El Premio Nacional del Libro de Estados Unidos, otorgado por la National Book Foundation, es uno de los galardones literarios más prestigiosos del país. Desde su inicio en 1950, ha honrado a destacados autores estadounidenses en diversas categorías literarias, incluyendo ficción, poesía y no ficción. Entre los galardonados previos se encuentran figuras de renombre como William Faulkner, Philip Roth, Allen Ginsberg y Susan Sontag. Este premio no solo celebra la excelencia literaria, sino también la habilidad de los traductores para llevar obras extranjeras al inglés.
Recientemente, la entidad a cargo dio a conocer el listado inicial de diez finalistas que con sus obras aspiran a quedarse con el galardón en 2023. Entre los seleccionados solo figuran tres escritores latinoamericanos: los colombianos Juan Cárdenas y Pilar Quintana, y la mexicana Fernanda Melchor.
La autora de Temporada de huracanes ya es una de las favoritas por los lectores y la crítica en Estados Unidos. Con esta nominación, es la segunda vez que aparece en los grandes listados, luego de haber sido seleccionada en 2020 como una de las finalistas del Premio International Booker.
Por su parte, Juan Cárdenas, autor de novelas como Los estratos, Elástico de sombra o Peregrino transparente, llega por primera vez a los grandes listados de la crítica en Estados Unidos. En 2018 fue elegido para formar parte del listado de Bogotá39, que resaltaba a los 39 escritores y escritoras menores de 40 años con más proyección en Latinoamérica. Además de escritor, es traductor. Ha publicado en numerosas antologías y en el conjunto de su obra figuran dos títulos de cuento y siete novelas.
Ha llegado a estar entre los finalistas del Premio Nacional del Libro de EE. UU. con su obra El diablo de las provincias. En esta novela, Cárdenas nos adentra en la historia de un biólogo que retorna a su ciudad natal tras una prolongada ausencia en el extranjero. Vuelve a su pequeña ciudad, un lugar arraigado en el pasado y conservador al que solía ridiculizar en un intento de escapar de sus raíces. Sin embargo, el pasado, que parecía casi resuelto y casi irrecuperable, lo espera para desafiar sus burlas pasadas.
En su regreso, se enfrenta a la casa familiar, ahora ocupada por desconocidos, a una exnovia con discapacidad y una oferta laboral intrigante, y al espectro de su hermano homosexual asesinado. Al igual que en otras obras de Cárdenas, la trama envuelve al protagonista, quien en lugar de resistirse, se deja llevar, casi en un estado de letargo, por territorios que revelan las estructuras que moldean el mundo contemporáneo: la religión, la industria, la política y la naturaleza.
La narrativa del autor en esta pieza se caracteriza por su sutileza y la ausencia de respuestas explícitas, lo que permite al lector reflexionar sobre los temas planteados.
En previas entrevistas, Cárdenas ha mencionado que su obra alude a un fenómeno reciente: las sectas cristianas que ganan influencia en zonas periféricas de los países y ciudades. Esta novela, traducida al inglés por Lizzie Davis, destaca la versatilidad y profundidad de la literatura colombiana contemporánea.
Entretanto, Pilar Quintana, la escritora caleña, llega por segunda vez a integrar este listado luego de que lo hiciera en 2020 con la traducción de su novela La perra. Ahora lo hace de la mano de Los abismos, la obra que le mereció el Premio Alfaguara de Novela en 2021 y que fue considerada por la prensa española como uno de los 50 mejores libros de aquel año.
Como Cárdenas, la también autora de Coleccionistas de polvos raros hizo parte del listado de Bogotá39, pero a diferencia del escritor, ella lo hizo junto a los autores de la primera generación, en 2007, entre los que cabe destacar a los colombianos Juan Gabriel Vásquez y Ricardo Silva Romero, el argentino Andrés Newman y el peruano Santiago Roncagliolo.
Los abismos, traducida por Lisa Dillman, es un relato conmovedor que posiciona a Quintana como una de las mejores escritoras contemporáneas de Latinoamérica. La historia gira en torno a Claudia, una mujer que reflexiona sobre la desaparición de su hermano en una carretera de Cali durante su infancia. La colombiana ha dicho que originalmente, el personaje de Claudia era adulto, pero a medida que escribía, decidió centrarse en la niñez de la protagonista. Esta obra es una exploración profunda de la memoria y la pérdida en el contexto de la violencia en Colombia.
En su momento, el jurado que le concedió el Premio Alfaguara a este título, destacó que Los abismos “se adentra en la oscuridad del mundo de los adultos a través del punto de vista de una niña que, desde la memoria de su vida familiar, intenta comprender la conflictiva relación entre sus padres. Con el telón de fondo de un mundo femenino de mujeres atadas a la rueda de una noria de la que no pueden o no saben escapar, la autora ha creado una historia poderosa narrada desde una aparente ingenuidad que contrasta con la atmósfera desdichada que rodea a la protagonista. Con una prosa sutil y luminosa en la que la naturaleza nos conecta con las posibilidades simbólicas de la literatura, y los abismos son tanto los reales como los de la intimidad”.
Los diez finalistas de esta edición del Premio Nacional del Libro incluyen obras originalmente escritas en francés, árabe, holandés, alemán, coreano, portugués y español. El martes 3 de octubre se dará a conocer la lista de los cinco finalistas definitivos. Este premio no solo honra a los autores, sino también a los traductores que desempeñan un papel crucial en la difusión de la literatura mundial en Estados Unidos.
La inclusión de Pilar Quintana y Juan Cárdenas como finalistas en el Premio Nacional del Libro de Estados Unidos destaca el crecimiento y reconocimiento de la literatura colombiana en la escena literaria internacional. Sus obras abordan temas profundos y actuales, ofreciendo una perspectiva única sobre la sociedad colombiana y temas universales como la memoria y la aceptación de lo diferente.