Mama Antula será la primera santa argentina, según confirmó el Vaticano a través de un decreto que en unos días firmará el Papa Francisco.
Dice el decreto: “Durante la audiencia concedida el martes por la tarde a su eminencia reverendísima el Sr. Cardenal Marcello Semeraro, prefecto del dicasterio de las causas de los santos, el Sumo Pontífice ha autorizado al mismo dicasterio a promulgar el decreto relativo al milagro atribuido a la intercesión de la beata María Antonia de San José (Antonia de Paz y Figueroa), conocida como Mama Antula, fundadora de la Casa de Ejercicios Espirituales de Buenos Aires; nacida en 1730 en Silípica, en Santiago del Estero (Argentina) fallecida el 7 de marzo de 1799 en Buenos Aires (Argentina)”.
¿Qué es lo más llamativo de la historia de Mama Antula, una mujer sobresaliente del siglo XVIII cuya rebeldía e influencia todavía es conocida por pocos? Algunos pocos datos sobre su biografìa: se la considera la primera escritora rioplatense, fue beatificada por el Vaticano y será la primera santa de la Argentina; caminó unos 4.000 kilómetros para trasladar y defender el estandarte de los jesuitas, que habían sido expulsadas; fue primero rechazada y luego tomada como fuente de consulta por los políticos que impulsarían la Revolución de Mayo. Nada menos.
Algo de todo eso, o todo eso, conmovió a las escritoras Nunzia Locatelli, nacida en Italia, y Cintia Suárez, nacida en Argentina: ya llevan escritos cuatro libros sobre Mama Antula. El último, que en mayo de 2023 presentaron en el stand de Infobae-Leamos en la Feria del Libro de Buenos Aires, se trata de Mama Antula. Una mujer empoderada en el Buenos Aires colonial, que también fue presentado en el stand de la Legislatura de la Ciudad -donde está a punto de aprobarse que el nombre de Mama Antula se sume al de la estación Independencia del subte- y que es de distribución gratuita.
“Los primeros datos importantes que nos llamaron la atención fueron todas las manifestaciones de rebeldía de Mama Antula. En la época colonial, en la que la mujer estaba silenciada totalmente, decidió dejar una familia muy asentada económicamente para dedicarse al servicio de los más humildes e intentar plasmar los ejercicios espirituales de los jesuitas incluso después de que fueron desterrados de toda América en 1767″, describió Locatelli en conversación con la periodista Julieta Roffo.
De acuerdo a los tiempos que corren, la tapa del libro de las investigadoras está ilustrada con un retrato generado a través de Inteligencia Artificial en base a una imagen que se obtuvo de la beata al momento de su muerte. “Creamos una imagen de lo que se estima que habrá sido Mama Antula a sus 15 años, un momento que para mí es fundamental y que en aquella época ya era el momento en el que una mujer estaba lista para introducirse a la sociedad”, describió Locatelli.
La información que obtuvieron las dos autoras para publicar este nuevo volumen sobre la beata santiagueña llegó a sus manos de manera absolutamente impredecible. Hubo quienes, al final de la charla en el stand de Leamos-Bajalibros, se acercaron a decirles que el hallazgo “había estado dictado por la Providencia”.
¿Pero cómo fue ese descubrimiento? “Con todo lo encontrado, tenemos prácticamente un relicario más que cartas. En septiembre viajamos a Roma a la beatificación de Juan Pablo I, sobre quien ya escribimos un libro, y fuimos al Archivo de Estado de Roma, que reúne varios tipos de documentos, entre los cuales están los de los jesuitas”, detalló Locatelli.
“María Antonia era de alguna forma parte de los jesuitas, aunque la orden no prevé el ingreso de mujeres. Aún así, Mama Antula era la jesuita por antonomasia, entonces buscamos ahí, donde yo ya había buscado pero no había encontrado nada. Una funcionaria del archivo, muy interesada en el tema beatas, nos ayudó a encontrar una pista, así encontramos un tesoro”, siguió.
“Tuvimos una gran fortuna, aparecieron llenas de polvo una gran cantidad de cartas que son reliquias, porque están escritas directamente por ella o por los jesuitas de la época. Encontramos cosas muy interesantes de la Buenos Aires colonial de esa época y sobre todo, de los próceres que hablaban con Mama Antula”, explicó Locatelli.
Fue Suárez quien explicó el vínculo entre la beata nacida en territorio santiagueño y los próceres que protagonizarían la Revolución de Mayo. “En este corpus de cartas que encontramos podemos ver el ida y vuelta que tenía ella con las personalidades centrales de la Argentina. Mama Antula llegó a Buenos Aires y la bienvenida no fue grata: la violentaron, le tiraron piedras. Pero con el tiempo su figura tomó importancia en la ciudad”, describió.
“Tras ser rechazada por el virrey y el obispo, se convirtió en una persona de consulta. Entró en contacto con Cornelio Saavedra, con Azcuénaga y también con Alberti. Fue nutriendo a todos a través de sus conocimientos jesuíticos pero también de política”, analizó Suárez. Hablaba de una mujer que, tras el rechazo, era recibida por las autoridades.
“Es necesario reivindicar el rol femenino, tanto en la previa de la gesta de Mayo como en esa ciudad de Buenos Aires colonial, en donde los pantalones por supuesto los llevaban los hombres, pero también eran las mujeres las que estaban gestando o cocinando algo que se venía. Una de ellas era Mama Antula”, explicó Locatelli.
“En el título elegimos la palabra ‘empoderada’ para traer la historia a la actualidad y poder dar el ejemplo de una mujer sola, sin ninguna autoridad o un hombre detrás, que consiguió lo que se propuso a pesar de las dificultades”, concluyó la escritora italiana.
Después de años de expectativas y de esperar la comprobación de un milagro de sanación, llegó finalmente el momento de Mama Antula. “Es una manera de que sigan conociendo a una mujer todavía poco conocida y amada por los que se van enterando de su historia”, remató Locatelli.
Más sobre Mama Antula
La escritora Ana María Cabrera se ha dedicado a explorar la vida de Mama Antula, una figura histórica argentina que enfrentó acusaciones de brujería y locura. Rodeada de mujeres que compartían su suerte, Mama Antula portaba su túnica y su cruz en un contexto de rechazo social.
Esa es la historia que narra Cabrera en su novela Mamá Antula. “Es una mujer callada por la historia, que fue muy rica espiritualmente”, destacó la autora en una entrevista con la agencia Efe.
Con base en una sólida investigación documental, el libro desgrana deliciosos diálogos y anécdotas imaginarios porque, como señala Cabrera, “en los silencios de la historia es donde se introduce la ficción literaria, lo que pudo haber pasado”.
Conmueve la pequeña María Antonia escapándose de su casa para ir a pasar sus horas con los indígenas, con los esclavos, con los trabajadores del campo...
A los 15 años deja su acomodada familia, hace votos de pobreza y castidad, toma el nombre de María Antonia de San José y, junto a otras compañeras, se dedica a asistir a los jesuitas en su labor pastoral y social, en particular en los ejercicios espirituales de san Ignacio de Loyola.
En una época en que todavía estaba la Inquisición activa, se animó a caminar descalza casi toda la Argentina derramando la misericordia, contra todo prejuicio”, destacó Cabrera.
La escritora destaca que, en una época en que había muchas mujeres analfabetas, María Antonia “era muy culta” y hasta “escribía en un francés perfecto” y bien merece ser considerada “la primera mujer escritora del Virreinato del Río de la Plata”.
Gracias a su investigación, la autora descubrió, entre otras cosas, que Mama Antula “se carteaba con Catalina de Rusia”.
“En Europa, de autor anónimo, apareció publicado ‘El estandarte de la mujer fuerte’, libro (sobre María Antonia) que fue best seller mientras ella vivía. Que después su figura se haya silenciado solo puedo atribuirlo a una sociedad machista”, sostiene Cabrera.