Casi dos décadas después de cautivar a sus lectores con su trilogía La Guerra de las Brujas, que se convirtió en best seller en España y otros países, con más de un millón de ejemplares vendidos y traducciones a cerca de 29 idiomas, la autora catalana Maite Carranza sorprende nuevamente a sus seguidores con su más reciente título de ficción: La loba gris, en el que Carranza nos lleva de regreso en el tiempo, desentrañando los orígenes de esta saga, presentando una precuela que no solo satisface la curiosidad de los lectores, sino que también ofrece una perspectiva única sobre el protagonismo de las brujas rebeldes en un mundo donde el poder femenino es el centro de atención.
El retorno a un mundo mágico
Maite Carranza había declarado en 2007 que la trilogía estaba completa. Sin embargo, tras un lapso de quince años, la autora se ha aventurado en una dirección opuesta, regresando a los orígenes de la historia y presentando a los lectores una precuela que promete ser tan cautivadora como sus obras anteriores. La pregunta que muchos se habían planteado durante años finalmente encuentra respuesta en las páginas de La loba gris: ¿Quién es Deméter, la matriarca y abuela de Anaïd, cuyo personaje apenas esbozado en la trilogía original despertó tanto interés? Carranza se embarca en el desafío de explorar la vida, las razones y los motivos de un personaje que, aunque muerto en el primer volumen, es el alma de la saga, tejiendo una leyenda que persiste en el presente.
El viaje de la inspiración
Durante el verano de 2020, en medio de la pandemia global y la imposibilidad de viajar, Carranza halla inspiración en los mapas, internet y su propia imaginación. Es en ese momento, como lo narra en un making of publicado por el portal Zenda, que concibe la infancia y juventud de Deméter en un lugar tan remoto como hermoso: la isla de Amorgos, la más lejana del archipiélago de las Cícladas. Siguiendo los pasos de Borges, quien sostenía que un escritor debe ser capaz de inventar una ciudad, Carranza se adentra en un territorio desconocido, forjando la ambientación perfecta para su precuela.
Una experiencia en primera persona
Para enriquecer su obra, Carranza decide que no basta con imaginar Amorgos, sino que debe experimentarla en persona. El contacto directo con la isla y sus costumbres es esencial para que La loba gris se vea iluminada por la luz mediterránea que la autora desea transmitir. Durante una intensa semana, recorre la isla, explorando cada rincón y absorbiendo la magia de su paisaje, sus aromas y su historia. Las fotografías que toma se convierten en recuerdos tangibles de su intrépida exploración, proporcionando un vínculo auténtico entre la autora y su obra.
Un giro inesperado en la creación
Una lesión durante su viaje a Amorgos cambió su proceso de escritura. Con un menisco roto, Carranza encuentra la oportunidad en la adversidad, alargando su tiempo de escritura más allá del verano. A pesar de su lamentación por gozar de buena salud, el infortunio resulta en una bendición, permitiéndole completar su obra con mayor profundidad y dedicación.
La loba gris nace de las contradicciones, curiosidades, sueños, deseos y experiencias personales de Maite Carranza. Esta precuela promete sumergir a los lectores en un mundo de magia y misterio, mientras ahonda en los orígenes de una de las sagas más exitosas de los últimos años, en el terreno de la literatura fantástica en español.
Sobre la autora: Maite Carranza
♦ Nació el 25 de febrero de 1958 en Barcelona.
♦ Finalizó sus estudios de Antropología en 1980 y se dedicó a la docencia de Lengua y Literatura Catalanas durante los diez años siguientes en un instituto de enseñanza secundaria.
♦ Publicó su primera novela, Ostres, tu, quin cacau!, en 1986, la cual fue galardonada con el Premio de la Crítica Serra D’Or.
♦ Tras realizar un master de Escritura Audiovisual en los año 90, inició su carrera como guionista de televisión.
♦ En 1999 probó con la literatura para adultos con Sin invierno, que fue además su primera obra en español. Su labor ha sido merecedora de varios premios, como el Edebé de literatura juvenil 2010.