La escritora y creadora de contenido Raiza Revelles es una de las mexicanas invitadas a la trigésimo quinta edición de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, en la que México ha sido el país invitado. La youtuber está presentando ante sus seguidores el primer libro de una serie llamado “El reflejo de la bruja”, abordando una temática con la que ella está bastante familiarizada, la brujería.
Desde el año 2012 esta mexicana ha estado en redes sociales compartiendo contenido en un principio enfocado en reseñas y recomendaciones de libros, así como diferentes tutoriales; sin embargo, con el tiempo en sus videos empezó a destacarse otro tipo de contenido que le llamaba la atención: el misterio y lo paranormal.
Raiza habla de leyendas, fantasmas y sus experiencias paranormales en sus videos; destacándose en las redes sociales por ser una de las youtubers que más aborda estos temas desde sus propias vivencias. Además, demuestra y comparte su interés por el esoterismo al declararse públicamente ante sus seguidores como una bruja.
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Precisamente, en su área de escritora Revelles se ha enfocado en los cuentos de terror y ciencia ficción con “El chico de la piel de cerdo” y “Zelic. La nueva tierra”, respectivamente. Ahora, en el marco de la FILBo, la mexicana estuvo presentando el 30 de abril su primera novela juvenil llamada “El reflejo de la bruja”, el primero de una serie en la que narrará la historia de la bruja Lena, su aquelarre y el demonio Caleb.
Momentos antes de su presentación y firma de libros en Corferias, Bogotá, Raiza Revelles habló con Infobae Leamos sobre su interés en el esoterismo y la aventura mágica que empieza con este, su tercer libro.
- En “El reflejo de la bruja” vemos un enfoque importante hacia la figura de la familia y el legado familiar ¿hay alguna similitud con las relaciones que tiene en su familia con su hermana, abuelas o tías?
- Sí, justo algo que es importante para mí es representar todo esto del aquelarre, en el mundo lo que conocemos de las brujas es precisamente el aquelarre, donde se reúnen todas estas mujeres. Entre el aquelarre de Lena y mi familia sí diría que hay similitudes porque en mi familia extrañamente no nacen muchos hombres, somos más mujeres y me tocó crecer con mis abuelos, mis tías, mi mamá y mi hermana. Para construir a los personajes traté de en principio pensar en qué misión les quería dar porque algo que he tenido es que todo lo que hago tiene un propósito, no hay nada que haga porque sí, quería que ellos tuvieran su misión y a partir de ahí creaba su personalidad; hay alguno que otro que está inspirado en algún pariente o familiar.
- ¿Cuánto tiempo de trabajo hay detrás de esta novela y hubo algún momento en el que pensó en desistir?
- Sí pensé en desistir, tiendo a destruir mucho lo que hago, trabajo en algo mucho rato y luego al final siento que no es lo suficientemente bueno para nada, lo destruyo o lo borro. Muchas veces pensé en desistir y sentía que lo que hacía no tenía valor, pero lo que me gusta decir es que al final del día somos una colección de recuerdos y cuando nos toca despedirnos pesa más que no te quedas pensando qué hubiera pasado si, sino que piensas ‘lo intenté'. Sí lo pensé, pero afortunadamente no lo hice, gracias sobre todo a mi hermana o mi editora.
- Cuando se habla de aquelarres y brujas se piensa en mujeres fuertes y empoderadas, cosa que está plasmada en las páginas de su libro. Lena, la protagonista, es una bruja de cocina ¿Por qué elige esto?
- Hay dos razones principales por las que quise que Lena fuera una bruja de cocina. La primera, porque a mí me gusta mucho comer, pero no sé cocinar, se me ha incendiado la cocina muchas veces y admiro mucho a la gente que cocina porque siento que es un arte y una manera de expresarse. La segunda razón es que siento que en la comida es en donde más tenemos presentes las energías; por ejemplo cuando la gente dice que algo ‘está hecho con amor’ o cuando algo sabe mal y dicen que ‘el cocinero estaba de malas’, he escuchado mucho eso y la gente no se da cuenta que cree mucho en esto por la comida. Creo que al cocinar pones ahí algo de tu energía o de tu magia, entonces era importante para mí que estuviera presente porque es un tipo de magia del que todos tenemos noción de que existe. En el día a día hay practicantes de brujería de cocina que te preparan pan para la tristeza o cuando estás enfermo y tu abuelita te prepara sopa, no es tanto la sopa, sino la energía lo que hace que te sientas mejor.
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- Hay muchas descripciones de hechizos, limpias y hasta técnicas para invocar demonios en el libro ¿Qué tanto de todo esto es real, que se haya documentado durante su investigación de que se hace así y cuáles están más relacionados con su experiencia propia?
- Las cosas de invocar demonios o revivir gente son ficticias. Pasé mucho tiempo investigando sobre cómo revivir gente, pero me pareció que era muy oscuro entonces decidí ajustarle un poquito. Es completamente ficticio, pero muchas cosas son reales; hay una parte en la que Lena hace un collar de protección y eso es genuino, mucha gente que es practicante así es como lo hace y hay uno que otro hechizo que es cierto. Hay recetas que sí son reales, productos con fresas, vainilla o pétalos de flores para el amor son reales.
- ¿Y ha intentado realizar alguno de estos?
- El collar de protección, por ejemplo, sí lo he hecho. La verdad es que casi todo, mucho de lo que escribí lo saqué de mi experiencia personal, a mí me gusta incorporar magia en mi día a día, entonces muchas cosas las he intentado.
- ¿De dónde viene ese interés?
- Porque hago mucho investigaciones paranormales y me gusta ir a lugares que dicen que están embrujados o en los que hay fantasmas. En una ocasión fui a Salem, buscando una excursión de fantasmas y temas de terror, pero me topé con algo muy interesante que es la gente que practica la brujería en la vida real y había una calle gigantesca en la que había ingredientes para hechizos, varitas, muchas cosas. En ese punto yo sabía que estas cosas existían, pero igual que todos creo que asociaba la brujería con puras maldiciones o cosas negativas, cuando en realidad la magia o la brujería es neutral, puedes agarrar cristales y darles una intención para que te ayuden o te protejan, no necesariamente para hacerles mal a otros. Me llamó mucho la atención que esto existiera y verlo de una manera tan real, así que tomé un tour con un practicante que se llamada ‘El camino de la bruja’ y ahí te enseñaba cómo ha evolucionado, cómo en un tiempo se escondieron y guardaron los grimorios y ahora hay como un nuevo despertar, esto se ha popularizado mucho, especialmente en la pandemia.
- ¿Qué nuevas aventuras vienen para Lena, su aquelarre y Caleb? ¿Cuántos libros proyecta que puede llegar a tener este universo?
- Vienen muchas cosas. La verdad es que el libro termina totalmente abierto e inconcluso entonces todavía queda mucho por hacer y caminar. No sé cuántos libros queden, originalmente firmé por dos, tal vez tres, pero todavía no lo sé. Todo depende del segundo libro que va a salir después, veré qué tanto de la historia logro abarcar en ese y qué tanto queda pendiente.
- El libro está catalogado dentro de la literatura juvenil, mientras lo escribía pensaba en un rango de edad en específico, un lector modelo al que dirigirse o está abierto a todo tipo de público
- A mí gusta pensar que es para todo tipo de público, claro que depende de cada quién cómo puede digerir temas relacionados con brujas o de entes y fantasmas. Cuando yo lo estaba escribiendo no tenía un público específico en mente, para mi anterior publicación, “El chico de la piel de cerdo”, ahí sí traté de mantenerlo un poco más suave porque las versiones originales se las leí a mi mamá y me regañó, me dijo que estaban muy fuertes y muy tristes, entonces ahí estuve más consciente de eso, pero en este sí escribí lo que quise, pero siento que igual está tranquilo.
- Empezó creando contenido sobre libros y ahora los escribe ¿Cuál fue ese detonante que la llevó por ese camino?
- La verdad es que siempre he escrito, no sé me ocurre un momento en mi vida en el que no haya escrito. Desde muy chiquita escribía historias para mi hermana, para que ella las leyera y en alguna ocasión empecé a escribir fan fiction, no con mi nombre, pero alcancé notoriedad en ese mundo. Siempre he escrito pero nunca pensé que fuera a publicar algo, en un momento terminé destruyendo todas mis cosas y pensaba que nadie iba a querer leer algo que yo escribiera, pero estas historias han querido salir a la fuerza.
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