Se acerca fin de año y todos los ojos de la industria de los videojuegos están puestos en la ceremonia de The Game Awards que se celebra el 7 de diciembre. La expectativa no solo se centra en saber quiénes serán los ganadores de cada una de las categorías sino también en conocer cuáles son los anuncios y tráilers que se presentarán durante el show.
Más allá de lo que será propiamente el evento, ya hay varias cosas para analizar en la previa debido a que las nominaciones ya están publicadas y porque siempre hay una forma de debate público en redes, prensa y grupos de amigos sobre quienes serán los ganadores, perdedores y sorpresas en cada una de las nominaciones.
En esta nota vamos a señalar a algunos de los títulos que ya podemos catalogar como derrotados en The Game Awards, debido a que se esperaba que tuvieran más nominaciones de las que tuvieron, o bien, estar al menos nominados a alguna de las ternas. Es importante señalar que la selección de los nominados la hacen medios especializados alrededor de todo el mundo a través de votaciones.
Hogwarts Legacy
Harry Potter es una de las franquicias más populares y queridas en la actualidad y el juego basado en su universo, que salió el 10 de febrero de este año, fue un título muy esperado por sus fanáticos. Cada vez que salen obras de este calibre, centradas en una saga tan grande, hay un alto nivel de cautela debido a que no siempre logran cumplir las expectativas previas.
Para sorpresa de muchos, donde me incluyo, Hogwarts Legacy sí cumplió su cometido y se trata de una entrega que destaca por brindar a los jugadores una verdadera aventura dentro del mítico colegio de Hogwarts. Rápidamente el título se convirtió en un éxito de ventas y, además, fue uno de los primeros grandes lanzamientos del año, por lo que tuvo mucha relevancia a nivel prensa y streamers en el mundo.
Es verdad que a nivel mecánicas el juego no innovó demasiado, pero no deja de ser una gran experiencia, motivo por el que llamó la atención de todos al enterarnos de que no estaba nominado a ninguna de las categorías en The Game Awards. Obviamente, estar o no estar nominado no le quita ningún tipo de mérito y sigue siendo un gran lanzamiento pero, sin lugar a dudas, es un título del que se esperaba más presencia en el evento.
Starfield
No podemos hablar de expectativas sin mencionar a Starfield. Quizás, uno de los videojuegos más esperados de los últimos años. El juego de Bethesda fue anunciado por primera vez en la E3 de 2018 y, luego de mucho silencio y postergaciones, terminó saliendo en septiembre de este año.
La premisa de Starfield es tan simple como compleja: una inmensa aventura espacial de rol donde podremos recorrer un montón de planetas, biomas y facciones, con un montón de posibilidades a disposición para vivir las aventuras que queramos experimentar. Además, el juego cuenta con el extra de ser uno de los primeros títulos fuertes exclusivos de Xbox desde que adquirió a Bethesda.
Es difícil que un juego con tanta ambición deje contento a todos, más si tenemos en cuenta la gran cantidad de mecánicas y sistemas que tiene en funcionamiento. Por este motivo, el recibimiento de Starfield fue variado, ya que se le destacan muchas cosas y se le critican tantas otras. Teniendo en cuenta su ambición, el resultado me parece más que positivo y creo que este título puede mejorar mucho con el paso del tiempo y el agregado de nuevos contenidos.
Sin embargo, no podemos negar que quienes esperaban esta entrega pretendían desde lo más profundo de su corazón, que el juego estuviera dentro de la discusión a mejor juego del año. Esto no sucedió, ya que solo está nominado a mejor juego de rol, algo que le queda muy chico por todo lo que se esperaba de él.
Octopath Traveler 2
La secuela de la saga desarrollada por Square Enix y Acquire salió en febrero de este año y se trata de un juego de rol clásico con combate por turnos, donde destaca su profunda historia y su estética muy llamativa. Quienes disfrutaron de esta entrega, la posicionaron como un muy juego y, potencialmente, una de las mejores producciones del género en el año.
Este es el caso que más me llama la atención que no haya tenido ninguna nominación, ni siquiera entre los juegos de rol, teniendo en cuenta que su primera entrega fue nominada a varias categorías allá por 2018. Una de las principales causas de esto puede ser que su lanzamiento, en febrero, quedó muy lejos de las nominaciones y porque tampoco tuvo mucha relevancia por fuera del público que ya consume este género.
Por otro lado, Sea of Stars, un juego independiente que podríamos catalogar del mismo estilo, sí logró la nominación en la categoría a mejor juego de rol siendo una producción mucho más pequeña que Octopath Traveler 2. Sobre esto, podemos decir que este título tuvo más repercusión debido a la sorpresa que generó al ser un juego independiente y al estar disponible desde el primer día a través de la suscripción de Xbox Game Pass.
Por estos motivos, considero que la ausencia de Octopath Traveler 2 a las nominaciones de The Game Awards de este año, se debe a que no logró repercutir por fuera de quienes ya esperaban la entrega. No logró ser masivo. Las votaciones las hacen los medios de todo el mundo, por lo que también el evento tiene un poco de concurso de popularidad, si lo pensamos desde un lugar más frío.