La Máscara Turquesa buscará hacer de Pokémon Escarlata y Púrpura una experiencia mucho más completa

Pokémon es la franquicia más exitosa de todos los tiempos, por lo menos, comercialmente. Su concepto tan fresco se termina renovando continuamente y llegando a más audiencias que disfrutan de las series, las películas, los videojuegos y el merchandising. Sin embargo, para que esa rueda siga girando es necesario cada tanto hacer una actualización de las criaturas que protagonizan a la franquicia.

Así es que Pokémon Escarlata y Púrpura, la última dupla de entregas para Nintendo Switch, llegó para proponer una novena generación de criaturas ambientadas en España que aportarán frescura para los años siguientes. Sin embargo, el lanzamiento de estos títulos fue muy caótico por la enorme cantidad de bugs y problemas de rendimiento que tenían, haciendo que, aún en su enorme éxito comercial, estos juegos terminen teniendo un moderado 72/100 en Metacritic. ¿Qué es lo que puede ofrecer un nuevo contenido descargable a esta franquicia?

La política del contenido adicional en la franquicia de Pokémon viene de mucho antes que el contenido descargable sea una práctica habitual en videojuegos. Desde un primer momento y, por pedido de Shigeru Miyamoto, Pokémon genera dos títulos diferenciados por cada generación, donde las diferencias radican en las criaturas que se pueden conseguir y en cambios menores como diferentes gimnasios a enfrentar.

En ese contexto, la primera generación de Pokémon contó con cuatro juegos: Verde y Rojo, como los iniciales; Azul, como la versión occidental de Verde; y Amarillo, como el contenido adicional. Pokémon Amarillo traía una versión bastante diferente donde tu compañero inicial era Pikachu y todo era mucho más parecido al anime. Esta idea de traer un nuevo juego que expanda las bases de la generación se extendió durante los próximos años teniendo grandes exponentes como Pokémon Cristal (2000) y Pokémon Esmeralda (2004).

En 2019, tan solo dos años después del fenómeno que significó el lanzamiento de Nintendo Switch, pudimos disfrutar de la octava generación de Pokémon. Espada y Escudo fueron los primeros títulos que buscaban darle la vuelta de tuerca necesaria a un 3D que no había terminado de asentarse en la franquicia principal.

Con una narrativa fácil, aniñada y una mezcla de Pokémon clásico con zonas abiertas que no terminaban de definirse como tales, estos juegos recibieron muchísimas críticas de la comunidad que cada vez se sentía más disconforme con el rumbo que había tomado la franquicia después de sus muchos años de éxito.

Sin embargo, los DLC de aquellos juegos terminaron abriendo un abanico de posibilidades que era impensado. ¿Faltaba online? Un nuevo modo de raids encadenadas en cooperativo. ¿No había legendarios? Montones de ese estilo para atrapar. ¿Las zonas abiertas no alcanzaban? Todo el DLC sería de esa manera.

A fuerza de contenido, arreglos y buenas ideas; La Isla de la Armadura y Las Nieves de la Corona, contenidos descargables de esa generación, funcionaron como el tercer juego que no fue y terminaron haciendo de Pokémon Espada y Escudo juegos mucho más completos de lo que fueron en su lanzamiento.

Más allá de la ambición y el claro intento de escuchar a la comunidad, en 2022 la generación siguiente de Pokémon recibió aún más críticas. Escarlata y Púrpura salieron muy rotos, repletos de bugs y con varios problemas claros que le valieron ser de los videojuegos con peor recepción de la franquicia principal; aún con grandes propuestas de por medio como la primera vez que podíamos disfrutar de un título de Pokémon de mundo abierto.

Como ya vimos en los trailers de presentación, el primer contenido descargable de Escarlata y Púrpura nos trae minijuegos, apariciones masivas de Pokémon, actualizaciones gráficas y de rendimiento, nuevas funciones de fotografía, objetos que podrían cambiar la forma de disputar los combates y, por supuesto, nuevas criaturas que seguramente venderán muchos peluches.

La Máscara Turquesa lleva tras de sí no solo la intención de ampliar dos títulos que intentaron ser los más amplios de esta franquicia sino también de reproducir el proceso que sucedió con los DLC de Escudo y Espada, haciendo que la experiencia se complete y se termine de pulir un par de videojuegos que no salieron de la forma que se hubiese esperado.

Este no es el único contenido en DLC que tendrán estas obras. El Disco Índigo llegará en un momento aún no especificado del futuro cercano y, si se repite la historia, terminará de completar un aluvión de contenido que podría ser la reivindicación de estas últimas entregas.

La Máscara Turquesa va a estar disponible el 13 de Septiembre para Nintendo Switch y se adquiere de manera íntegramente digital, aunque si se repite el proceso de la generación anterior, terminará teniendo un bundle físico con los juegos de base también en un futuro. Solo queda esperar a ver si este o la segunda parte del DLC pueden terminar de cerrar el concepto del primer Pokémon mundo abierto que existió y qué nuevas propuestas le puede traer.