Tras colgar el escudo del Capitán América, Chris Evans probó suerte con una variada cantidad de proyectos y géneros. No solo le dio voz a Buzz Lightyear en su spin-off animado, sino que se batió a duelo con Ryan Gosling en El hombre gris (The Gray Man), e incluso, protagonizó una comedia romántica de acción junto a Ana de Armas para Apple TV+. Sin embargo, entre estas producciones hubo una que había atraído su interés que no logró prosperar: La tiendita de los horrores (The little shop of horrors).
La comedia negra sobre un florista y una planta carnívora con sed de sangre fue desarrollada por primera vez por Roger Corman en 1960, una película rodada en tres días que se convirtió en un clásico de culto. Con los años, la idea comenzó a echar raíces y dos décadas más tarde no solo llegó a Broadway, sino que obtuvo una nueva versión cinematográfica en manos de Frank Oz. Esta última fue, sin lugar a dudas, la más popular, sobre todo por su notable reparto, que incluía a figuras del momento como Rick Moranis, Ellen Greene, Steve Martin, Bill Murray, Jim Belushi y John Candy.
Pero en plena era de los remakes y reboots, era cuestión de tiempo para que los estudios intentaran revisitar la propiedad una vez más. A inicios de 2020, Warner Bros. confirmó el desarrollo de una nueva versión con grandes valores de producción. La película contaría con Greg Berlanti en la silla del director, mientras que para el reparto habían trascendido nombres que iban desde Taron Egerton, Scarlett Johansson y Billy Porter, hasta el de Evans. Este último, fichado para interpretar a uno de los villanos de la historia, Orin Scrivello, el malvado dentista interpretado por Steve Martin en la versión de 1986.
Esta película tenía previsto ser en esencia una comedia negra, pero en clave musical y dialogaría mucho más con la entrega protagonizada por Rick Moranis, que con la de Corman. Sin embargo, aunque las negociaciones con los actores resultaron prometedoras, la producción recibió su primer golpe ese mismo año como consecuencia de la pandemia de COVID y las restricciones dispuestas para las producciones.
En una entrevista virtual, Chris Evans reconoció que las directrices de seguridad habían hecho crecer notablemente el presupuesto, algo que hizo que el proyecto entrara en una especie de limbo. En ese entonces, se desconocía cuál sería el futuro de la película y el actor animó a sus fanáticos a realizar una campaña en redes sociales para que el proyecto no quedara encajonado. “Esperemos que si suficiente gente se pone a hacer ruido al respecto se mueva hacia adelante. Así que, por favor, por todos los medios. Empiecen a tuitear. Hagan ruido, porque me muero por hacerla”, expresó en ese entonces Evans.
Meses más tarde en septiembre de 2022, Taron Egerton, quien iba a dar vida al protagonista de la historia, confirmó lo que parecía ser una muerte anunciada: La tiendita de los horrores finalmente estaba cancelada.
“No lo entiendo. Había mucha buena voluntad en torno al proyecto, pero simplemente se esfumó. Quién sabe si volverá, pero no puedo evitar sentir que podría no suceder”. Pese a lo amarga de la noticia, Egerton señaló en su entrevista que uno de los puntos a favor que tiene el remake de La tiendita de los horrores es que Chris Evans todavía mantiene viva la esperanza y, tal vez, solo tal vez, tenga la suerte de que eventualmente suceda.
En el corto plazo, el actor de Capitán América tiene previsto estrenar El negocio del dolor (Pain Hustler) una película a cargo de David Yates que llegará a la pantalla de Netflix el 27 de octubre.