Cuando la editorial Rey Naranjo anunció la preventa del libro de la periodista Laura Ardila, sabían de antemano que la acogida sería masiva, pero seguro no anticipaban que su éxito fuera tan inmediato.
El día 25 de agosto cerró oficialmente la primera etapa de comercialización de la obra, y para el final de la primera semana de septiembre ya no quedaban ejemplares en la bodega de la editorial.
Si bien todavía se puede conseguir el libro en algunas librerías de cadena del país, la editorial le confirmó a Infobae Leamos que el libro agotó sus 10.000 ejemplares y entrará en reimpresión en los próximos días. Así pues, La Costa Nostra se convierte en uno de los títulos que más rápido ha conseguido la categoría de bestseller en Colombia, con apenas quince días en el mercado.
El libro, que originalmente fue censurado por la filial colombiana de la editorial Planeta, se centra en la influencia y el poder de la familia Char en Colombia, particularmente en la ciudad de Barranquilla.
La cancelación de su publicación por parte de Planeta generó un gran escándalo mediático y llevó a la renuncia del entonces director literario de la editorial, Juan David Correa, que hoy ocupa el cargo de Ministro de Cultura en el gobierno del presidente Gustavo Petro.
El texto de Ardila presenta una serie de datos inéditos que arrojan luz sobre la historia y trayectoria del clan Char. Entre los hallazgos más interesantes se encuentra el trasfondo de la relación de Fuad Char con el M-19, o el papel de “Yuyo” Daes durante la administración del Cura Hoyos como alcalde de Barranquilla.
Aunque Fuad Char expresó en una reunión que nunca haría oposición a un gobierno, excepto al de Gustavo Petro, el libro revela que en el pasado, durante su mandato como gobernador de Belisario Betancour en 1984, fue considerado un “aliado excepcional” del M-19, guerrilla en la que militaba Petro. También se asoció políticamente con el M-19 en elecciones regionales de 1992.
Así mismo, Ardila cuenta que desde la cárcel, “Yuyo” Daes, uno de los dueños de Tecnoglass, desempeñó un influyente rol en la administración del Cura Hoyos, posteriormente condenado por corrupción. Daes ayudaba a tomar decisiones sobre contratación de obras públicas y privatización de servicios en Barranquilla.
El libro menciona una entrevista con Edgar Fierro, alias “Don Antonio,” un ex paramilitar, en la que se afirma que Darío Laíno Scopetta presentó a los empresarios Daes como “amigos de la organización” paramilitar. Aunque se buscó la versión de los Daes para la investigación, estos no respondieron.
Varios son los datos y enredos que revela la periodista. Por ejemplo, habla de la penetración del paramilitarismo en la contratación de Barranquilla. A pesar de parecer inmune a la influencia paramilitar, la ciudad no estuvo exenta. “Don Antonio” relata cómo apoyaron a Guillermo Hoenisberg en las elecciones a cambio de la contratación de la ciudad. También se aborda el atentado contra “Yuyo” Daes que lo dejó en una silla de ruedas.
Se habla de todos los pormenores de la primera alcaldía de Álex Char, que a pesar de presentarse como una reacción a la administración del Cura Hoyos, se asoció con los Gerlein, un clan político y empresarial que contaba con gran poder y negocios públicos en la ciudad, producto del clientelismo y la compra de votos; el libro reconstruye la relación entre Fuad Char y Germán Vargas Lleras, y revela que este último ofreció a Fuad ser su fórmula vicepresidencial en 2010, pero Vargas Lleras lo dejó plantado. Más tarde, Elsa Noguera, actual gobernadora del Atlántico y de la casa Char, fue sugerida como fórmula vicepresidencial por un asesor de comunicaciones de la familia.
El libro profundiza en el modelo de contratación implementado por Álex Char en Barranquilla, donde los megacontratistas, con lazos personales, familiares o políticos con Char, desempeñan un papel fundamental. Este modelo de contratación abre la puerta a la posible lavandería de dinero a través de proyectos estatales.
Y son tantos los “chanchullos” que revela Ardila en La Costa Nostra que el libro está destinado a generar un amplio debate público y a arrojar luz sobre la realidad política y económica de la región en mención. A la espera de la reedición del título, la periodista se prepara para participar de las ferias regionales del libro en Medellín y Cali.