Hoy en día, Forza Horizon es sinónimo de éxito en lo que respecta a los simuladores de carrera de mundo abierto, por su propuesta fidedigna a la realidad, sin perder la esencia de ser un videojuego que busca entretener y aportar horas de diversión. Pero esta no es la única saga de la famosa franquicia automovilística de la familia Xbox.
Después de unos largos seis años sin nuevos títulos bajo el sol, Turn 10 Studios retoma las pistas con la icónica Forza Motorsport en su octava entrega. Exclusiva de Microsoft y Xbox desde sus inicios hasta la actualidad, nos lleva a un planteo alejado de la conducción de mundo abierto para centrarnos pura y exclusivamente en la competición de circuitos cerrados. Y cabe destacar que la manera en que lo ejecuta roza la excelencia con absolutamente nada que envidiarle a su hermano menor Horizon.
En un año muy cargado para el mundo de los videojuegos, tenemos diferentes propuestas para un mismo género, esto es algo que tampoco el mundo de las carreras virtuales se vio exento. Hace poco más de un mes el lanzamiento de The Crew Motorfest fue bastante esperado pero no alcanzó para satisfacer las necesidades de un mercado que si bien no está saturado, sí ha elevado bastante la vara en lo que se espera como base en un juego dentro de esta categoría. Lo que no es para menos considerando grandes juegos como los anuales F1 o Gran Turismo. El hilo conductor en todas estas propuestas es el automovilismo, algunos explorando las bondades de un mundo abierto y otros limitando a la conducción competitiva con algunas opciones narrativas en solitario. Forza Motorsport no ofrece nada de esto y ese es su encanto.
Una propuesta simplificada y directa, que no peca de escueto sino que explota la posibilidad de simplemente disfrutar el manejo en circuitos tanto en solitario como en multijugador. Motorsport no exige más del conductor que sus ganas de disfrutar y la pureza de su propuesta brilla con la ejecución de parte de Turn 10 Studios que da en el clavo. No hay excesos, no hay pomposidad y no hay una sobrecarga de información para disfrazar un juego vacío o carente de contenido real como le ha pasado a otros títulos este mismo año. Realmente ha sido un reencuentro refrescante con la idea de un disfrute más simple y despojado del que esperaba.
Pero atención, que tal vez se pueda sentir limitado el contenido actual con la promesa de las actualizaciones constantes para el título y los paquetes de pistas por venir pero no creo que sea un punto negativo salvo que sea lo único que juegues absolutamente todos los días. Es, más bien, una forma tal vez estratégica de cortar camino en pos de haberle dedicado más tiempo al desarrollo de la parte técnica general, desde la excelente respuesta de los autos hasta el apartado visual, pasando por unas opciones de accesibilidad que merecen un párrafo aparte más adelante.
Forza Motorsport brilla, como su franquicia lo demanda, en la calidad gráfica que ofrece y el óptimo rendimiento. Incluso en las computadoras que no están al tope de gama respecto al hardware actual. Su funcionamiento general es digno de halagar por hacer que, a pesar de los requisitos para PC, corra de manera fluida sin problemas para maniobrar a alta velocidad y obtener una buena respuesta dentro de las pistas sin pérdidas de cuadros por segundo. Los distintos circuitos tendrán también una variedad de condiciones climáticas para ver que tal nos desempeñamos bajo la lluvia y cuán bien adaptamos nuestros autos a las inclemencias del tiempo. Se aprovecha de esto para hacer despliegue del poderío visual que tiene esta IP cuando se trata de representar la realidad con una calidad envidiable.
Pero lo más importante siempre serán los controles y cuánto han innovado para traer mejoras sustanciales en la experiencia de usuario (ya sea para volante tanto como para mandos). A veces la innovación de estos aspectos se le exige un poco más a títulos deportivos anuales pero incluso aquellos que no tenían actualizaciones desde hace años, como el caso de Motorsport, le toca ponerse al día y estar a la altura de lo que se espera en un arcade de carreras. La respuesta general utilizando el mando es de las mejores que probé este año y las físicas del coche son excelentes respecto a su comportamiento. Se nota la dedicación por parte del estudio por ofrecer una experiencia de alta fidelidad.
La interfaz de navegación y opciones es otro aspecto destacable que acompaña la renovación del título en pos de una dosificación de la información que se le ofrece al usuario que no sature ni abrume. Tendremos el apartado para jugar en solitario con subcategorías de pistas y formatos que iremos desbloqueando de forma paulatina, a medida que completamos cada circuito; sumándole la sección multijugador con eventos diarios y el formato competitivo con clasificaciones en base a nuestro desempeño general.
Con los modos de juegos tendremos la Builder’s Cup para quienes queramos explorar la variedad de coches en distintos circuitos de competición, en conjunto con un sistema de nivel de piloto y autos. Se irán desbloqueando más a medida que completamos los desafíos y cada uno ofrece un vehículo particular a modo de carta de presentación que, a pesar de ser un formato clásico, la conducción es tan divertida que no cansa para nada la propuesta de recorrer pistas durante horas. Cada circuito completado nos recompensa con distintas partes para tunear el vehículo, que si estás falto de conocimiento, tiene la posibilidad de elegir la mejor configuración con un solo botón. El garaje, como siempre, es una parte esencial para mejorar el coche y que gane mayor competitividad frente al resto de los adversarios, así como para ajustarlo a las preferencias de cada usuario.
Por último, el modo multijugador permite partidas con matchmaking, acorde a rangos entre los jugadores, que deberán previamente jugar un formato de clasificatoria para posicionarse en un ranking global. También existe la posibilidad de crear partidas privadas para enfrentarnos con amigos y armar nuestros propios torneos. Por supuesto, las carreras online son el encanto de estos títulos para quienes buscan el desafío constante y la mejora personal, siempre y cuando desactiven el chat de voz pues se puede poner un poquito intenso.
Pero creo que uno de los aspectos más destacables no reside solo en su exquisitez gráfica o las excelsas físicas de los vehículos. Es en la importancia de la inclusión de usuarios con visión disminuida gracias a un nuevo sistema de accesibilidad que permite habilitar un asistente auditivo que guía al jugador para que pueda conducir sin problemas. El grado de asistencia puede ser modificado a gusto, así como distintas categorías dentro de esto para que sea lo más personalizable posible acorde a las necesidades de cada usuario, alejándose de una jugabilidad capacitista para brindar un juego inclusivo para aquellas personas con problemas de visión.
Forza Motorsport es una de las mejores propuestas del año para quienes busquen un juego simple pero efectivo. Sus puntos negativos se encuentran en lo escueto de su contenido actual (20 pistas) y en la repetición inevitable de este tipo de títulos deportivos que a veces padecen la imposibilidad de innovar constantemente. Pero cumple con creces en lo que uno buscaría respecto a diversión y fidelidad en partes iguales, con una experiencia general muy positiva para el usuario que les prometo no aburre en ningún momento. Si el equipo de Turn 10 Studios logra mantener un buen ritmo de actualizaciones para no perder la atención de sus usuarios, sin dudas la octava edición de Forza Motorsport no caerá en el olvido.