“En tiempos turbulentos, tener la oportunidad de que haya un evento que se da cada año es para celebrar y reflexionar”. La frase del ministro de Cultura de la Ciudad, Enrique Avogadro, expresa claramente el significado de la Feria del Libro que se realiza desde 1975 —sólo interrumpida por la pandemia en 2020 y 2021— y que se ha convertido en el evento cultural más destacado de la agenda del país.
Este jueves se presentó a la prensa y ante invitados especiales la edición 48 de la Feria del Libro, que se llevará a cabo entre abril y mayo de 2024 y que tendrá a la escritora Liliana Heker a cargo del discurso inaugural. Fue en el auditorio Jorge Luis Borges de la Biblioteca Nacional. Con la presencia de funcionarios, editores, escritores, agentes culturales, y periodistas, la convocatoria de la Fundación El Libro fue tan multitudinaria que excedió la capacidad de la sala.
Entre los presentes se puede señalar a Daniel Divinsky, Javier Martínez, Ignacio Iraola —que lleva adelante la campaña Leyendo.Arg—, Cristina Alemany, Marcos Almada, Carolina Di Bella, Esteban Castromán, Enzo Maqueira, Diana Segovia, titulares de organismos culturales, diplomáticos, un larguísimo etc.
Fue el director de la Feria, Ezequiel Martínez, quien estuvo encargado de dar inicio al acto. “Lo mío es como una performance”, dijo cuando casi trastabilla al subir. Subía al escenario cargado de libros, que fue mostrando uno a uno a medida que avanzaba en el discurso. “Los libros”, dijo, son los “protagonistas y razón de ser de todas las ferias que hacemos a lo largo del año. Son un medio de transporte de las ideas, de la imaginación, del conocimiento”.
El discurso, entonces, fue un viaje y una celebración por la lectura y los lectores. Mencionó a Canela, que abrió la reciente Feria del Libro Infantil y Juvenil, y a Martín Kohan, que hizo lo propio en la Feria de este año. Pero también habló de Stephen King, María Moreno, Haruki Murakami, Leila Guerriero, Patricia Highsmith, Ursula K. Le Guin, Julio Cortázar y Victoria Ocampo, entre muchísimos otros. Su discurso fue una invitación a dejarse habitar por las letras.
En su discurso, Martínez mantuvo el misterio hasta el final respecto de quién dará el discurso inaugural el 25 de abril del año que viene. Incluso mostró uno de los libros que esta personalidad había escrito, pero ocultando la portada. Finalmente contó que la encargada será Heker, como una reivindicación, un gran homenaje y, podría decirse también, como un acto de justicia.
Maestra de escritores, autora de cuentos, ensayos y de las novelas Zona de clivaje y El fin de la historia, que ya son clásicos, Heker continúa la serie de los grandes escritores que dieron la bienvenida a la “aventura” de la literatura. Entre otros: Juan José Saer, Abelardo Castillo, Griselda Gambaro, Claudia Piñeiro, Ricardo Piglia y, más recientemente, Guillermo Saccomanno y Martín Kohan.
Antes de cerrar su participación, Martínez recordó lo crucial que fueron los libros durante la pandemia. “Mucho se ha dicho que los libros nos salvaron”, dijo, y citó a la escritora española Irene Vallejo: “La lectura seguirá cuidándonos si cuidamos de ella. No puede desaparecer lo que nos salva”.
Un puente entre Lisboa y Buenos Aires
En poco menos de 48 horas, Diogo Moura, ministro de Cultura de Lisboa, se convirtió en un porteño adoptivo: caminó por las calles de La Boca, visitó la librería El Ateneo, habló con taxistas y hasta comió una porción de pizza en Güerrín. Su presencia en la ciudad y en este acto está en relación a que Lisboa será la Ciudad Invitada de Honor de la próxima edición de la Feria.
“La ciudad de la inspiración”, como es reconocida Lisboa, busca que la Feria potencie el objetivo de mostrarla como ciudad literaria y acercar al público argentino la diversidad y riqueza de los autores y la escritura contemporánea que se hace en Portugal.
“¿Cómo crear hábitos de lectura? ¿Cómo animar a nuevos lectores?”, dijo, y continuó: “Empezando por las generaciones más jóvenes, no sólo democratizando el acceso a los libros, sino creando mecanismos que animen a la gente a leer. Es un trabajo diario, a veces invisible para la mayoría, pero que deja su huella en el aumento de la alfabetización, el fomento de la lectura y, lo que es más importante, repercute en el desarrollo social y humano de estas comunidades”.
El libro y la literatura, dijo Moura, son una garantía de la independencia, la autonomía del pensamiento y de la creatividad. “Creo que el mejor y mayor compromiso con la libertad que podemos asumir es el compromiso con la lectura”, sostuvo. Con orgullo, Moura terminó su discurso y cedió su lugar al músico José Manuel Neto, que interpretó tres fados, el género típico que se toca con una guitarra portuguesa.
Un balance por lo que vendrá
Luego tomó la palabra Enrique Avogadro, ministro de Cultura de la Ciudad. Con un tono que se acercaba al balance, ya que este año habrá cambio de autoridades porteñas y es probable que deje el cargo, se refirió a algunos de los hechos culturales más salientes de su gestión: la creación de la Casa de la Escritura, la red de Bibliotecas, la Noche de las Librerías, las ferias FELBA, el programa de Mecenazgo —con el que se ha patrocinado desde el Festival Filba hasta el Borgespallooza— y el Pase Cultural, que otorga dinero a los estudiantes de secundario para que puedan consumirlo en cines, recitales, libros.
“Son tantas las emociones y experiencias que vivenciamos a través de la lectura”, dijo, y sumó: “La Feria es, de algún modo, ese laberinto borgeano donde millones de lectores hacen sus propios recorridos, escuchando y descubriendo nuevos talentos del ámbito literario, conociendo el trabajo que realizan las editoriales”. Y continuó con un llamado por la cultura: “Tanto en términos simbólicos como económicos, la cultura fue siempre, a lo largo de nuestra historia, protagonista en la tarea de reconstrucción social”.
Alejandro Vaccaro, presidente de la Fundación El Libro, cerró el acto protocolar. En su discurso se ocupó más de la información para socios y socias. Dio las fechas de la próxima edición: del jueves 25 de abril al lunes 13 de mayo de 2024; también las de las Jornadas profesionales —23, 24 y 25 de abril— y la de la Noche de la Feria: el sábado 27, desde las 20, la entrada será gratuita.
Vaccaro explicó el reglamento, las cuestiones propias a la reserva de espacios, la actualización de montos y exenciones. También hizo una gran convocatoria por la resolución política de dos problemas que acucian a la industria: la falta y el encarecimiento del papel, que afecta la bibliodiversidad, y la necesidad de resolver el IVA para las librerías “que es un grave error”, sostuvo.
Por la edición 47 de la Feria pasaron casi 1.250.000 personas. “Para hacer una analogía gráfica congregó a más de 20 estadios de Boca repletos. Es como si cada día la Feria llenara a una cancha de Boca: hablemos de pasión, hablemos del libro y de lo que genera, porque la Feria genera entusiasmo en los lectores que la acompañan, que la transforman en la experiencia única que es”, concluyó el presidente de la Fundación.
Ahora, todas las miradas puestas en la edición que viene.