Esta semana se estrena en cines Cacería en Venecia (A Haunting in Venice), la tercera parte de la trilogía de Hércules Poirot que arrancó con Asesinato en el Expreso de Oriente (Murder on the Orient Express, 2017) y continuó con Muerte en el Nilo (Death on the Nile, 2022). Las tres películas -basadas en textos de Agatha Christie- no sólo están protagonizadas por este actor, sino que también ofició de director en la trilogía.
Cacería en Venecia está basada en la novela Las manzanas (Hallowe’en Party), siendo la única de las tres que no respeta el nombre original del libro en el que se adapta. Pero todas tienen algo en común: a Hércules Poirot.
Este personaje fue creado por Agatha Christie en 1920, basado en dos detectives de ficción de la época (Hércules Popeau y Monsieur Poiret), y le dió una nacionalidad belga -producto del momento de la época y la Primera Guerra Mundial-. Ciertamente existen trazas del Sherlock Holmes de Arthur Conan Doyle, que a su vez está basado en el detective ficticio Auguste Dupin de Edgar Allan Poe… todo tiene que ver con todo.
Junto a Miss Marple es uno de los personajes ficticios más relevantes de Christie, y protagonizó más de treinta novelas y cincuenta cuentos. Sin embargo Hércules Poirot no era santo de la devoción de su autora, que lo encontraba insufrible, egocéntrico y detestable; un clásico caso en el que la criatura atraviesa las páginas y se vuelve más relevante para el público que para su creadora, que rechazó la idea de asesinarlo (narrativamente hablando, por supuesto) porque el público amaba al personaje y era su deber respetarlos.
Su última aparición en la literatura de Agatha Christie se dio en 1975 en Telón (Curtain: Poirot’s Last Case), una novela que aunque fue su participación final había sido escrita por la autora muchas décadas antes. Aquí se lo veía persiguiendo a un asesino en serie llamado Mr. X, con un caso complejo de artritis que lo hacía usar una silla de ruedas.
Un año después, Agatha Christie fallece. Afortunadamente llegó a ver cómo el Poirot que ella concibió tuvo un obituario en el prestigioso New York Times (en agosto de 1975), siendo el único personaje de ficción al que le realizaron ese tipo de acción.
En cine y televisión también fue muy adaptado, llegando a aparecer en más de diez películas desde 1931, y juntó la friolera de trece temporadas con la serie Agatha Christie: Poirot de 1989. Entre algunos de los actores que lo interpretaron encontramos a John Malkovich, Ian Holm y Alfred Molina.
Kenneth Branagh se convierte así en un eslabón más en la historia de uno de los personajes de ficción más importantes de la cultura occidental.