Las mejores películas de 2023

Durante este año, exploramos una variada selección de películas que han dejado su impronta en la pantalla grande. Desde el inquietante terror de Cuando acecha la maldad hasta la escalofriante travesía de Háblame (Talk to Me), cada largometraje ha aportado su propia singularidad al diverso panorama cinematográfico. Con propuestas que van desde la innovadora animación de Ninja Turtles: Caos mutante (Teenage Mutant Ninja Turtles: Mutant Mayhem) hasta la intensa acción de Misión Imposible: Sentencia Mortal - Parte 1 (Mission: Impossible – Dead Reckoning Part One), estas películas contribuyeron a la riqueza del año cinematográfico. Acompáñanos en este fascinante viaje a través de las historias que marcaron el 2023.

• M3GAN
• Guardianes de la Galaxia volumen 3
• John Wick 4
• Háblame
• Misántropo
• Cuando acecha la maldad
• Evil Dead: El despertar
• Five Nights at Freddy’s
• Air: la historia detrás del logo
• Super Mario Bros: la película
• Ninja Turtles: Caos mutante
• Oppenheimer
• Indiana Jones y el Dial del Destino
• Elementos
• Spider-Man: a través del spider-verso
• Los asesinos de la luna
• Hazme el favor
• La sociedad de la nieve
• Wonka
• Misión imposible: sentencia mortal - Parte 1

Los muñecos asesinos están lejos de ser una novedad dentro del cine de terror y luego de un extenso reinado de Chucky y Anabelle, parecía que al subgénero le quedaba poco por explorar. Sin embargo, durante este 2023 surgió una digna competidora que no solo logró cautivar a la audiencia sino que, gracias a su éxito en taquilla, se permitió coquetear con la idea de fundar su propia franquicia.

M3GAN de Gerard Johnstone exploró la clásica premisa de muñecos asesinos con un enfoque fresco y efectivo, incluyendo dilemas contemporáneos relacionados con la Inteligencia Artificial.

¿El punto de partida? una ingeniera robótica diseña a una muñeca capaz de ser la mejor compañera de los niños y aliada de sus padres. Pero todo se complica cuando esta creación desarrolla autoconsciencia y se vuelve hostil hacia cualquiera que se interponga entre su compañero humano.

Aunque la idea de un muñeco asesino de poco más de un metro pueda parecer cliché y hasta absurda, la película de Johnstone triunfa principalmente gracias a su reparto, su humor irónico, sus escenas de asesinatos brutales y el inesperado carisma de la villana titular que se convirtió en un ícono de Internet.

Guardianes de la Galaxia de 2014 fue, probablemente, la gran sorpresa de la Saga del Infinito de Marvel Studios. La película de un grupo de inadaptados que nadie conocía (ni pedía conocer) consiguió dejar toda solemnidad de lado haciendo que el público estallara en risas y en lágrimas por igual.

Luego de una década en pantalla, llegó el momento de cerrar su arco y decirle adiós a su atrevido director que supo -más que cualquier otro- imprimir un sello personal a las películas del UCM.

La tercera entrega de Guardianes de la Galaxia ofreció algo poco frecuente en el Universo Cinematográfico Marvel: un final satisfactorio para una trilogía. Puede que no sea necesariamente perfecta, que algunos chistes no funcionen del todo, pero se trata de una conclusión digna y llena de amor hacia sus personajes. Una experiencia mucho más personal y madura, con una historia de origen en el centro cargada de emotividad que logró impactar y dejar su huella, incluso, en los espectadores más duros.

John Wick 4 marcó el regreso de Keanu Reeves en el papel del letal antihéroe, cerrando una de las sagas más innovadoras del cine de acción contemporáneo. La película, dirigida nuevamente por Chad Stahelski, elevó la trama a nuevos niveles, alejándose de la simple venganza hacia una narrativa de proporciones colosales.

En esta entrega, Wick se enfrentó a la imparable sociedad High Table, expandiendo la historia a escenarios globales como Nueva York, París, e incluso Osaka. La trama ya no se centra solo en la venganza personal, sino en la supervivencia frente a una legión de asesinos. El filme se destaca por sus escenas de acción ambiciosas y bien construidas, explorando nuevos territorios visuales y convirtiendo sus locaciones en escenarios extraordinarios.

Imparable, sofisticada y precisa, la cuarta entrega de John Wick logró llevar al género a un nivel profundo y artístico. La obra de Stahelski concluye el arco de su protagonista con una celebración audaz para un tipo de cine a menudo subestimado, marcando un precedente en la concepción de la ultraviolencia en la gran pantalla.

En un año en el que el ritmo del terror parecía marcado por propiedades de franquicias conocidas, con secuelas, precuelas y adaptaciones, una película australiana, independiente y dirigida por youtubers logró posicionarse como una verdadera revelación.

Háblame, la ópera prima de los Danny y Michael Philippou, comenzó con su recorrido en el circuito de festivales recibiendo elogios en su paso por Sundance. La productora A24 se aseguró de su distribución y en su llegada a las salas no solo logró sobrepasar diez veces su presupuesto de realización, sino que se convirtió en un verdadero suceso.

Su historia se centra en el personaje de Mia quien, en medio del duelo por la muerte de su madre, acepta el reto de conectarse al más allá a través de una mano embalsamada que funciona como puente de dos mundos. Tras una serie de posesiones voluntarias, las cosas se salen de control y no pasa demasiado hasta que descubren que han desatado una entidad de maldad pura.

Enfrentándose al dolor de la pérdida, la impermanencia de la vida y la incertidumbre del más allá, Háblame es dolorosa y catártica. Con su primera película, los hermanos Philippou presentan al mundo algo profundo y legítimamente aterrador, que se cuela por mérito propio entre lo mejor que el terror pudo ofrecer este 2023.

El regreso tras 9 años de ausencia del director argentino Damián Szifron (Relatos Salvajes), es otro de los grandes aciertos en materia cinematográfica de este 2023. Misántropo (o To Catch a Killer como la llamaron en su idioma original) nos retrotrae a los thrillers de finales de los noventa, de esos que ya no tienen un lugar en Hollywood.

Es la noche de Año Nuevo, los ciudadanos de Baltimore se encuentran en pleno festejo y entre los fuegos artificiales se cuelan disparos que se cobran la vida de decenas de personas sin dejar pista alguna. Una introvertida pero sumamente capaz oficial de policía local, es reclutada por un agente especial del FBI para atar los posibles cabos sueltos y poder dar con el homicida.

Misántropo no teme confrontar a la audiencia con la realidad, exponiendo la existencia del mal y abriendo el debate sobre las motivaciones de un asesino en masa. En sus dos horas de duración, la película de Szifrón se las ingenia para hablar de racismo, portación de armas y odio de clase, para dejar en evidencia a un asesino que es producto de una sociedad alienada. Se trata de una película que no reinventa la rueda, pero se consagra como un exponente destacado dentro del olvidado género policial y debut más que prometedor del creador de Los Simuladores en Hollywood.

Dentro del género terror, quizás, la mayor sorpresa de este año resultó ser la película argentina Cuando acecha la maldad. Luego de un celebrado paso por festivales que incluyó posicionarse entre las ochos películas imperdibles en Toronto y hacerse del premio mayor en Sitges, la película de Demian Rugna llegó a las salas para demostrar que todo lo que se venía diciendo de ella era cierto.

A partir de una premisa original, Cuando acecha la maldad se ambienta en un entorno rural en el cual un hombre es aparentemente poseído por un demonio. Esto desencadena el horror en el pueblo, mientras dos hermanos buscan la forma de advertir el peligro inminente.

Cruda y pesimista. Rugna, que también estuvo a cargo de su libreto, se animó a tomar caminos diferentes a otras películas con temática de posesiones, planteando un universo fresco con reglas propias (y con posibilidad de expandirse en muchas direcciones). Una propuesta para estómagos valientes que es capaz de paralizar por una buena cantidad de minutos a casi cualquier espectador debido a su visceralidad y ritmo imparable.

Tras la trilogía creada por Sam Raimi en 1981, que se convirtió en un referente del cine de terror de serie B, y la remake de 2013 dirigida por el cineasta uruguayo Fede Álvarez, este año llegó a salas el quinto largometraje de la marca Evil Dead (en Hispanoamérica, Posesión Infernal).

Esta nueva entrega de la franquicia titulada Evil Dead: El despertar (Evil Dead Rise) funcionó como un reinicio en un nuevo escenario y con nuevos personajes. En la película dirigida por Lee Cronin (The Hole, 2019), la historia siguió a dos hermanas que se reencuentran luego que sus vidas tomaron rumbos diferentes. Lamentablemente esta reunión familiar, no tarda en volverse una pesadilla cuando los más chicos de la casa descubren una reliquia en el sótano de su edificio. Una que liberará demonios implacables que arrasarán con todo a su paso.

Litros de sangre, escopetas y motosierras mediante, la película logra cumplir con su objetivo de impresionar, entretener y entregar una historia fresca para los recién llegados a la franquicia de los ‘deadites’.

Casi una década después del lanzamiento del primer videojuego y de su anuncio inicial, la adaptación live-action de Five Nights at Freddy’s llegó a las salas como un gran evento cinematográfico. Las primeras críticas resultaron dispares, pero el público la abrazó al punto de convertirla en el mayor acierto del año para Universal Pictures y Blumhouse.

¿Los factores a su favor? Una gran base de fanáticos del juego original, una clasificación para mayores de 13 que permitió a espectadores de diversas edades disfrutarla y una estrategia inteligente de doble lanzamiento en cines y en streaming. Como resultado, Five Nights at Freddy’s se posicionó como la película de terror más exitosa del 2023, una que con pocos personajes, una sola locación y mucho clima, hace historia y demuestra su potencial de franquicia para el público joven.

Luego de una breve pausa como director, Ben Affleck volvió a pararse detrás de cámaras para contar la historia detrás de las zapatillas que salvaron a Nike y dejaron un precedente en el mundo corporativo y deportivo. ¿El resultado? Una historia que consigue emocionar con algo improbable: un acuerdo comercial.

Air: La Historia Detrás del Logo (Air) se ambienta en 1984, cuando Nike estaba en una posición irrelevante en el mercado y decidió apostar todo en convertir a Michael Jordan en su embajador de marca.

Lejos de centrarse en el ícono deportivo, esta historia pone el foco en el ejecutivo Sonny Vaccaro, interpretado por Matt Damon, en su viaje hacia un objetivo que parece imposible de alcanzar.

Aunque la historia es en gran medida conocida, gracias a un guión hábil, actuaciones excepcionales y una dirección que aprovecha las virtudes de todo el equipo, el drama corporativo toma la senda de una fábula inspiradora más que un relato histórico. Lo nuevo de Affleck se percibe como un proyecto realizado con dedicación, demostrando que la magia del cine radica en la forma en que se nos cuenta la historia.

Super Mario Bros: la película, una producción que se erige como una de las cintas más exitosas del año, trae a la pantalla grande a los entrañables personajes del famoso videojuego. La historia sigue a los fontaneros Mario y Luigi, quienes, tras perderse en una misteriosa tubería, emergen en un nuevo mundo lleno de magia. Cuando los hermanos se separan, Mario emprende una épica búsqueda para encontrar a Luigi, contando con la ayuda de Toad y la princesa Peach. Este viaje desata una serie de divertidas y emocionantes aventuras.

El largometraje ha logrado un equilibrio excepcional entre la accesibilidad para el público en general y los chistes internos dirigidos a los fanáticos de la franquicia. Gracias a la animación de alta calidad de Illumination, el estudio responsable de exitosas franquicias como Minions y Sing, la película presenta texturas casi realistas y colores vibrantes que se fusionan perfectamente con los momentos cómicos y las aventuras del querido Mario. Este éxito no solo se refleja en la respuesta positiva del público, sino también en la cifra de taquilla, superando la asombrosa marca de 1359 millones de dólares.

La película nos introduce en el mundo de las icónicas Tortugas Ninjas en un largometraje que adopta una premisa simple pero efectiva y sumamente divertida. Los carismáticos personajes, criados en secreto por su figura paternal adoptiva, la rata Splinter (interpretada por Jackie Chan), están conscientes de los peligros que acechan en la superficie y de la percepción de los humanos respecto a esa área que ellos consideran hogar.

A pesar de haber vivido en las sombras y de haber dedicado su tiempo a perfeccionar sus habilidades marciales, estos adolescentes no pueden resistir la curiosidad de explorar el brillante y bullicioso mundo que siempre estuvo más allá de su alcance.

Sin embargo, lo que destaca y le confiere a esta película un lugar destacado entre lo mejor del año no es solo su historia, sino también su innovadora animación. Siguiendo los pasos revolucionarios de Spider-Man: un nuevo universo (Spider-Man: Across the Spider-Verse), esta película de las Tortugas Ninja se convierte en un hito del 2023 al adoptar un estilo de animación único como un claro homenaje a los cómics.

Oppenheimer, la obra dirigida por Christopher Nolan (El origen), ofrece una mirada a la vida de Robert J. Oppenheimer, conocido cómo el padre de la bomba atómica. Nolan elige una narrativa única al omitir la infancia y los primeros años del físico, concentrándose en su trayectoria desde los estudios de teoría cuántica en Estados Unidos hasta su papel crucial como director del Proyecto Manhattan. La película, que se sumerge en saltos temporales y largas secuencias en blanco y negro, destaca por la forma en que visualmente explora la complejidad del pensamiento de Oppenheimer, utilizando montajes de partículas y estrellas moribundas.

La genialidad de Nolan se manifiesta no solo en la dirección única de la historia, sino también en la elección de un elenco estelar que incluye a Cillian Murphy (Peaky Blinders), Florence Pugh (Midsommar), Robert Downey Jr. (Iron Man: el hombre de hierro), Emily Blunt (El diablo viste a la moda) y Matt Damon (Jason Bourne), entre otros. Estas actuaciones destacadas contribuyen al éxito arrollador de la película, que ha recaudado más de 951 millones de dólares en todo el mundo hasta la fecha.

Oppenheimer no solo se consolida como un fenómeno en taquilla, sino que también afirma la posición de Christopher Nolan como uno de los cineastas más exitosos de 2023, demostrando una vez más su capacidad para abordar proyectos ambiciosos y desafiantes con maestría.

Indiana Jones y el Dial del Destino, ambientada en el final del verano de 1969, marca el regreso del icónico arqueólogo interpretado por la leyenda de Hollywood, Harrison Ford (Blade Runner). A punto de jubilarse, Jones se ve obligado a ponerse el sombrero una vez más y embarcarse en una nueva aventura contra el tiempo. La trama se centra en la misión de recuperar un dial legendario que posee el poder de cambiar el curso de la historia. Acompañado por su ahijada, interpretada por Phoebe Waller-Bridge (Fleabag), Jones se encuentra enfrentando a Jürgen Voller (Mads Mikkelsen), un nazi decidido a cumplir con sus compromisos.

La narrativa, que captura la esencia del personaje icónico, ofrece una mezcla de acción, intriga y humor característicos de la franquicia. Con Harrison Ford a la cabeza, la película cumplió en ser una emocionante continuación de las hazañas del intrépido arqueólogo, consolidando aún más su lugar en la historia del cine como uno de los personajes más queridos y duraderos.

Elementos se presenta como la más reciente creación del afamado estudio Pixar, reconocido por sus éxitos como Toy Story o Buscando a Nemo (Finding Nemo - 2003). En esta ocasión, la trama se desenvuelve en la vibrante metrópolis de Ciudad Origen, donde conviven individuos vinculados a los elementos de fuego, agua, tierra y aire. La narrativa sigue a Ember, una joven fuerte, astuta y decidida, cuya conexión con Wade, un chico sensible, carismático y sereno, transforma su percepción del mundo que los rodea.

A lo largo de la película, se exploran diversas temáticas a través de sus protagonistas. Por un lado, se reflexiona sobre la importancia de las tradiciones familiares y cómo es esencial seguir las pasiones personales, independientemente de las presiones sociales y culturales. Por otro lado, se adentra en la complejidad del primer amor y cómo nuestras inseguridades se manifiestan en estas situaciones.

Siguiendo la tradición de Pixar, la película ofrece profundidad para el público adulto, al mismo tiempo que brinda momentos divertidos para la audiencia más joven.

La continuación de Spider-Man: un nuevo universo (Spider-Man: Into the Spider-Verse - 2018) nos sumerge en un mundo donde Miles Morales, el joven que descubrió que cualquiera puede convertirse en un héroe, enfrenta una decisión monumental bajo la mirada expectante de todo el mundo. El joven es convocado por Gwen Stacy para emprender una misión crucial: salvar múltiples universos de la amenaza de La Mancha, un antagonista peligroso y catastrófico. A pesar de su inexperiencia, Miles se embarca en esta tarea para rescatar a los Spider-Man de una inminente catástrofe.

La película se destaca por su enfoque estilizado y revolucionario, ofreciendo una combinación única de arte en 2D y 3D, diferenciándose así de las producciones animadas convencionales centradas en el realismo. Bajo la dirección de Joaquim Dos Santos, Kemp Powers y Justin Thompson, el largometraje ha logrado captar la atención del público y recibir elogios de la crítica. En términos de taquilla, la secuela ha sido un rotundo éxito, superando ampliamente su presupuesto de 100 millones de dólares al recaudar la asombrosa cifra de 690 millones de dólares.

El impacto visual y narrativo de esta secuela ha consolidado su posición como un referente en el género de películas animadas.

Los asesinos de la luna dirigida por Martin Scorsese (Taxi Driver) y protagonizada por Leonardo DiCaprio (El renacido), Lily Gladstone (Vidas de mujer) y Robert De Niro (El irlandés), nos sumerge en una historia cautivadora que actualmente está recolectando premios y nominaciones por parte de los críticos.

La trama se centra en Ernest y Mollie Burkhart, interpretados por DiCaprio y Gladstone, una pareja que reside en el pueblo de Osage. En este contexto, el pueblo nativo americano se convirtió en el más próspero de Estados Unidos tras el descubrimiento de petróleo en sus tierras.

La narrativa profundiza en la explotación y los asesinatos perpetrados por oportunistas que ansían apoderarse de las riquezas petroleras, contada con maestría por Scorsese, quien la presenta de manera lenta pero impactante, y en momentos, de manera brutal y cruda. La película revela de manera escalofriante el genocidio sufrido por los nativos americanos.

La nueva comedia con clasificación R, protagonizada por Jennifer Lawrence (Los juego del hambre), narra la historia de Maddie, una joven que, al borde de perder su hogar de la infancia, se ve atraída por un inusual anuncio de trabajo. La propuesta implica salir en una cita con Percy, un introvertido joven de 19 años cuyos adinerados padres buscan desesperadamente que tenga una experiencia sexual antes de partir a la universidad. Maddie, desinteresada en gran parte de su vida, acepta esta misión sin dudarlo.

La película, inicialmente enfocada en explorar la disparidad de experiencias entre la clase trabajadora y los ricos, evoluciona hacia la conexión única entre los opuestos, centrando su atención en la exploración de las distintas personalidades de Percy y Maddie. Jennifer Lawrence, en un papel ácido y alejado de sus registros habituales, emerge como el corazón de la película, llevando la historia más allá de la comedia superficial. La trama se adentra en los dramas familiares diarios y los traumas que enfrentan los personajes, demostrando la versatilidad actoral de Lawrence y elevando la película a un nivel más profundo.

J.A. Bayona, director aclamado por su maestría en el género de películas catastróficas, demuestra una vez más su habilidad al sumergirse en la adaptación de la impactante historia del accidente de los Andes en colaboración con Netflix. Conocido por su previa obra, Lo imposible (The Impossible - 2012), Bayona se sumerge en el vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya de 1972, destinado a transportar a un equipo de rugby a Chile, que termina estrellándose en las imponentes montañas y dejando solo a unos pocos supervivientes.

Más allá de la indudable ejecución técnica impecable y el destacado elenco, lo más destacado de esta película es la perspectiva única que Bayona aporta a esta historia conocida. En lugar de centrarse exclusivamente en aquellos que lograron sobrevivir, el corazón de la trama se enfoca en aquellos que, lamentablemente, no pudieron reunirse nuevamente con sus seres queridos. Este enfoque narrativo añade una capa de profundidad emocional a la historia, explorando las consecuencias humanas más allá de la mera supervivencia física, resaltando la complejidad de las decisiones en situaciones límite.

En medio de una catarata de blockbusters, Wonka era un título que generaba más dudas que adeptos. En primera instancia se trataba de una tercera película sobre el famoso chocolatero de Roald Dahl que llegaba en un momento en el que la interpretación de Johnny Depp de 2005 todavía estaba fresca en la memoria del público. A su vez, se trataba de una precuela ambientada años antes de la historia que todos conocemos y además, sería un musical.

Sin embargo, los nombres involucrados detrás de cámaras nos invitaban a confiar y creer. El ganador del BAFTA, Paul King, se hizo cargo de la dirección a partir de un guión que coescribió con Simon Farnaby, ambos talentos conocidos por su aporte a la franquicia Paddington.

¿El resultado? Una película que logra combinar perfectamente los grises entre lo tierno y tenebroso. Wonka, sale airosa gracias a la dosis justa de magia, espectacularidad y color, con un protagonista a medida que nos recuerda a la época dorada de los musicales de Hollywood.

En esta entrega de la saga de Misión Imposible, nos introducimos nuevamente en el mundo de Ethan Hunt, encarnado por Tom Cruise (Top Gun: Maverick), y su carismático equipo, quienes se embarcan en su misión más arriesgada hasta la fecha: hallar, antes de que caiga en las manos equivocadas, una nueva y aterradora arma que amenaza a la humanidad en su totalidad.

La trama, impulsada por esta premisa simple pero intensa, explora el pasado de Hunt, desencadenando una carrera frenética alrededor del mundo donde el control del futuro y el destino del planeta dependen de unos pocos personajes.

A pesar de pertenecer a la franquicia de Misión Imposible, esta entrega sigue desafiándose a sí misma, especialmente en lo que respecta a las secuencias de acción. Cada película se expande en escala y ambición, con Tom Cruise liderando con audacia y llevando a cabo hazañas que mantienen un equilibrio entre lo real y lo ficticio en un mundo cinematográfico que cada vez más recurre al fondo verde en lugar de locaciones auténticas. En definitiva, Misión Imposible: Sentencia Mortal - Parte 1 supera las expectativas, brindando una de las experiencias más impactantes en la gran pantalla.