En un giro inesperado, Embracer, gigante de la industria, ha ejecutado una segunda ronda de despidos en 3D Realms y Slipgate Ironworks, sumiendo a estas renombradas compañías en la incertidumbre laboral. Tras una primera oleada de desvinculaciones en diciembre, la noticia de esta nueva sacudida ha dejado a varios afectados en la búsqueda activa de empleo.
3D Realms, con una historia que se remonta a 1987 bajo el nombre Apogee, ha sido testigo de un cambio drástico desde su adquisición por Embracer en 2021. Especializada en shooters retro, la compañía ha sido la fuerza detrás de títulos icónicos como Duke Nukem 3D y Shadow Warrior. Recientemente se encontraba en la edición de proyectos como Ion Fury, Graven, y el esperado Twisted Tower.
Por otro lado, Slipgate Ironworks, una desarrolladora danesa establecida en 2010, ha colaborado estrechamente con 3D Realms en proyectos como Graven. En la actualidad estaban en desarrollo los proyectos Core Decay y el action-RPG Combustion.
Scott Miller, fundador original de Apogee/3D Realms, ha manifestado la preocupación del estudio al indicar que estos dos proyectos en pausa (Core Decay y Combustion) podrían estar en riesgo de cancelación. Entre los despedidos se encuentra el director creativo de Core Decay, elevando aún más las dudas sobre el destino de estos títulos.
La comunidad observa con atención mientras se plantean interrogantes sobre el estado de otros proyectos, como el RTS Tempest Rising y el first-person shooter Phantom Fury, dejando un manto de incertidumbre sobre el futuro.