Netflix se ha convertido en un colaborador invaluable para el aclamado director David Fincher (El club de la pelea), respaldando financieramente proyectos como la serie Mindhunter y la película Mank.
En una entrevista con Le Monde, Fincher elogió a Netflix por “no cometer los mismos errores que otros estudios”. El director expresó su frustración con los grandes estudios de cine, señalando la resistencia a gastos adicionales, especialmente en efectos especiales de alta calidad: “Cuando les dices: ‘Tengo que hacer estos efectos especiales en 4K’, su primera respuesta es: ‘¿Por qué hacerlo tan caro?’. Netflix nunca ha puesto reparos a este tipo de elección”.
El director no dudó en criticar las salas de cine tradicionales durante la entrevista: “El cine tendría que convertirse en un lugar de vanguardia, y no en ese lugar húmedo, maloliente y grasiento que sigue siendo, con muy pocas excepciones, escatimando en todos los gastos necesarios”.
La postura de Fincher ha generado opiniones diversas, ya que difiere significativamente de la de otros cineastas como Martin Scorsese y Christopher Nolan, quienes constantemente abogan por la experiencia cinematográfica en las pantallas de cine. Sin embargo, Fincher sostiene su posición, respaldando a Netflix y catalogando a la plataforma cómo “el futuro del cine”.
Fincher acaba de estrenar su última película El asesino (The killer), también producida por Netflix, donde explora la mentalidad de un asesino interpretado por Michael Fassbender (Assassin’s Creed).