Palpitando Halloween: Zombies en el cine - Los inicios

Los muertos vivos son uno de los géneros más reconocidos del terror, ¿cómo surgió el movimiento?

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Los Usurpadores de Cuerpos
Los Usurpadores de Cuerpos

Hoy el género de los zombies es uno de los más reconocidos del cine occidental, con altos y bajos (cómo todos los géneros) se mantuvo siempre presente evolucionando a medida que pasaron las etapas. Aunque surgió de un libro llamado “The magic island” escrito por William B. Seabrook y publicado a finales de la década de 1920, y tuvo algunas adaptaciones en teatro, se lo considera uno de los pocos géneros propios del séptimo arte, como es el caso del western.

En un principio se basaba en el concepto haitiano (el libro escrito por Seabrook habla de su tiempo viviendo en Haití) y en lugar de tener a un grupo gigante tipo enjambre, se trataba más de un ejército manejado por un chamán a través del voodoo. Eso llevó a la primera película de la que se tiene registro: Zombie Blanco (White Zombie, 1932), dirigida por Victor Halperin; protagonizada por Bela Lugosi -haciendo de Legendre, el maestro voodoo- y realizada con muy bajo presupuesto, usaba decorados de otras películas de Universal Studios y se centraba en una trama arraigada al verosímil haitiano.

La película funcionó y surgió automáticamente la idea de una secuela que terminó siendo la alocada Revolt of the zombies, de 1936, sin la participación de Lugosi. El mundo comenzó a adoptar a los no muertos con ese espíritu gótico y grandilocuente de Universal, pero en 1943 se agregaron nuevos parámetros al género con Yo caminé con un zombie (I Walked with a zombie), un clásico dirigido por Jacques Tourneur y que se iba a algo más intimista y “humano” y menos gigante. Esto fue configurando el gran paso que iba a continuar.

Dawn of the Dead (titulada
Dawn of the Dead (titulada Zombi en España, El amanecer de los muertos en Argentina y Venezuela y El amanecer de los muertos vivientes en México)​ es una película de terror de 1978 dirigida por George A. Romero.

Y mientras aparecieron varias películas menores para el género y con la ciencia ficción tomando control de la situación, los zombies desaparecieron del favoritismo. En su lugar se colaban cintas como Los usurpadores de cuerpos (Invasión of the body snatchers, 1956), en donde encontrábamos extraterrestres copiando cuerpos humanos y tomando posesión de su vida.

En 1968 se alteró el mundo zombie para siempre, porque ese año se estrenó La noche de los muertos vivos (Night of the Living Dead). Dirigida por George Romero, sentó las bases de lo que sería el género para muchas (muchas) generaciones; grabada en un sucio y desprolijo blanco y negro, no sólo tenía reglas muy claras (muertos que vuelven, disparar a la cabeza, lento caminar, podredumbre) sino que estructuralmente también era disruptiva (no se detenía en la explicación del fenómeno, al final asesinan a un afroamericano vivo creyendo que era un zombie).

Esto llevó a un reverdecer de este monstruo, con la trilogía que continuaba con El amanecer de los muertos (Dawn of the Dead, 1978) y El día de los muertos (Day of the Dead, 1985) por parte de Romero, más centenares de cintas de todos los países del mundo. Italia por ejemplo, que se ufanaba de haber tenido su propia franquicia a partir de El Amanecer de los muertos, con secuelas no oficiales.

El videoclip musical Thriller, de Michael Jackson, dirigido por John Landis en 1984 y la parodia de El Regreso de los Muertos Vivientes (Return of the Living Dead, 1985) fueron hitos de un género que nunca se fue pero que requería un cambio. Productos como La Serpiente y el Arco Iris (The Serpent and the Rainbow, 1987) de Wes Craven y Braindead (1992) de Peter Jackson fueron el canto de cisne de una era. Llegaría otra…

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