Entrevista a Felipe De Lucia, miembro de W7M y ganador de la Six Invitational 2024

Lo mejor de los esports, y de casi cualquier evento deportivo, no son las grandes jugadas, ni los premios de millones de dólares, ni los grandes anuncios que se hacen. Lo mejor, sin duda, es el ambiente que se vive, el calor de una afición que quiere ver a los mejores equipos en su punto máximo de desempeño. Lo mejor de los eventos deportivos es, por supuesto, la gente que los convierten en algo mucho más que sólo una disciplina.

Tuve la suerte de cubrir dos de los más importantes torneos de diferentes videojuegos competitivos en Brasil. Por un lado, el Major de CS:GO en Río de Janeiro en 2022, y el Six Invitational de Rainbow Six Siege en São Paulo hace apenas algunos días atrás.

Siempre es estimulante poder ver, de primera mano, el esports que uno ama. Pero la experiencia que se vive en Brasil es diferente. Diferente por razones que uno, como latinoamericano, entiende perfectamente, pero que a los ojos del mundo europeo o norteamericano se convierte en algo completamente novedoso y cuasi inexplicable. Se vive con pasión, se grita el triple que en cualquier otro lado. El público pareciera dejar la vida a la hora de alentar cada jugada, tal como si fuese un partido del Mundial de Fútbol. En Brasil, los esports se viven como si fuera algo de vida o muerte.

Entonces, la pregunta sería: ¿qué es lo que tienen los torneos en Brasil que se sienten tan vivos, tan divertidos, emocionantes y eufóricos? ¿Es algo sólo de Brasil? ¿Es algo de la región? ¿O simplemente, son los torneos más importantes que se viven con otra intensidad? Yo, como fanático de los esports y latino, creo entender un poco qué es lo que hace que los torneos en Brasil sean tan únicos. Permítanme explayarme al respecto.

Antes que nada, y tal vez lo más obvio para destacar: sí, los brasileños al igual que los argentinos, son personas super emocionales y pasionales. Les gusta gritar sus alegrías y hacer tanto “baruhlo” puedan en cada situación. Pero también creo que hay algo que influye directamente en este aspecto, y tiene que ver con la frecuencia de los torneos. Brasil debe ser de los países latinoamericanos con mayor cantidad de torneos tier A o tier S. Y sin embargo, son contados con los dedos de una mano. Al mismo tiempo, Brasil es un país con 219 millones de habitantes, y si suponemos que tan solo el 5% es aficionado a los videojuegos, eso nos daría alrededor de 10 millones de jugadores. Sin duda, lo suficiente para crashear (romper) cualquier servidor de cualquier videojuego.

Ahora, ¿qué pasa cuando se suman pocos torneos con una gran cantidad de personas que juegan videojuegos y, además, son super pasionales? Una explosión de emoción contenida en cada ronda, con cada baja, con cada punto conseguido. Una reacción eufórica tanto en la victoria como en la derrota. Si a esto también le sumamos la cantidad de organizaciones completamente brasileñas que participan en estos torneos de alto nivel, creo que podemos entender porque Brasil es el lugar idóneo para presenciar eventos de esports.

La pasión es increíble, la energía es contagiosa y la buena onda y buenos tratos de todos hacen que la experiencia sea realmente algo diferente a lo que se vive en otros lugares del mundo. Al hablar con organizadores y gente con altos cargos que han visto a sus videojuegos desarrollarse en diferentes continentes, todos afirman lo mismo: “Brasil es diferente”. Dicho esto, creo que si se aumenta la frecuencia con la que se organizan torneos importantes en Brasil, disminuiría un poco el hype (entusiasmo) y la emoción. Aún así, no creo que nunca baje lo suficiente esta intensidad como para que Brasil deje de ser uno de los mejores países para presenciar y vivir la magia de los deportes electrónicos.

Me gustaría que esto se traslade a otras zonas de la región, poder disfrutar de un Major en Argentina, Chile, o Uruguay, por ejemplo, y así ser anfitriones de miles de aficionados de diferentes partes del mundo. La alegría y la pasión no es solo brasilera: es de Latinoamérica. Y el mundo de los esports ya está demasiado acostumbrado a la energía europea. ¿Esto quiere decir que Copenhague, por ejemplo, no tiene energía? ¡Para nada! Por algo es la catedral de Counter Strike. Lo mismo pasa con diferentes partes de Europa, Asia y el resto del mundo. Pero sí creo firmemente que de organizarse más eventos en Latinoamérica, más entusiastas podrían contagiarse de esa energía y de esa pasión que son realmente únicas y tan nuestras.

Eventos masivos como el Six Invitational de Rainbow Six Siege se convierten en un encuentro de culturas bajo el paraguas de una misma pasión: el Rainbow Six, un esport que cuanto más podamos compartirlo y entenderlo, más vamos a enriquecer algo que nos gusta a todos. Para ir terminando, vale destacar que los ganadores de la Six Invitational 2024 de Rainbow Six Siege en São Paulo fueron los chicos de W7M.

Te invitamos a ver la entrevista en video con Felipe De Lucia, jugador clave de W7M, o a leer una transcripción de la misma.

—¡Felicidades, Campeón!

Felipe De Lucia: —Gracias. No tengo palabras para describirlo. Siempre fue mi sueño ganar frente a la multitud local, frente a mis padres. Es simplemente un sueño hecho realidad, realmente.

—¿Qué estabas pensando en esas rondas donde estabas, como, seis puntos atrás y ya era el fin para ti?

Felipe De Lucia: —Estaba arengando a mi equipo. Como, repitiendo. Repitiendo. “No vamos a perder chicos. Creamos en nosotros mismos”. “Creámoslo. No vamos a perder”. Y luego, como inconscientemente, cuando vas seis a uno, sabes que vas a perder. Pero si repites que hay que creer y luego ves la multitud, vi a mis padres y obtuve esa energía de ellos y supe que no podía ser el fin, así que ronda por ronda, ganamos confianza y luego pudimos hacer el regreso, el regreso histórico.

—¿Cómo se siente dejar el trofeo frente a toda la multitud brasileña? Es tan loco, ¿verdad?

Felipe De Lucia: —No tengo palabras para describirlo, hombre. Estaba llorando mucho cuando vi a mis padres, cuando los abracé. Siempre ha sido mi sueño. Así que levantar el premio en casa, frente a la multitud local, es simplemente surreal. No tengo palabras para describirlo.

—Ahora eres un campeón mundial. ¿Cuál es el futuro para ti?

Felipe De Lucia: —No sé si pienso en el futuro. Solo estoy pensando en el presente ahora mismo. Acabamos de ganar y este año ganamos dos Majors. Ganamos un Six Invitational. Así que creo que es justo decir que somos el mejor equipo de todos los tiempos. Quizás. Y tal vez podamos ganar más Majors. Podemos hacer más historia en el juego y seguir trabajando para lograrlo.

—¿Cuáles son tus palabras para los organizadores?

Felipe De Lucia: —W7M siempre significará todo para mí. Porque son la organización que me dio una oportunidad después de tener una mala temporada. Y con ellos gané dos Majors. Gané un Six Invitational. Y cumplí todos mis sueños. Así que siempre significarán todo para mí.

—La última pregunta: esta cámara son todos tus fans, deciles lo que quieras.

Felipe De Lucia: —Gracias a todo el mundo que siempre está acompañando. A quienes acompañaron siempre, a los que acompañan ahora también. No entiendo mucho lo que sucedió, pero que fue histórico, fue. Ganar dos Majors. Ganar todo en un año. Se consiguió, encima en la manera que fue. Por eso quiero agradecer a todo el mundo que estaba alentando aquí, en su casa. Gracias y vamos para arriba.

—Felicitaciones, campeón mundial.

Felipe De Lucia: —Gracias, gracias.

—Gracias.