Margot Robbie es hoy una de las actrices más reconocidas de Hollywood, con un fandom que generó a partir de sus personajes basados en grandes franquicias del mundo del entretenimiento. Pero su carrera, aunque corta, ha sido contundente.
Margot Elise Robbie (su nombre completo) es australiana y nació en 1990. Su primer gran paso lo dio en la televisión de su país con la serie Neighbours, donde participó en más de 300 episodios. Luego viajó a Estados Unidos y todo comenzó a suceder.
En 2013 tiene un papel secundario en la comedia dramática de Richard Curtis (el director de Realmente amor y gran guionista de comedias románticas) Cuestión de tiempo (About Time, 2013) en una historia sobre el amor entre un padre y un hijo que involucra viajes en el tiempo. Y ese mismo año llega al boca a boca del mundo participando como la pareja de Leonardo DiCaprio en El lobo de Wall Street (The Wolf of Wall Street). Su secuencia cargada de sensualidad y el ser dirigida por Martin Scorsese, la llevaron a lo más alto.
En 2015 comienza a coprotagonizar (un ascenso meteórico dada su experiencia) en las películas Focus: Maestros de la Estafa (junto a Will Smith) y Z for Zachariah (junto Chiwetel Ejiofor y Chris Pine), y en 2016 coquetea con la acción en La leyenda de Tarzán (The Legend of Tarzan) haciendo de Jane Clayton, la esposa del protagonista.
Se convierte en ícono de la cultura pop interpretando a Harley Quinn, por primera vez en live action, en Escuadrón Suicida (Suicide Squad, 2016) que la lleva a participar en otras películas de esta franquicia como Aves de presa y la fantabulosa emancipación de una Harley Quinn (Birds of Prey and the Fantabulous Emancipation of One Harley Quinn, 2020) y El Escuadrón Suicida (The Suicide Squad, 2021). Su personaje se vuelve central en esos años del Universo DC, además de convertirse en role model de muchas cosplayers internacionalmente.
Pero el 2017 se transforma en el año seminal de su conversión en actriz a tomarse en cuenta: Yo, Tonya (I, Tonya) -basada en hechos reales- se vuelve la llave de su primera nominación a los Oscar como actriz protagónica; algo que se repetiría en El escándalo (Bombshell, 2019), donde comparte cartel con Charlize Theron y Nicole Kidman.
Después de personificar a Sharon Tate en Había una vez en Hollywood (Once Upon a Time in... Hollywood, 2019) dirigida nada más y nada menos que por Quentin Tarantino, Margot Robbie arranca una escalada que la lleva a protagonizar papeles con los mejores directores del Hollywood actual: Ámsterdam (2022) de David O. Russell, Babylon (2022) de Damien Chazelle o Asteroid City (2023) de Wes Anderson son ejemplo de esto.
No hay que olvidar su carrera como productora, que inició en 2017 con Yo, Tonya y la llevó a producir películas con mucho ruido mediático como Hermosa Venganza (Promising Young Woman, 2020).