Cada nueva obra de Joyce Carol Oates supone un triunfo más en relación con sus trabajos anteriores. No hay libro suyo que decepcione. Es, realmente, de las pocas escritoras a las que no se les puede encontrar libro malo, y es que hasta el más flojo llega a ser cautivador.
Uno de los últimos trabajos de ficción de la autora que se han traducido al español, Noche. Sueño. Muerte. Las estrellas, continúa por esa línea de superar lo previo. Si con títulos como Un libro de mártires americanos, Riesgos de los viajes en el tiempo o Delatora tuvimos la oportunidad de regalarnos un rato de alta literatura, con este nuevo libro la expectativa no debe ser menor.
Publicado por el grupo editorial Penguin Random House, a través de su sello Alfaguara, el libro apareció originalmente en inglés en 2020, justo cuando las protestas por la muerte de George Floyd sacudieron a Estados Unidos, como una reflexión aguda sobre la muerte, la identidad y los prejuicios. A lo largo de esta novela con aire de crónica, Oates teje una intrincada trama que desentraña las vidas de los McLaren, una familia acomodada que se ve inmersa en una espiral de conflictos después de un trágico acto de violencia policial.
Todo inicia con un acto de valentía por parte de John Earle McLaren, conocido cariñosamente como “Whitey”, un hombre de 67 años que fue el respetado alcalde de Hammond durante un tiempo. Whitey, presenciando una brutal agresión policial injustificada hacia un joven de piel oscura, interviene por una “obligación moral”. Sin embargo, esta noble acción desencadena una cadena de eventos que sumerge a la familia McLaren en un abismo de conflictos y prejuicios previamente ocultos.
Retrato de una familia fragmentada
La narrativa de Oates nos sumerge en la complejidad de las relaciones familiares, el duelo, la maternidad y la viudez. A lo largo de las páginas, los cinco hijos de los McLaren afrontan la muerte de su padre y revelan prejuicios, rencores e inseguridades previamente ocultos. Las hijas mayores, Beverly y Lorene, protagonizan disputas por la herencia y revelan su elitismo y racismo. Thom, el hermano mayor, busca venganza contra los policías responsables de la agresión a su padre, desencadenando una espiral de amenazas y coerción. Los otros dos hijos, Virgil y Sophia, también experimentan cambios significativos en sus vidas.
Con fina prosa, Oates presenta una conmovedora narración del personaje de Jessalyn, la esposa y madre de la familia, adentrándose en su proceso de duelo y transformación, que viene a desencadenar después una serie de cambios en toda la estirpe.
Reflejo de la sociedad actual
Joyce Carol Oates es una figura icónica en la literatura contemporánea estadounidense. A lo largo de su carrera, ha explorado una amplia gama de géneros literarios, desde la novela hasta el cuento y la poesía, desafiando las convenciones y manteniendo una voz única e inconfundible. Noche. Sueño. Muerte. Las estrellas es una prueba más de su versatilidad literaria y su compromiso con la exploración de temas profundos y controvertidos propios de su tiempo y su país.
Aunque la novela no se basa en un evento específico, arroja luz sobre el racismo arraigado en la sociedad estadounidense y cómo se manifiesta tanto en la esfera pública como en los hogares, incluido el de los McLaren, quienes creen ser tolerantes, pero no pueden reconocer el racismo que los rodea.
Noche. Sueño. Muerte. Las estrellas no solo es una novela introspectiva que aborda temas universales, sino que también se presenta como un reflejo oportuno de la sociedad estadounidense contemporánea. Oates lanza una denuncia acertada y vergonzosa sobre el racismo sistémico, la violencia policial y la discriminación. Con buen tino, destaca la importancia de un cambio radical en la sociedad para lograr justicia y paz, señalando que la negativa a reconocer y abordar estos problemas solo perpetúa el ciclo de injusticia.