Primera página. Nos encontramos en el año 2006, en México, Distrito Federal. De madrugada, al final del pasillo del Servicio Médico Forense un profesor universitario busca a su amigo desaparecido, compañero de aventuras y de batallas políticas. Lo conocen todos los estudiantes. Le dicen el Diablo, o le decían. Aunque las circunstancias alrededor de su muerte no son claras, algo es seguro, en los meses previos, el Diablo había dejado de ser el mismo. Firme en sus exposiciones de los abusos de la izquierda en el poder, pronto sus ideas se vieron trastocadas y las prácticas infames no se hicieron esperar.
La historia negra de la izquierda en México es la que se cuenta en estas páginas, la de una generación posterior a 1968 que llegó al poder a base de mentiras, corrupción, y desencanto. Eso es Infamia, la obra más reciente de Ciro Murayama.
La izquierda en México ha sido protagonista de cambios políticos significativos, pero también ha enfrentado desafíos y contradicciones que ponen en tela de juicio su compromiso democrático y su relación con la sociedad. Ciro Murayama, reconocido escritor, economista y ex consejero del Instituto Nacional Electoral (INE), en México, explora estos temas en su nueva novela, publicada por el grupo Planeta.
El libro, que combina la pasión personal del autor con su visión política, ofrece una mirada crítica de la política mexicana desde 1968 hasta la actualidad.
Desde la ficción, el autor aborda la incapacidad de la izquierda mexicana para deshacerse de algunos dogmas y su falta de compromiso con la libertad, la democracia y los valores de la ilustración.
Infamia se desarrolla en un contexto convulso de la historia de México, desde los años 80 hasta principios del siglo XXI. La trama se centra en tres personajes ficticios principales: El Diablo, un estudiante que se convierte en investigador y denuncia la corrupción en la política; El Gallo, su amigo de toda la vida y cronista de la historia, y Adela Abreu, la mujer por la que ambos compiten. La historia refleja cómo los jóvenes luchan por sus sueños políticos, pero se decepcionan al descubrir la corrupción en sus propias filas.
La novela también aborda momentos históricos clave en la política del país, como el sismo de 1985, el fraude electoral de 1988 y el surgimiento del zapatismo. Murayama se sitúa en la época de estos cambios y examina su evolución a lo largo de los años.
En una conversación sobre su obra con el portal Crónica, Murayama habla de la preocupación que lo llevó a escribir Infamia. Señala que la izquierda mexicana ha caído en la trampa de creer que “el fin justifica los medios” y que la búsqueda de una causa justa puede justificar cualquier método. Esta mentalidad, según el autor, ha erosionado la legitimidad de los medios utilizados y ha desviado los objetivos de la izquierda.
También expresa su preocupación por la izquierda que ha acompañado acríticamente al presidente Andrés Manuel López Obrador, renunciando a su propia identidad.
El autor critica la falta de compromiso democrático de la izquierda actual que, una vez en el gobierno, ha optado por socavar el sistema electoral y las reglas que le permitieron llegar al poder de manera legítima. Señala que esta izquierda es autoritaria y agresiva con la disidencia, lo que contradice su historia de lucha por la democracia.
Murayama atribuye este “encantamiento autoritario” a la incapacidad de la izquierda para hacer una autocrítica de su historia, especialmente en relación con las dictaduras en Cuba y otros lugares. También destaca la falta de compromiso democrático y la instrumentalización de la democracia para alcanzar el poder y cambiar las reglas a su favor.
Infamia es el intento de Murayama por comprender una época que marcó a México, y una ideología que ha permeado su política desde los cimientos. Sus palabras no solo narran una historia de pasiones y desencanto, sino que también invitan a reflexionar sobre el estado actual de la izquierda en México y su compromiso con la democracia.