“Me gusta pensar a la carta natal como vehículo hacia el descubrimiento de nuestros propios códigos”, escribe la astróloga argentina Joaquina Astral en su primer libro, Entre nosotros, la luna.
Entre las estrellas y el quirófano, la autora tiene un pie en lo esotérico y otro en lo pragmático. Además de astróloga y escritora, Joaquina Astral es instrumentadora quirúrgica. A través de la astrología descubrió a la carta natal como una herramienta que revela la energía potencial para el desarrollo de cada persona, patrones energéticos, potencialidades, aprendizajes, formas de amar, de cuidarnos, de desear, de ir en busca de lo que queremos.
Entre nosotros, la luna, editado por VR, es una guía completa para entender, primero, las diferencias entre el sol, mejor conocido como nuestro signo zodiacal, el ascendente y la luna. Pero, además, la autora pone el foco en esta última y analiza su importancia como rectora de nuestros patrones emocionales.
En su nuevo libro, Joaquina Astral -que cuenta con más de 340 mil seguidores en su cuenta de Instagram- detalla qué significa tener la luna en cada uno de los signos zodiacales y no sólo describe características significativas de cada una de ellas sino que, además, las introduce a través de una poesía alusiva a dicha luna.
“Entre nosotros la luna” (fragmento)
Tu luna
La luna cambia de signo cada dos días y medio, a diferencia del sol que lo hace cada treinta días. ¿Cómo hacemos para conocer nuestra luna? Lo más recomendable es en una sesión de carta natal con una astróloga o astrólogo de confianza. Pero también podemos acercarnos a nuestra propia carta en astro.com. Allí, con la fecha, hora y lugar de nacimiento, podremos notar en qué signo está nuestra luna.
A través de este libro, descubriremos los talentos y los mecanismos de defensa que revela la energía lunar.
Un poema a la luna
El único riesgo: no arriesgarme.
Un cielo me empuja
a definir, probar, iniciar
a decirle que sí a ese deseo,
prenderme fuego.
Una acción que define sí o no, todo o nada.
Cuando la quietud logra convencerme, el tambor interno late más rápido,
el que no entiende de lamentos ni de miedos, y me manda hacia adelante
a conquistar el mundo entero.
Calentando motores,
un corazón que arranca y que no mide
para reiniciar todo lo que venga
y darme la posibilidad,
así como salga, pero que salga.
Crear la vida que quiero vivir.
El impulso como bandera,
me invita a lanzarme,
sacarme hasta la piel
dejar la herida expuesta,
llevando conmigo mis propias cicatrices,
eligiendo mis luchas.
Porque no me da lo mismo todo,
aunque no haya tiempo de asumir consecuencias.
En cada arranque hay más potencia
más fuego, más explosión.
Tanto deseo que no hay duda.
Amo mi cicatriz que me muestra
que no es momento de arreglar,
sino de seguir caminando.
Los corazones rotos se curan.
Los corazones que no se usan se convierten en piedra.
El fuego pide pista,
el cielo se prende.
Y yo exploro aquellos lugares
que hoy tienen sentido para mí.
Me mando y voy
donde puedo expandirme.
Y donde no hay tanto espacio
con más fuerza abro
la profunda corazonada
que con certeza avanza.
El misterio del éxito
para cada quien
distinto será.
Para mí, poder elegir aquel lugar
donde el corazón reviente de ganas
y con eso hacer mi propio viaje.
Marcando en la piel
mi propia ley, que incluye celebrar
y confiar en mi propio potencial,
que arma viaje, cree y va creando.
Urge despertarse,
sacudirse el polvo y mandarse a vivir
como si mañana se acabara el mundo.
Porque cuando abunda el deseo no existe razón.
No quiero reaccionar,
no quiero ser reactiva a algo,
quiero iniciar porque lo quiero,
porque entiendo que soy el propio líder de mi realidad.
Me animo a dar el primer paso,
quizás eso te inspire también.
Acá estoy reafirmando mi identidad, compartiendo con el mundo mi deseo,
desconectada del piloto automático.
Con el correr de los días, el abismo en la panza me confirma
es hoy, es ahora.
Siento la velocidad.
Esta energía me recuerda que cuando arriesgo gano,
porque en la apuesta nada sale mal, porque lo intento.
Y en la acción de intentar cabe cualquier posibilidad.
El deseo visceral que me empuja
sin medir consecuencias,
porque la razón no ha llegado.
Me saco el filtro y empiezo.
Grito lo que quiero a viva voz.
Luna en Aries
Fuego. ¡Rápido! Llama la luna en Aries.
Impulso, su mejor definición; activa, su mejor cualidad. Deseante, resolutiva y direccionada. Espontánea y decidida, esta luna posee energía de conquista. De espíritu pionero, su necesidad básica y fundamental busca resolver las situaciones de inmediato.
Su primer registro de refugio y cuidado fue una madre, o quien haya ejercido el rol arquetípico de madre, que sació sus necesidades de inmediato, sin dejar pensar al nativo con luna en Aries si existía la posibilidad de que su deseo fuese otro.
La madre de la luna en Aries le proporcionó amor de manera instantánea. Esta luna crece con un registro de dos cosas: una necesidad de resolver todo inmediatamente, y una sensación de defensa ya que ese amor puede sentirse un tanto invasivo.
El niño con luna en Aries crece en un hogar en el que percibe su seguridad mediante la acción. Su primer contacto con el amor fue así, un amor accionario, impulsivo, activo y resolutivo, entonces ¿cómo no necesitar lo urgente?
Ante cualquier registro de inseguridad, ante cualquier crisis, la luna en Aries reacciona, acciona. Valora la acción como seguridad, la acción sin proceso de razón.
La energía de la luna vibra alrededor de nuestro campo, es decir que una luna en Aries estará cómoda en un ambiente o vínculo en el que el enfrentamiento sea frecuente. Ante un obstáculo, por ejemplo, la espera o el freno que se interponen en su deseo, se tornará defensiva.
La luna en Aries será la primera en dar un paso al frente para resolver cualquier cosa que la inquiete. Prioriza la saciedad de su necesidad de inmediatez.
No existe posibilidad alguna de que la luna en Aries habite un lugar pasivo frente a una incomodidad. El inconveniente que podría encontrar esta luna en el camino, ante tanta necesidad de acción, es llevarse por encima los deseos y tiempos ajenos.
Quién es Joaquina Astral
♦ Es astróloga, escritora e instrumentadora quirúrgica.
♦ En su Instagram @joaquina.astral cuenta con más de 340 mil seguidores.
♦ También brinda talleres sobre astrología.
♦ Entre nosotros, la luna es su primer libro.
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