Un nombre de guerrero es un testimonio honesto y doloroso. Se trata de la primera novela autopublicada de Laura Muñoz, que además, destaca por ser autobiográfica. En ella la autora retrata las luchas internas, el duelo y las presiones de una sociedad que a menudo resultan desgastantes, enlazadas con la impresionante mezcla de emociones que una mujer experimenta cuando se enfrenta a la pérdida de un hijo.
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Sobre su motivación para escribir este libro, Muñoz explicó en su momento a Mamagazine:
“Yo era la principal destinataria de Un nombre de guerrero. A mitad del proceso descubrí con sorpresa que estaba escribiendo una novela, y fue una alegría inmensa, porque ello me permitiría transformar el dolor en algo bello y delicado. Tuve que volver a empezar y reescribirlo casi todo. Hoy, la motivación se ha ensanchado. Me he dado cuenta de que los sentimientos no tienen fronteras y pueden llegar a muchas personas ajenas a esta realidad”.
“Un nombre de guerrero” de Laura Muñoz
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“Un nombre de guerrero nace del apremio de poner palabras a una historia mil veces repetida, pero inexplicablemente silenciada. Nos relata la batalla sin tregua de una mujer cuyo anhelado embarazo de pronto se complica. Una mujer obligada a emprender un viaje contrarreloj donde las dudas, la culpa y el miedo a la pérdida irreparable la empujan hacia adelante en busca de soluciones”.
Así reza parte de la sinopsis con la que Laura Muñoz presenta su libro Un nombre de guerrero, un registro de vida, un testimonio en el cual es difícil identificar dónde comienza la ficción. Con el dolor de la mujer que pierde un hijo, retrata la historia de quien tenía el sueño de ser mamá pero que, obligada por las circunstancias, debe enfrentarse a un destino irremediable.
Para la protagonista de esta historia el tiempo corre en contra, para resolver su destino tiene una fecha como plazo, la semana 22, el plazo final para, como futura madre, tomar la decisión más compleja de su vida. Esta es una novela que viene con una dramática carga de realidad escrita con infinita ternura. Una historia tan bella como cruda.
Laura Muñoz cuenta la historia de una mujer que empezó a escribir para luchar en contra de la desmemoria y, a la vez, encontrar la sanación a un corazón roto que, tras la inmensa ilusión de saludar a su hijo, tuvo que despedirse de él antes de tiempo. Se trata, entonces, del aborto de un hijo deseado debido a un diagnóstico médico inesperado.
Víctima de un derrame pleural o hidrotórax, la protagonista no tiene salida distinta a someterse a un aborto que no quería, un dolor que se suma al rechazo de una sociedad que la señala de ser la mala de la historia.
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Así retrató su propia tragedia la autora española, poniendo por escrito toda su dura experiencia: sufrió la pérdida de un hijo, un aborto voluntario, un tabú sobre el que dijo:
“(...) publicar Un nombre de guerrero ha representado la última etapa de mi proceso de duelo. Habrá personas a las que a lo mejor les sorprenda lo que voy a decir, pero ha sido una forma de salir del armario, de gritar al mundo lo que he vivido sin la vergüenza o la culpa de reconocer que fui yo quien decidió terminar el embarazo”, contó Muñoz a Kana, psicología y terapias creativas.
Sobre la autora: Laura Muñoz
♦ Nació en Toledo, España.
♦ Autora de Un nombre de guerrero.
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