Qué tan real es la virtud y cuáles pecados están dispuestos a dejar pasar aquellos que se consideran “buenos”

“Santuario” fue la primera novela escrita por Edith Wharton, la autora de la reconocida “La edad de la inocencia”. Una obra sobre la condición de ser mujer, la conciencia y la hipocresía en la alta sociedad.

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Portada del libro “Santuario”
Portada del libro “Santuario”

A menudo, Edith Wharton dejó a la vista en sus obras la intimidad y los secretos que albergaba la clase social alta a la que pertenecía. La autora de La edad de la inocencia (Premio Pulitzer 1921, llevada al cine bajo la dirección de Martin Scorsese, con la participación de Daniel Day-Lewis, Michelle Pfeiffer y Winona Ryder), publicó en 1903, a la edad de 41 años, la que podría haber sido su primera obra escrita, Santuario (aunque oficialmente, sus biógrafos sostiene que su primera obra publicada es El valle de la decisión). Considerada por algunos de sus críticos una de sus obras más “extrañas”, de la que muchos no tenían noticia, es para otros una joya a la que vale la pena volver la mirada en la conmemoración de su muerte, ocurrida en Francia el 11 de agosto de 1937.

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De acuerdo con algunos de sus biógrafos, Santuario fue escrita de manera simultánea con la novela La casa de la alegría, publicada en 1905, la novela que la daría a conocer como escritora. En ella, Wharton indaga en los misterios de la personalidad, las deudas de un pasado que no se borra, la moralidad y la inmoralidad, y la lucha constante contra la oscuridad que intenta instalarse en un ser que tuvo por culpa nacer en medio de una sociedad hipócrita.

Edith Wharton en 1907 (Foto: Wikipedia)
Edith Wharton en 1907 (Foto: Wikipedia)

Sobre “Santuario” de Edith Wharton

Resulta poco frecuente que la juventud se permita una felicidad perfecta. Da la impresión de que deben realizarse demasiadas operaciones de selección y rechazo como para poder ponerse al alcance del subyugante despertar de la vida. Pero, por una vez, Kate Orme había decidido rendirse a la felicidad permitiendo que ésta impregnara cada uno de sus sentidos como una lluvia primaveral empapa un fértil prado”. (Tomado de Santuario).

Edith Wharton narra la historia de una familia de la alta sociedad de los Estados Unidos. Denis Peyton, su novia y luego esposa, Kate Orme, y su pequeño hijo Dick.

Todo parece ir de maravilla y sin contratiempos para esta familia, hasta que un evento inesperado ocurre y cambia su vida para siempre, en especial, la de Kate, pues descubre que la fortuna de su prometido está ligada a un origen oscuro que, de hecho, su familia conoce y aprueba.

Ante esta situación, Kate debe enfrentarse por primera vez a la cara más hostil de la vida, pues siempre vivió entre la comodidad como toda una “señorita” sin mayores preocupaciones ni necesidades.

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Una vez se convierte en señora, Kate ha aceptado la inmoralidad de su marido con respecto a la fortuna de su marido, la mentira y el engaño, y ante esto, como casi todos los demás, deberá asumir la hipocresía de una sociedad que los sostiene. Es aquí donde se dedicará a expiar la culpa de la que también es cómplice, mientras enfoca su vida a cumplir el rol de madre que ha asumido.

Sin embargo, el fallecimiento de Denis será un punto crucial en su vida, pues Kate verá cómo el espíritu de su marido parece permanecer en el cuerpo de su hijo, Dick, al que ve crecer y desarrollar, casi que de forma natural, todos los vicios morales que tenía su difunto esposo. Es aquí donde debe consagrarse para luchar contra esos pequeños “demonios” que intentan sobreponerse a todo lo que le ha inculcado.

Con una descripción impecable y visitando en profundidad a cada uno de los personajes, Wharton dejó en esta novela la historia de una mujer que pese a que está dotada de habilidades y capacidades, queda siempre relegada a una figura en segundo plano, pues brillan los protagonistas masculinos en su sociedad, tal como ocurría en aquel tiempo. Kate intentará influir en las decisiones de los hombres sin que ellos lo sepan y allí reside la magia de esta extraña historia que le puso el foco al poder femenino desplazado y la intimidad de las familias de poder.

En su introducción en la edición española, la escritora Marta Sanz mencionó:

“Wharton ofrece al lector dos historias especulares en las que cuestiona qué es actuar correctamente, en función de qué principios y de qué valores; qué es la conciencia, de dónde nace, en dónde repercute; y qué significa corromperse. Todo ello en el seno de una sociedad que transforma a los individuos honestos en animales acorralados y los conceptúa de tontos”.

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Sobre la autora: Edith Wharton

Edith Wharton en 1890 (Foto: Wikipedia)
Edith Wharton en 1890 (Foto: Wikipedia)

♦ Nació el 24 de enero de 1862 en Estados Unidos y falleció el 11 de agosto de 1937.

♦ Fue escritora y diseñadora.

♦ Escribió libros de viajes, relatos, novelas, cuentos y poemas.

♦ Fue una admiradora de la cultura y la arquitectura de Europa.

♦ Escribió y publicó en inglés y francés.

♦ Fue la primera mujer nombrada Doctor honoris causa por la Universidad de Yale.

♦ Algunas de sus obras: La piedra de toque, El valle de la decisión, La casa de la alegría, El fruto del árbol, Madame de Treymes, El arrecife, Estío, El marne, La edad de la inocencia, La renuncia, La inclinación más fuerte, Verses, Una mirada atrás, entre otras.

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