Santiago Posteguillo: “Julio César era un populista pero no se enriquecía a costa de sus ciudadanos”

El best-seller español viajó a Buenos Aires y presentó su última novela, “Roma soy yo”, en la Feria del Libro. En diálogo con Infobae Leamos habló sobre cómo las políticas de aquel emperador romano interpelan la realidad: independencia judicial, populismo, las grietas y por qué se parece a Zelenski.

Guardar

Nuevo

La nueva novela de Santiago Posteguillo, "Roma soy yo", fue la más vendida en España en 2022 (Maximiliano Luna).
La nueva novela de Santiago Posteguillo, "Roma soy yo", fue la más vendida en España en 2022 (Maximiliano Luna).

Roma del año 77 a.C. El senador Dolabela se encuentra en una situación complicada: debe enfrentar un juicio por corrupción. Pero la cuestión no queda ahí: el acusado contrató a los mejores abogados, compró al jurado y no hay fiscal que se atreva a llevar la acusación. Hasta acá, parece una escena que se podría ajustar a la actualidad. Pero un joven patricio, de solo veintitrés años, acepta el desafío de llevar la acusación. Este desconocido abogado es nada menos que Julio César. ¿Su objetivo? Defender al pueblo de Roma y desafiar el poder de las élites.

De eso se trata Roma soy yo, la última novela del best-seller español Santiago Posteguillo. En un coqueto hotel de Retiro, el autor de Trilogía de Trajano, compuesta por Los asesinos del emperador, Circo Máximo y La legión perdida, recibe a Infobae Leamos y cuenta que la serie, que inicia con esta novela - y a la que le siguen seis títulos más y que lo mantendrán ocupado durante varios años- “es un debate sobre la independencia judicial”. Y agrega que su desafío es “contar a Julio César en toda su complejidad y sus matices”, un personaje del que “podemos aprender más”, sugiere. Con más de cuatro millones de lectores en todo el mundo, Posteguillo va por más y se embarca en un proyecto titánico: reconstruir la vida de uno de los políticos romanos más importantes.

Santiago Posteguillo (Maximiliano Luna)
Santiago Posteguillo (Maximiliano Luna)

¿Cómo fueron los orígenes del hombre tras el mito? Las 800 páginas de esta ficción se proponen también profundizar en la apasionada historia de amor de Julio César con Cornelia, su primera esposa (la antesala de su gran amor, Cleopatra). “No se puede entender a Julio César sin explicar su relación con las mujeres porque él crece en un entorno donde las mujeres son muy relevantes para él desde el punto de vista privado”, señala Posteguillo.

Tras la presentación a sala llena en la ciudadan del Libro 2023, el multipremiado autor -recibió el Premio a las Letras de la Generalitat Valenciana, Barcino de Novela Histórica y Planeta- asegura que con César “se cae en lugares comunes y se distorsiona realmente su figura” y lleva al lector a una Roma divida en dos, llena de estrategias políticas, traiciones, muerte, corrupción en la que Julio César se consagra como una figura popular. Como ayer, como hoy.

Te puede interesar: Julio César contra la corrupción y los oligarcas: la apasionante historia que cuenta Santiago Posteguillo

"Roma soy yo".
"Roma soy yo".

—Cuando Borges rastrea las raíces del peronismo llega hasta la figura de Julio César ¿qué prácticas de los líderes de masas parten de Julio César?

—De Julio César parten un montón de cosas, por ejemplo, el periodismo, en el año 59 a.C. El nacimiento de la prensa lo inventa Julio César. Cuando él tenía que votar la reforma agraria, se da cuenta de que los senadores votaban sin miedo porque el pueblo nunca sabía lo que hacían. Entonces, él inventa el acta de diurna, que es publicar en una tabla en el foro de Roma lo que ha votado cada senador a cada ley. Luego se fueron añadiendo noticias económicas y hasta si una obra se había estrenado y si habían abucheado o no al actor. Eso luego se copiaba por copistas y se distribuía por todo el imperio.

—¿Entonces?

—Muchas de las decisiones políticas y de las estrategias de Julio César, y el entorno en el que vive, entroncan directamente con las prácticas que podemos ver hoy día. En Roma soy yo lo que vemos es un debate sobre la independencia judicial, donde tenemos a un senador juzgado por corrupción, al que apenas nadie se atreve a enfrentársele. Entonces que aparece un joven audaz, dispuesto a jugarse la vida -literalmente-, cosa que sigue pasando hoy día: te puedes acabar jugando la vida. En el año 77 a.C., para ser juzgado frente a un tribunal de 52 jueces, el dictador Sila había dejado preparadas leyes que implicaban que los senadores fueran los que juzguen a un senador. Lógicamente, predispuestos a exonerar a un compañero suyo. En la siguiente novela habrá zancadillas políticas y planteos de cambiar leyes electorales y cómo querían evitar que subiera al poder.

Te puede interesar: “El revisionismo histórico debe tener un límite”

Santiago Posteguillo en diálogo con Infobae Leamos (Maximiliano Luna)
Santiago Posteguillo en diálogo con Infobae Leamos (Maximiliano Luna)

—Volvamos a Borges

—Me atrevo a matizar a Borges porque Julio César es el compendio de todas esas manipulaciones políticas.. Julio César es un animal político que aprende a sobrevivir en un mar de zancadillas políticas y lo que ocurre es que es más inteligente que los demás. Lo que voy a intentar con las novelas es reflexionar y entretener. Tengo la paranoia personal de que estamos gobernados por gente que, como no dan mucho de sí, lo que desean es gobernar sobre un pueblo o sobre unos ciudadanos ignorantes que no lean y que no piensen, cuyos votos sean mucho más manipulables.

—En las primeras páginas del libro detalla que Roma estaba dividida en dos bandos irreconciliables. En Argentina hablamos de grieta, ¿este es su origen?

—Creo que la sociedad argentina está polarizada, como varios países de América Latina, como mi propio país y como Estados Unidos. Y creo que es lógico que haya adversarios políticos y formas distintas de entender cómo se organiza la sociedad. Pero transformar al adversario político en enemigo político es un error. La gente que llega a un nivel muy sectario y estas cosas en política no conducen a buenas conclusiones. Hemos evolucionado tecnológicamente pero la naturaleza humana es exactamente la misma ahora que hace dos mil años. Nos enamoramos y nos desenamoramos, somos leales o traicionamos de las mismas formas ahora que hace 2000 años y en política está todo inventado. Hay grietas lamentablemente por todo el mundo.

Julio César (Getty Images)
Julio César (Getty Images)

Te puede interesar: Viviana Rivero y su nueva novela sobre un romance oculto en Roma tras el asesinato de Julio César

¿Podríamos decir que Julio César fue el padre del populismo?

—No exactamente, porque las tendencias populistas han existido siempre y podríamos encontrar trazas de populismo en distintos líderes ateniense o espartanos e incluso en tiranos de Grecia, en Sicilia, hablando del siglo IV o V a.C., de tal forma que el populismo ha existido siempre desde que existe el ser humano. Es que Julio César era muy hábil y entonces podía conseguir más éxito en su populismo. Y César es el sobrino de Mario y hereda la perspectiva del pueblo. Entonces, él lo que va a hacer es conseguir lo que la causa popular no había conseguido nunca. Un dictador del siglo XXI derrota a sus opositores y ¿qué hace con ellos? Los asesinan. Por ejemplo, Putin y el líder norcoreano, Kim Jong-un. César derrotará a todos sus opositores políticos en la guerra civil. ¿Y qué hace con ellos? Les perdona la vida.

El líder norcoreano Kim Jong Un observa un simulacro de misil (KCNA via Reuters)
El líder norcoreano Kim Jong Un observa un simulacro de misil (KCNA via Reuters)

Por eso dijo en una entrevista que Zelenski era como el joven Julio César

Zelenski tiene un elemento de la individualidad que cambia el mundo y sale de lo inesperado. Porque yo creo que Europa Occidental se quedó totalmente sorprendida cuando un político, en lugar de hacer lo que cualquier político de Bruselas habría hecho cuando entraron los tanques rusos por la zona este de Ucrania. De pronto, este hombre coge y se pone un casco y dice “no me voy”. Y, de pronto, el ejército ucraniano dice, pues si se queda el jefe, nos quedamos todos. Por eso creo que una persona individualmente influye mucho. Julio César es un individuo que aparece y que cambia la historia. Y es ese individuo que nadie espera excepto uno, solo Sila lo veía.

FOTO DE ARCHIVO. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, asiste a una rueda de prensa conjunta con el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki (no en la foto), en Varsovia, Polonia. 5 de abril de 2023. Servicio de Prensa de la Presidencia de Ucrania/Handout vía REUTERS
FOTO DE ARCHIVO. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, asiste a una rueda de prensa conjunta con el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki (no en la foto), en Varsovia, Polonia. 5 de abril de 2023. Servicio de Prensa de la Presidencia de Ucrania/Handout vía REUTERS

¿Escribir sobre Julio César hoy es una cuestión política?

—Tiene su parte política, indudablemente. Porque a mí me preocupa mucho cuando en mi país se juega a despertar el “guerra civilismo”. Despertar grandes monstruos no es una gran idea, como llevarnos a una polarización donde al final se cosifica al adversario político. La fase dos es aniquilarlo. Veo que los políticos de todo el mundo se están echando los trastos unos a otros en lugar de intentar resolver los temas de la forma más razonable posible. Churchill también lo tenía muy difícil en la Segunda Guerra Mundial, pero la diferencia es un estadista y un político. El estadista piensa en la próxima generación y el político en las próximas elecciones. Hoy día no tenemos líderes de este tipo. ¿Cuáles son las opciones? ¿Qué vuelva Trump?

—Según escribe en la novela, Julio César también tenía algo de marketing propio

—Sí, sin duda alguna. Pero tú observas unas enormes diferencias, estamos hablando de que César era un populista, sí, pero César acababa las obras públicas. ¿Qué político hoy día se endeuda personalmente para acabar una obra pública? Lo que sí que me es relevante es que él no planteaba enriquecerse a costa de sus propios ciudadanos. Saben que no queda bien hacer lo que hicieron los nazis de quemar los libros en la plaza, entonces quieren robots que trabajen mucho y que no piensen. Y personas que no tengan capacidad de reflexión a la hora de votar. Pienso que es muy revolucionario escribir libros que contengan mucho pasado cultural.

infobae

Entonces, ¿es un populista como los de ahora?

—Perdón, no. Es que el populismo de hoy día es muy diferente. Es un populismo maquiavélico que busca el beneficio personal y eso es lo que más preocupa.

—En el cuento La trama, Borges repone el famoso último grito de Julio César: “Tú también, hijo mío”. Shakespeare y Quevedo también lo hacen. ¿Cuánto le dio Julio César a la literatura?

—Una inmensidad. Es un personaje de una magnitud brutal. Es que precisamente en él se reúne el hecho de que históricamente es tremendamente importante. Probablemente a César le ocurre esto porque si hay una vida que es de novela, es la suya, porque es espectacular las cosas que hace, cómo vive constantemente al límite, siempre en medio del conflicto. Ha dado mucho porque su figura es clave en la civilización occidental y su vida es tremendamente literaria.

—En una entrevista con Infobae Leamos Luz Gabás dijo que “cuando un hombre escribe una historia de amor es algo sublime, pero si lo hace una mujer es algo menor”, ¿qué opina?

—Sí, ella tiene razón sobre lo que cuestiona. ¿La literatura romántica que están escribiendo mujeres de hoy día es necesariamente desechable? No. Pero sí que parece que si la cuenta una mujer es distinto. Nadie cuestiona a Anna Karenina o a Madame Bovari porque están muy bien contadas. Pero si lo hubiera contado una mujer habría que ver.

Quién es Santiago Posteguillo

♦ Nació en 1967 en Valencia, España.

♦ Estudió literatura creativa en Estados Unidos, y lingüística y traducción en diversas universidades del Reino Unido.

♦ En 2006 publicó su primera novela, Africanus: El hijo del cónsul, el inicio de una trilogía que continuó con Las legiones malditas y La traición de Roma. También es autor de la “Trilogía de Trajano”, compuesta por Los asesinos del emperador, Circo Máximo y La legión perdida.

♦ Es el autor más vendido de novela histórica en lengua española con más de 4.000.000 de lectores.

<br/>

Seguir leyendo:

Guardar

Nuevo

Últimas Noticias