Del perfume a los deportes: ocho cosas que no tienen género

Las personas suelen decir que entienden a la perfección lo que significa género, pero en algunas ocasiones lo confunden con sexo. Esto hace que crezca un pensamiento erróneo y a su vez los objetos llegan a ser el descuido de este caos.

El entender que las cosas no tienen género es algo que no es fácil para algunos, ya que durante muchos años los adultos mayores fueron quienes estigmatizaron tanto los juguetes o incluso profesiones, razón por la cual se decía qué era para hombres o mujeres.

Cuando hablamos de “sexo” es la referencia biológica y fisiológica por lo cual definen al hombre o mujer.

Sin embargo, el “género” va en relación con los atributos sociales y a las asociadas al hombre o mujer. Los atributos, oportunidades y relaciones se aprenden con las personas, época y el tiempo. Además, puede haber cambios, todo depende del contexto del que se viva.

El “hombre” y la “mujer” son categorías sexuales, mientras que lo “masculino” y lo “femenino” son categorías de género.

En cuanto a los comportamientos muchas familias, padres y amigos han impuesto a las cosas etiquetas y estereotipos, dando por entendido las burlas que tras varios años desarrollaron un acoso o incluso bullying, es por esta razón que te enlistamos ochos cosas que no tienen género y cualquier persona puede usarlo sin problema.

Muchos años se les castigaba a los niños por pintarse la cara, un estigma que hoy en día se ha demostrado todo lo contrario, gracias a los hombres que se atrevieron a salir a la calle y mostrar quienes son.

Drag Queens, trans, actores y personas de la comunidad LGBT+ han dado un alto a los malos comportamientos para enseñar que el maquillaje es un arte.

Durante muchos años, las personas adultas pensaban que la ropa tenía género: faldas para mujeres y pantalones para hombres. Es más, en el proceso de la confección de la ropa muchas mujeres vistieron pantalones de mezclilla, pero recibieron burla, según ellos porque “era para hombres”.

Hoy muchos famosos han roto ese estigma y se han adentrado al mundo de las faldas, sostenes e incluso croptops el cual dejan ver que la moda es para todos.

¿Quién no recuerda que sus papás o sus amigos les decían ´niña´ cuando te veían con una muñeca? Ese comportamiento no era más que un mal entendimiento por parte de las personas, pero con el tiempo cambió.

La televisión, la escuela o incluso las caricaturas marcaban esta tendencia de decidir si un juguete pertenecía a un hombre o a una mujer. Hoy en día algunas personas hacen señalamientos de que el futbol es para niños y la cocina es para niñas, pero se sabe que en esta y otras más ramas ya no hay etiqueta de género en ambos.

Los grandes olores que deja un rastro, distintivo, a las personas es uno de los más problemáticos para la sociedad. Creen que el perfume es exclusivo de las mujeres y la loción de hombres.

Estas dos palabras son más que suficiente para determinar que lo que importa no es a quién le pertenezca, si no es oler bien en la situación en la que uno se encuentre.

Se originó mucha controversia en estos últimos años por las fiestas llamadas de género.

¿Cómo son? Si la pareja tiene conocimiento de que probablemente tendrán un hijo, realizan una fiesta o cualquier cosa para que los festejados conozcan el sexo del bebé. El problema es llamarlo “de género”, pero eso no quiere decir solo dos sexos.

Para conocer la sexualidad prenden una vela y dependiendo del color que salga será el sexo del próximo bebé.

Otro ejemplo es cuando las personas no quieren utilizar un color porque no es adecuado para el bebé. Muchas veces es el caso de los hombres, que algunos siguen pensando que con usar una prenda rosa van a hacer señalamientos de afeminados. No, no tiene nada que ver.

Durante algunos años categorizaban a las personas que practicaban un deporte que no fuera acorde a su sexualidad.

Un ejemplo es la gimnasia o el levantamiento de pesas: cada vez que un hombre o mujer actuaban esta actividad le llamaban “afeminado” o “marimacha” (dependiendo de la zona y país).

Esto ocasionó se crea que las personas trans no deban de participar, siendo un tema que ha causado mucho revuelo en varias competencias.

Un elemento clave del maquillaje de las mujeres es pintarse las uñas, algo que ocasionó una aceptación entre ellas para poder combinar sus atuendos con el arreglo de las uñas, pero lo que muchos se les hace raro es que un hombre se las pinte.

El señalamiento o las burlas siempre fueron cosas que recibían los hombres que llegaban a salir a la calle con las uñas pintadas, pero en esta actualidad ya son un elemento que determina su gusto y las decisiones que quieran imponer, pues este acto no tiene un género.

Se pensaba que los hombres tenían que estudiar algo relacionado con la maquinaria y las mujeres en cocina o enfermería. Esto dividió al mundo cuando poco a poco las personas mostraron sus habilidades para las profesiones.

Hombres no podían elegir diseño, repostero, enfermería, y las mujeres no conseguían estudiar algo afín con ser doctoras, mecánica, entre otras.

En las escuelas actuales ya hay todo tipo de carreras en donde se pueden preparar, incluso hay personas trans que buscan terminar sus estudios.

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