Elijah Wood y su peculiar legado dentro del cine de terror

Probablemente muchos asocian el nombre de Elijah Wood principalmente con la saga de El señor de los anillos, en la que interpretó al protagonista, Frodo Bolsón. Quizás sea por esta razón que su vinculación y trasformación para el reboot de El Vengador Tóxico haya tomado a muchos por sorpresa. Sin embargo, el intérprete es un gran aficionado a las películas fantásticas y de terror.

Wood, de hecho, no solo ha participado y dejado su sello en varias producciones de género, sino que, a través de su productora SpectreVision, ha producido grandes éxitos indies como Mandy de Panos Cosmatos y A Girl Walks Home Alone at Night de Ana Lily Amirpour.

Desde Aulas Peligrosas a Psicópata, repasamos algunas películas en las que Elijah Wood pateó el tablero, se manchó las manos de sangre e hizo las suyas dentro de su género favorito.

Técnicamente podríamos decir que una de las primeras incursiones dentro del género de terror de Elijah Wood tuvo a lugar en 1993 y de la mano de Macaulay Culkin con El Ángel Malvado. En esta película, Wood interpretaba a un niño que se queda una temporada con sus tíos, lo que lo lleva a padecer la convivencia con su rubio y malvadísimo primo, que rápidamente muestra signos de comportamiento violento y psicopático.

Sin embargo, su primera batalla ultraviolenta en pantalla no se dio hasta cinco años más tarde con la película (ahora de culto) Aulas Peligrosas de Robert Rodríguez. Escrita por Kevin Williamson, guionista de Scream, esta cinta con elementos de ciencia ficción y terror funcionaba como una especie de versión moderna de La invasión de los usurpadores de cuerpos en las paredes de una preparatoria.

Acá Wood, acompañado por unos jóvenes Josh Hartnett, Jordana Brewster y Cléa DuVall, no solo debe enfrentarse a los problemas propios de la adolescencia, sino también luchar contra alienígenas que han tomado como huéspedes a sus profesores y compañeros. Una película entretenida que juega a ser Enigma de otro mundo (sin tanto éxito) para los jóvenes de finales de los noventa, con guiños a sus antecesoras.

Quién se habría imaginado que detrás de los ojos de cielo de Elijah Wood, se escondería un asesino implacable y sanguinolento. La primera vez que encarnó a una figura así fue en Sin City, también dirigida por Robert Rodríguez en 2005. Pero sin duda su proyecto más terrorífico fue Psicópata (Maniac), un remake de la película de terror de 1980 dirigida por Franck Khalfoun a partir de un guion de Alexandre Aja.

En Psicópata, Elijah Wood interpretaba a un hombre perturbado y con problemas para relacionarse que comienza a acechar a mujeres con fines lo suficientemente macabros. Uno de los puntos más llamativos de esta película es que está contada desde el punto de vista del asesino y solo descubrimos al personaje de Wood a través de los reflejos. No apta para estómagos sensibles.

En Infectados (Cooties), Elijah Wood vuelve a ser uno “de los buenos”. En este caso solo se va a encargar de ponerle fin a un par de niños, pero esta vez es por razones de fuerza mayor.

En la película de Jonathan Milott y Cary Murnion, un misterioso virus infecta los Nuggets de pollo de una cafetería escolar afectando principalmente a los alumnos, quienes se convierten en unos monstruos salvajes. Wood, quien interpreta a uno de los profesores, deberá unirse a sus colegas para poder escapar de esa sangrienta carnicería escolar.

Infectados es una comedia de hora y media con elementos gore, que sin buscar ser profunda ni inscribirse en la historia, resulta entretenida, cumpliendo con lo poco que promete.

Ven con papá (Come to daddy) es la ópera prima del director Ant Timpson y se trata de una historia con tintes de suspenso, terror y comedia negra. En esta película Elijah Wood interpreta a Norval, un músico de vida acomodada que recibe una invitación por parte de su padre – a quien no ha visto desde los cinco años- para quedarse con él una temporada. Sin embargo, ese encuentro distará mucho de lo que Norval esperaba, ya que su progenitor demuestra tener conductas agresivas hacia él y la atmosfera rápidamente se tornará demasiado tensa.

Ven con papá es incómoda, violenta, tiene giros interesantes y, sin dudas, es muy divertida. Otro punto para celebrar es la gran actuación de Stephen McHattie.