Paul Walker: cómo reconstruyeron su última actuación en Rápidos y Furiosos 7

El fallecimiento de uno de los protagonistas de la exitosa saga se convirtió en un laboratorio de ideas creativas

Así fue como realizaron la escena final de 'Rápidos y furiosos 7' tras la muerte de Paul Walker.

Esta semana habría cumplido 50 años el actor Paul Walker, más conocido por haber sido Brian O’Conner en la saga más recaudadora de atracos, autos y acción: Rápidos y Furiosos. Falleció diez años atrás, el 30 de noviembre de 2013, en un Porsche en que iba en el asiento del acompañante.

Amante de la velocidad, falleció cuando estaban grabando la séptima parte de la saga lo que significó un problema mayúsculo para la productora y para su director James Wan, que veía cómo se complicaba su primera dirección frente a un tanque hollywoodense.

Luego del accidente se detuvieron las grabaciones durante algunos meses con la intención de quizás hasta cancelar el rodaje, pero como pasó en otro tipo de situaciones similares, se decidió utilizar diferentes tipos de técnicas para suplir la falta del actor en el set.

A los cambios de guión (si se analiza la séptima parte, se puede sentir cierta arbitrariedad en el devenir narrativo) que llevaron a quitar minutos en pantalla al personaje, se sumaron otras herramientas a nivel CGI (gráficos generados digitalmente), metraje antiguo y dobles de cuerpo.

Yo no tengo amigos, tengo familia.

A nivel efectos visuales, existieron más de 200 tomas en las que se colocó digitalmente la cara del actor frente a cuerpos diferentes. ¿La sorpresa? Fueron tres actores distintos quienes lo interpretaron: John Brotherton, Caleb Walker y Cody Walker, estos últimos dos, hermanos de Paul. Muchas de las escenas más emocionantes se realizaron de esta manera.

Para algunos cortes de montaje se usaron materiales desechados de las anteriores seis películas de la saga: primeros planos, escorzos (cuando se usa una porción del cuerpo, del hombro o de la cabeza para completar un plano) y tomas en solitario que se categorizaron para reutilizar de parche y completar algunos agujeros en la edición.

También modificaron el plan de rodaje para que muchos de los planos donde Brian aparecía de frente fueran al revés, de manera de usar de espalda a alguno de los dobles y no sumar más trabajo de CGI a la cinta.

La técnica para reconstruir la cara, sus expresiones y la luz sobre ella es bastante adelantada para la época, y aunque sabiendo cuáles son esos momentos en los que la magia audiovisual hace su trabajo (donde podemos concentrarnos y darnos cuenta de la plasticidad de la imagen), somos capaces de meternos en la historia y conmovernos en el cine.