El escritor colombiano Daniel Ángel ha dicho que la pluma del argentino Sebastián Basualdo aborda con buen tino temas distintos “como si fuera la hogaza de pan que todos los latinoamericanos hemos debido tragar seca y entera, sin nada para acompañarla”. Su literatura es espejo crudo de la realidad, una exploración de las verdades más incómodas que a menudo preferimos ignorar. Y hacia allí va la obra más reciente de Basualdo, una novela en la que no se anda con rodeos y que acaba de ser publicada en Colombia por Favila Editores.
Si algo destaca en las páginas de Mientras la noche se hundía conmigo es el manejo del lenguaje. Horacio Convertini, de Revista Viva, del Clarín, compara la escritura de Basualdo en este libro con un “caballo desbocado que huye de la pampa y enloquecido se precipita por las calles asfaltadas de Buenos Aires o de cualquier otra ciudad de América Latina”. Y es que la prosa de Basualdo es apasionada y frenética, arrastrando al lector a un torbellino de emociones y reflexiones.
Gabriel Bellomo, en Perfil, resalta cómo Basualdo aborda el tema del dolor en su obra. Lo hace a través de vívidos recuerdos, escenas alcohólicas memorables y visiones que transforman las pérdidas y el olvido en pruebas deslumbrantes de la potencia de la escritura. La literatura, para Basualdo, es un medio para dar voz al dolor, para explorar sus matices y profundidades, y para encontrar la belleza en medio de la miseria.
Así mismo, Fernanda García Curten, de El Interpretador Libros, elogia la voz legítima y el carácter singular de la escritura del narrador argentino. Su rigor formal y su densidad existencial, dice, son evidentes en cada página de Mientras la noche se hundía conmigo.
En una entrevista con El Espectador, a cargo de Danelys Vega Cardozo, el también autor de Cuando te vi caer, reflexiona sobre su elección de escribir novelas. Argumenta que la ficción le permite capturar la esencia de sus recuerdos y sensaciones de la adolescencia de una manera que una autobiografía no podría. Aquí, Basualdo toca un punto crucial sobre la escritura: la distancia entre la experiencia vivida y el recuerdo de esa experiencia. La literatura se convierte en un puente entre estos dos mundos, permitiendo al autor explorar, reinterpretar y dar forma a sus vivencias.
Además de su trabajo en la narrativa, Basualdo también escribe poesía. Aunque muestra humildad al respecto, su admiración por el género es evidente. Para él, la poesía no es solo una forma de escribir versos, sino una manera particular de ver el mundo. Basualdo destaca la importancia de la honestidad y la profundidad en la poesía, señalando que esta forma de expresión puede revelar la verdadera esencia de un escritor.
En Cuando te vi caer, el argentino se adentraba en la vida de un excombatiente de la guerra de las Malvinas, pero Basualdo aclara que su enfoque no es el conflicto en sí, sino la experiencia de una familia con un excombatiente. Argumenta que recordar es esencial para evitar que la historia se distorsione y para comprender cómo los eventos pasados influyen en el presente. También señala cómo la percepción de estos eventos puede ser moldeada por narrativas heroicas o intereses políticos. La conversación con Basualdo lo revela como un escritor apasionado y reflexivo que se sumerge en las profundidades de la experiencia humana a través de su literatura.
El estilo literario de Basualdo, dado a conocer tanto en esta obra como en la precuela de la misma, Todos los niños mienten, respalda la idea de que la literatura está hecha de herencias. En una conversación con Infobae Leamos, a cargo de Belén Marinone, durante la Feria del Libro de Buenos Aires de 2023, Basualdo señaló que la originalidad en la literatura o en el arte no existe realmente, y al leerlo, algo de esto queda resonando en la mente del lector.
“La literatura como cualquier arte es una herencia, y ser original significa ser fiel al origen. Es decir, de alguna manera entender que no tenés nada nuevo para decir, sino que te insertás en una determinada tradición, y a partir de esa, intentar generar algo propio, un universo personal”, comentaba el escritor.
Así pues, la de Mientras la noche se hundía conmigo es una vuelta a los grandes temas de su narrativa, una mirada profunda a la infidelidad y la violencia familiar. Esta novela es, quizás, el preludio de una de las etapas más fructíferas de la carrera literaria de Sebastián Basualdo, que con buen tino va abriéndose espacio.