Keanu Reeves, nacido el 2 de septiembre de 1964 en Beirut, Líbano -para mudarse rápidamente a Canadá-, ha sido una figura constante en la industria cinematográfica. Su carrera ha sido marcada por éxitos comerciales y papeles icónicos, pero también ha participado en producciones que no recibieron la misma atención. Aunque es conocido por sus roles en franquicias como The Matrix (con cinco películas en su haber, contando Animatrix) y John Wick (con cuatro películas), es interesante explorar algunas de las películas menos recordadas de su filmografía.
Uno de los primeros proyectos que muchos pasan por alto es Vivir sin ti (Permanent Record, 1988), un drama adolescente en el que Reeves interpreta a Chris Townsend. La película aborda temas de pérdida y duelo, y aunque no tuvo un gran impacto en taquilla, destaca por la actuación de Reeves en clave dramática y en un contexto diferente al de sus roles posteriores.
El abogado del diablo (Devil’s Advocate, 1997) es otra película que a menudo queda algo olvidada. A pesar de contar con un elenco estelar encabezado por Al Pacino y Charlize Theron, este thriller de abogados sobrenatural dirigido por Taylor Hackford no ha recibido la misma atención que otras en la filmografía de Reeves. En ella, interpreta a Kevin Lomax, un joven abogado tentado por el lado oscuro. El duelo interpretativo con Al Pacino lo lleva a acomodarse en un rol mucho más pasivo hasta el final cuando estalla. Debería considerarse más de culto que lo que se la considera.
En Dulce Noviembre (Sweet November, 2001), Reeves comparte pantalla con Charlize Theron nuevamente en un drama romántico. La película cuenta la historia de un hombre de negocios que experimenta un cambio radical en su vida cuando conoce a una mujer que le propone pasar un mes juntos. Aunque no fue un gran éxito, ofrece una perspectiva diferente del talento de Reeves en el género romántico. Es remake de una película de 1968 con diversos cambios en su narrativa.
La casa del lago (The Lake House, 2006), en la que comparte créditos con Sandra Bullock, es otra joya pasada por alto en la filmografía de Reeves. Este romance con elementos de ciencia ficción presenta a los personajes de Reeves y Bullock intercambiando cartas a través del tiempo. Aunque la premisa es única, la película no alcanzó el mismo reconocimiento que otras obras del actor. Datos de color: está dirigida por el argentino Alejandro Agresti, es una remake de una película coreana llamada Il Mare (Siwolae) y fue el regreso de ambos protagonistas en conjunto luego de Máxima Velocidad (1994).
La comedia El robo de tus sueños (Henry’s Crime, 2010) es otro título que merece una mención en la lista de las películas más olvidadas de Reeves. En este film que mezcla romanticismo, comedia y un atraco bancario interpreta a un hombre que, después de cumplir una condena por un crimen que no cometió, decide realizar el atraco real que lo llevó a prisión. Aunque no tuvo un gran impacto comercial, ofrece una faceta diferente de Reeves en un papel más ligero acompañado por Vera Farmiga y James Caan. Aquí Keanu también produce.
En resumen, la carrera de Keanu Reeves abarca una amplia gama de géneros y estilos, y aunque es reconocido por sus éxitos, estas películas menos recordadas también contribuyen a la riqueza y diversidad de su trayectoria cinematográfica.