Jugar videojuegos durante períodos prolongados podría poner a los jugadores en riesgo de pérdida de audición permanente y tinnitus, según un nuevo informe científico publicado en la Revista Médica Británica de Salud Pública (British Medical Journal -BMJ- Public Health).
En 2022, la Organización Mundial de la Salud (OMS) se asoció con la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT) para publicar pautas sobre el tiempo que las personas pueden escuchar sonidos de manera segura sin correr el riesgo de pérdida de audición. La cantidad de tiempo “permitido” depende del volumen de los sonidos, su intensidad a lo largo del tiempo y la edad de los oyentes.
Por ejemplo, se aconsejó a los adultos que escucharan sonidos de 83 dB durante no más de 20 horas por semana, pero en niños, esa duración se reduce a 6,5 horas. La OMS ha señalado en el pasado que algunas actividades recreativas, como asistir a conciertos o clubes, podrían exceder estas pautas. Según los autores del nuevo estudio, jugar videojuegos durante períodos prolongados y ver e-sports podría poner a muchas personas en riesgo de tinnitus y pérdida de audición permanente en la vida adulta.
Los investigadores tuvieron en cuenta datos recopilados a lo largo de 14 estudios revisados por expertos: materiales de apoyo que exploraron aspectos de los videojuegos, el sonido en una variedad de dispositivos y entornos -incluidos consolas, dispositivos móviles y locales de juegos-, y el uso de auriculares que se fomenta.
Cada uno de los estudios tenía sus propias fortalezas y debilidades al contribuir al informe. Algunos, por ejemplo, se basaron en que los participantes del estudio informaran sobre la correlación percibida entre las sesiones y el tinnitus. Otros no evaluaron directamente la asociación, sino que proporcionaron información relevante, como los niveles de sonido de varios videojuegos y la duración promedio jugada por los participantes del estudio por semana.
Los investigadores concluyeron que los diversos estudios, cuando se analizan juntos, sugieren que los videojuegos podrían ser de hecho una “fuente común de escucha insegura, lo que podría poner a muchas personas en todo el mundo en riesgo de pérdida de audición y/o tinnitus”. Sin embargo, es importante señalar que los hallazgos del nuevo informe no son concluyentes ni estaban diseñados para serlo.
El nuevo informe es un ejemplo de una “revisión exploratoria”, un tipo de estudio que analiza investigaciones existentes sobre un área emergente de interés para mapear datos disponibles e identificar lagunas en el conocimiento que podrían abordarse en futuros estudios. Como tal, tiene varias limitaciones en comparación con estudios más centrados que buscarían responder a una pregunta específica. Además, los métodos no están unificados en los estudios constituyentes, y parte de la investigación utilizada para informar el informe se remonta a las décadas de 1980 y 1990.
A pesar de esto, los autores del estudio advierten que se necesita más investigación para explorar la relación entre los videojuegos y los problemas auditivos, y que se deben tomar medidas para fomentar una escucha segura e informar a los jugadores sobre los posibles peligros a largo plazo asociados con esta forma de arte.