10 libros recomendados para conmemorar el Día Mundial del Rock

En julio se celebra, de manera más o menos informal, el Día Mundial del Rock en el aniversario de Live Aid, uno de los evento que consolidó la globalización de los espectáculos musicales.

Ideado por Bob Geldof, fue algo así como la evolución de los sencillos benéficos Do They Know It’s Christmas y We Are The World con los cuales se buscó recolectar dinero para resolver la crisis humanitaria por cuenta de la hambruna que azotaba a Etiopía y otros países africanos.

Consistió en dos conciertos masivos, uno en el estadio de Wembley, en Londres, Reino Unido, y otro en estadio JFK de Filadelfia, Estados Unidos, con la participación de artistas del calibre de Madonna, Paul McCartney, David Bowie, U2, Phil Collins, The Who, Elton John, Duran Duran, The Cars, Simple MInds, Tina Turner, Mick Jagger, Judas Priest, Led Zeppelin, Black Sabbath, Dire Straits, Queen (en uno de los shows más recordados de su carrera), entre muchísimos otros.

Dependiendo de a quien se le pregunte, es una fecha que no deja de causar controversia. A pesar de que para muchos el Live AId cumplió con su objetivo de ayudar a combatir la hambruna del pueblo etiope, con el tiempo la reputación del evento más allá de la música ha quedado en entredicho. Algunos sostienen que ese fue el momento cuando los líderes mundiales dejaron en manos de la iniciativa privada la responsabilidad de responder a crisis humanitarias de ese calibre, sin resolver los problemas de fondo que atravesaba un país como Etiopía en ese momento inmerso en una guerra civil; además, se acusó al evento de privilegiar a los artistas blancos por encima de los afroamericanos en su programación.

Como fuese, esta es la fecha elegida para celebrar el Día Mundial del Rock, y es por eso que Infobae Leamos recomienda 10 libros para celebrar un género que nunca deja indiferente a nadie y siempre tiene una historia más para contar.

El glam rock es una de las grandes revoluciones sonoras y estéticas de los años 70. Abrió las puertas de par en par a la confusión sexual en el rock, y dio vida a figuras como David Bowie, T. Rex, Roxy Music, New York Dolls, Alice Cooper, Slade, Sweet o Suzi Quatro, que marcaron a fuego una transición desde los valores hippies orientados a lo colectivo, a unos donde la individualidad pasaba al primer plano.

El periodista británico Simon Reynolds, sin embargo, lleva este relato donde el ejemplo de David Bowie es el hilo conductor de toda la historia más allá, al abordar el impacto que tuvo más allá de la música (son recurrentes las referencias a la moda o al cine con Rocky Horror Show), pero incluso después de que terminaran sus años de apogeo con el impacto en figuras como Sex Pistols, Kate Bush, Morrissey, Lady Gaga o Beyoncé en lo que se refiere a forjar identidades sexuales y de género más allá de las socialmente aceptadas.

Freddie Mercury, tal vez el nombre con el que más se identifique Live Aid a lo largo de los años, es considerado casi por unanimidad como el mejor frontman de todos los tiempos. Pero al repasar su vida fuera de los escenarios, hay un halo de misterio e intimidad que ni siquiera la biopic Bohemian Rhapsody se atrevió a explorar en profundidad.

La periodista Lesley-Ann Rice se propuso revertir esa tendencia en una biografía que explora sus orígenes parsis en la isla de Zanzíbar, su traslado a Londres, su constante búsqueda de una identidad propia, el desarrollo de un talento descomunal que llevó a Queen a convertirse en un fenómeno de masas internacional, y una vida que alcanzada la fama tuvo más excesos y más historias hasta ahora desconocidas sobre el nivel de intimidad en muchas de sus relaciones con personas de ambos sexos.

U2 fue otro de los grupos que se ganó un prestigio enorme con su aparición en Live Aid. Hasta ese momento eran un grupo en ascenso con ganas de ir por más. Pero esa escena en el estadio de Wembley donde Bono sacó a bailar a una mujer de entre los miles de espectadores que abarrotaban el lugar (luego se supo que le salvó de morir asfixiada) captada por las cámaras, marcó el ascenso de los irlandeses al estrellato internacional.

Aunque han corrido ríos de tinta relatando los orígenes y desarrollo del cuarteto a lo largo de los años, este esfuerzo marca la primera vez que el propio Bono nos cuenta la historia en primera persona.

Desde su infancia en Dublín marcada por el conflicto armado entre el IRA y las autoridades británicas (y que perfiló su postura pacifista), pasando por la repentina muerte de su madre cuando tenía 14 años y narrando el camino que trazó U2 para convertirse en la banda de rock de estadio por definición mientras se dedicaba al activismo luchando contra la guerra, el SIDA y la pobreza extrema; hay un equilibrio entre autorreflexión y humor sobre todos estos hechos que hacen de esta una amena lectura, pero también un prisma para entender los orígenes de un frontman icónico como pocos.

Con el permiso de The Beatles, probablemente no ha existido en el ámbito de la música pop una figura tan inquieta y determinada a la hora de abrazar la siguiente gran innovación que David Bowie.

Escrito por Lesley-Ann Rice (quien tuvo la suerte de ser amiga del cantante desde su infancia), explora los orígenes de Bowie cuando era David Robert Jones (su nombre de pila) y explica como sus inquietudes artísticas lo llevaron a probar todo lo que el mundo del arte podía ofrecerle, al punto que además de su faceta como cantante que le dio un éxito tras otro, se probó en la pintura y en la actuación con un éxito similar hasta su fallecimiento en 2016.

A través de entrevistas con figuras y amigos cercanos a Bowie, este libro explora esas virtudes que lo hicieron una figura que sigue siendo venerada hasta hoy, pero también su influencia en la cultura popular.

Una de las grandes cargas que ha soportado el rock a lo largo de la historia (y con razón) es la de edificarse y desarrollarse bajo lógicas machistas. No solo porque muchos de sus exponentes más destacados son hombres, sino por todas las historias de excesos y groupies de las que gozaron por cuenta de la fama. A pesar de ello siempre hubo mujeres marcando una pauta en la música rock, buscando reivindicar de una u otra forma el rol femenino desde un punto de vista distinto al hegemónico.

De ahí que la periodista Anabel Vèlez se dedique a rescatar un siglo de aportaciones de las mujeres al gènero desde los dìas del blues, el R&B, el jazz o el country, hasta la consolidación del rock como un fenómeno juvenil e internacional, y luego con todas las bifurcaciones sonoras y estéticas que trajo consigo el rock alternativo. Figuras como Chrissie Hynde, Patti Smith, Joan Jett, Pat Benatar, PJ Harvey o Amanda Palmer protagonizan este relato cronológico que deja siempre con ganas de más.

Este libro narra a profundidad la historia de Sonic Youth, uno de los grupos que perfilaron en los Estados Unidos la escena del rock alternativo y que ha gozado de un culto considerable a lo largo de su carrera.

Basado en las entrevistas del periodista catalán Ignacio Juliá (fundador entre otros de la revista Rockdelux) a la banda a lo largo de los años, muestra la intimidad del grupo neoyorkino desde sus inicios hasta su separación en 2010 no solo a través de sus palabras, sino con imágenes que muestran algunos de los momentos más notables del cuarteto a lo largo de una carrera donde dieron forma al noise rock, a la par que se convertían en un ejemplo a seguir para miles de bandas alrededor del mundo.

Esta es la autobiografía del cantante escoces Bobby Gillespie, reconocido en el ámbito del rock alternativo por formar parte primero de The Jesus And Mary Chain y más tarde por ser el líder de Primal Scream, responsables de grabar el influyente álbum de 1991, Screamadelica, en el que las barreras del rock y la música house se derribaron de una manera nunca antes vista.

A lo largo de su relato, Gillespie narra su niñez en Glasgow en una familia de clase obrera, el descubrimiento sucesivo del glam rock y luego del punk, que marcaron su vida al punto de dedicarse por completo a la música, su inclinación por la política de izquierdas y hasta sus experiencias con las drogas.

Es el testimonio de un momento de la historia de Gran Bretaña que el gobierno de Margaret Thatcher amenazó con arruinar para la clase obrera, y terminó siendo rescatada por el acid house.

La escena musical de California orientada a la música de autor floreció desde fines de los sesenta con la inocencia del hippismo como telón de fondo. Grupos como The Byrds, The Mamas and the Papas o solistas como Jackson Browne, Neil Young o Linda Ronstadt marcaron la pauta para forjar una escena donde locales como el Troubadour se hicieron una parada obligada para todos los aspirantes a labrarse un lugar en el negocio de la música.

La aparición de sellos como Reprise (subdivisión de Warner) y especialmente Asylum de David Geffen sirvieron para mostrar una fusión de elementos folk rock, country y hasta música tradicional mexicana que le permitió a estas figuras y otras como Joni Mitchell, James Taylor, The Flying Burrito Brothers, Eagles o Fleetwood Mac emerger como las grandes estrellas musicales de los años 70.

Este libro de Barney Hoskyns relata cómo surgió esta floreciente escena, y también cómo decayó en medio de excesos con las drogas, relaciones disfuncionales y puñaladas por la espalda de la misma industria musical que los acogió en primer lugar.

Los años 90 serían imposibles de entender sin Oasis, sea que se les mire como causa o como efecto. Ser vistos como la respuesta al grunge y a Nirvana fue igual de importante que ser una de las cabezas más visibles del movimiento britpop a mediados de la década.

En Supersonic, son los propios hermanos Liam y Noel Gallagher junto a sus otros compañeros de banda y personas cercanas al grupo quienes relatan por primera vez en formato escrito sus orígenes en los barrios bajos de Manchester, tocando en bares una y otra vez mientras se perfeccionaba un sonido.

Casi de la noche a la mañana, se convirtieron en un grupo de primera línea en la siempre exigente escena musical inglesa, llegando con sus dos primeros álbumes a las radios de todo el mundo y llegando a la cima de su popularidad con dos conciertos multitudinarios en Knebworth Park, en 1996. Incluye fotografías exclusivas.

Dave Grohl es una especie de Phil Collins para la generación millennial. Ha estado en absolutamente todas partes y ha vivido muchas vidas en una sola.

No conforme con ser baterista de Nirvana y clave para que estos llegaran a ser la banda más importante del mundo, o guitarrista y cantante de Foo Fighters que hasta hoy goza de su status como grupo de primera linea en el plano internacional.

Es tan insaciable que ha tocado en proyectos paralelos como Probot y Them Crooked Vultures, y ha colaborado con otros artistas que incluyen a Paul McCartney, Tom Petty o Queens of the Stone Age.

En The Storyteller, Grohl hace un retrato crudo y sin rodeos de una carrera fuera de serie donde lo cotidiano ha tenido un peso muy curioso. Se muestra como alguien que por encima de todo ama la música, y es ella quien lo ha llevado a tocar en varios de los escenarios más grandes del mundo. No falta la comedia en una historia donde también el dolor por los que se han ido juega un papel fundamental.