ambos sobre cómo lidiar con el problema de la intolerancia de los humanos.

Tal como viene sucediendo desde el origen de estos personajes, sus formas opuestas de enfrentar esta problemática los han ido distanciando desde la juventud. Algo que a groso modo refleja la lucha real contra la segregación racial en Estados Unidos, con dos líderes enfrentados en sus ideas y discursos, pero con un objetivo común. Martin Luther King y Malcolm X fueron el modelo para la creación de estos personajes, inspirando con sus políticas a los escritores de Marvel.

Ahora, de cara al final, es momento de aceptar que el sueño de Xavier ya no es una realidad viable, y que la radicalización de Magneto es inminente. Después de Genosha, el guion apuntó directamente a esta conclusión, logrando una base sólida y creíble de razones complejas por las que cada personaje toma las decisiones que toma. En cualquier otra serie, el ataque a la nación mutante hubiera sido un gran arco final, dejando un cliffhanger irresistible para una próxima temporada.

Pero X-Men ‘97 tiene en claro lo que quiere mostrar y utilizó ese impactante recurso para contar una historia, no solo generar un golpe de efecto. En este caso, la masacre de Genosha es el catalizador para el odio entre mutantes y humanos, que dejó consecuencias imprevistas. Por un lado, descubrimos quién es el verdadero artífice del atentado y que no trabajó solo. En una escalofriante revelación, Bastión confiesa que los humanos se ofrecieron a experimentos para erradicar a los mutantes por una razón muy simple: miedo.

Por el otro, Cable confirma que el futuro del cual viene se dispara a partir de estos hechos y que no parece haber solución. En esta escena en el cuartel de los X-Men, ocurren dos cosas muy interesantes: se habla de una distopía, pero Cable hace la salvedad diciendo que en verdad este futuro es una utopía para los humanos, a costa del sufrimiento y esclavización de los mutantes. Algo que suena muy coherente con la aparente falta de reacción y empatía por parte de los humanos tras los sucesos de Genosha.

Y en un diálogo interesante para cualquier fan del Universo Cinematográfico de Marvel, se menciona a los Ancestrales de Kamar-Taj (la orden a la que pertenecen Doctor Strange y Wong) y el concepto de puntos absolutos en el tiempo, sucesos que no pueden ser cambiados. Una explicación que apareció por primera vez en Avengers: Endgame (2019) y se reforzó la Fase 4 del UCM, en series como Loki (2021-2023). El guionista Beau DeMayo tuvo que salir a aclarar que la única razón por la que había hecho esto era para darle un contexto familiar a la explicación, pero ya todos se empezaron a ilusionar con la idea de un multiverso que comprenda también las series animadas de Marvel.

Especialmente, desde que en este episodio apareció también un pequeño cameo muy importante de un reconocido superhéroe, así como grandes villanos. Pero no nos adelantemos, volviendo a los hechos que desencadenan todo este ataque de centinelas-prime (humanos infectados con el virus tecnológico del futuro), la familia Summers emprende la misión de descubrir su origen. Así se encuentran con la madre de Bastion, que también rompe con un lugar común en este tipo de ficciones: este es un villano que tuvo una infancia normal y feliz, sin odio ni traumas.

Scott, Jean y Nathan son los protagonistas no solo de esta subtrama, sino también de una de las mejores secuencias de acción de la serie hasta ahora, uniendo sus poderes para escapar de los centinelas-prime, trabajando por primera vez juntos como “la familia Summers”. A la vez, Wolverine y Kurt defienden la Academia (y a Rogue, que sigue inconsciente) de un ataque de esta nueva raza centinela, con una de esas peleas que demuestran por qué la animación es un medio superior para contar historias de superhéroes.

De vuelta en el cuartel de Bastion, donde Magneto sigue encadenado y debilitado, Val Cooper tiene una reveladora conversación con él y termina aceptando que los métodos utilizados llevaron al exterminio de Genosha. Ante esto, toma una decisión que pondrá en juego todo lo que el Profesor X arriesgó cuando le entregó el control de la Academia a Magnus, desencadenando los sucesos que llevan al gran enfrentamiento final. La amenaza es momentáneamente detenida, pero a un costo muy alto.