La colombiana Camila Zuluaga (mamá, presentadora de noticias e influenciadora colombiana), en el marco de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, FILBo estará presentando y firmando su primer libro “Aprender a amar(me)”, el cual nació luego de un difícil momento de salud mental que llevó a la joven a internarse en un centro psiquiátrico.
A lo largo de casi 10 años, se ha dado a conocer en redes sociales como Cami Zuluaga y su proyecto Metro y un medio -nombre de su canal en YouTube, redes sociales y marca de ropa-, difunde contenido sobre belleza y moda; paralelamente se desempeñó exitosamente como presentadora en el canal de deportes Espn y como locutora en la cadena radial Los 40 Principales. Sin embargo, en 2020 desapareció por unos meses de sus redes sociales tras pasar por un episodio depresivo.
Tras internarse en un centro psiquiátrico, Zuluaga descubrió que desde pequeña sufría de codependencia, un trastorno que la había llevado a tener relaciones tóxicas. Logró superar esa difícil situación y aprender a manejar herramientas que le permitieron fortalecer su salud mental, antes de regresar a las redes sociales y a la vista de sus miles de seguidores para compartir con ellos lo que había aprendido, lo cual plasmó en su primer libro, “Aprender a amar(me)”, el cual ya va por cuarta edición.
En este texto, con el apoyo de profesionales en salud mental, brinda algunos consejos que cualquiera puede poner en práctica para mejorar la relación más importante de todas, la que tienen con ellos mismos. Ahora, la influenciadora Camila Zuluaga promueve la importancia de asistir a terapia a partir de exponer su propia historia.
En diálogo con Infobae Leamos, reveló qué fue lo más difícil de plasmar su historia en una publicación que ha llegado a diferentes países, el impacto que su libro ha causado en su círculo más cercano, su rol como madre primeriza y su participación por estos días en la Feria Internacional del Libro de Bogotá.
— ¿Cuál fue ese episodio de su vida que detonó en la publicación de “Aprender a amar(me)”?
— Antes de la pandemia yo pasé por un proceso de depresión muy fuerte y estuve internada. Era algo que yo iba a compartir con mis seguidores en redes sociales, pero no de manera tan pública y detallada. Pero en pandemia, durante la cuarentena, creé un reto en mi Instagram para distraer a la gente de ese momento que nos estaba afectando mentalmente a todos. El reto se llamó ‘31 días para amarme’ y me di cuenta de que muchas personas lo estaban necesitando, eso me llevó a darme cuenta de que sería bueno contar mi experiencia y compartir de manera física esos aprendizajes. Empecé a buscar editoriales para proponer lo que quería y afortunadamente llegué a Penguin Random House.
— ¿Qué aprendizajes que le dejó la terapia y en qué consistía ese reto que surgió a raíz de la misma?
— Todo eso fue un proceso muy difícil. Estuve internada en total como dos meses; dos meses en los que no tuve contacto con nadie, no tenía celular ni visitas familiares y tuve que trabajar durante ese tiempo de una manera muy intensa en mi personalidad y en todo lo que causaba mi depresión y codependencia. De ahí salieron un montón de ideas y herramientas para el reto. Tengo que aclarar que antes de lanzar el reto en mis redes hablé con mi psicóloga, porque yo decía: ‘no quiero estar promoviendo algo equivocado, algo malo’, y ella me ayudó a reformular los retos. Pero sí, todos son aprendizajes de mi proceso de sanación.
Le puede interesar: Influenciadores en la FILBo: los autores que atraen a las nuevas generaciones
— Exponer parte de su vida en redes sociales es algo a lo que ha estado acostumbrada a haer por casi 10 años, pero esto es algo mucho más personal y delicado. Además, convertirlo en un libro asegura que no sólo le va a llegar a sus seguidores ¿Cómo ha sido exponer esa parte más sensible y delicada?
— Al contrario, a mí no me importaba que desconocidos leyeran mi historia, a mí lo que me preocupaba era la reacción de mi familia, mis amigos, mis personas más cercanas. Yo estaba petrificada, porque estas son cosas que no saben tus tías, cosas que no sabían mis papás y yo las cuento ahí. Eso para mí fue lo más difícil, porque son las personas que supuestamente más me conocen y están conmigo todos los días.
Yo este libro lo escribí precisamente para los que no me conocen y necesitan ayuda, no es el típico libro de youtubers sobre mi biografía y mi vida con foco en mi público, es para quien no tiene idea de quién soy yo. De hecho, cuando estábamos preparando la publicación del libro les dije que yo no quería aparecer en la portada porque no quería que la gente lo comprara por verme ahí, sino porque les llamara la atención lo que decía. Mucha gente me ha escrito diciendo que me conocieron gracias al libro.
— Alcanzó a mencionarlo, pero sí es importante abordar el tema de los libros de los influenciadores. Hay muchas personas que dudan de la calidad de libros hechos por personas de su medio ¿Qué es eso que aleja su libro de esas críticas?
— Primero, el equipo que me ayudó es espectacular. Mi editora siempre estuvo muy atenta a que yo no escribiera alguna locura o que estuviera mal redactado, entonces, en ese sentido es un libro muy limpio, muy bien escrito, nada de palabras muy coloquiales o tonterías. Segundo, claro que hablo de mí, pero no como Camila la influencer, sino de mi vida desde bebé, mis experiencias y vivencias, y eso no es en todo el libro; a lo largo del libro yo doy herramientas y para que las personas se sientan identificadas les doy el ejemplo de lo que yo viví.
— Algunos aseguran que los creadores de contenido están más expuestos a padecer de algún problema de salud mental precisamente por su trabajo ¿Es el caso de su diagnóstico con depresión y codependencia?
— No, para nada, esto es algo que yo he tenido desde hace muchos años; es un rasgo de mi personalidad que tengo, creo, desde que nací. Por supuesto, una de las razones por las que entré en una depresión tan fuerte estuvo relacionada con las redes, una experiencia que cuento en mi libro y es cuando de un día a otro me dejaron de seguir 200.000 personas y yo me sentí el ser más horrible del mundo.
Le puede interesar: Chimamanda Ngozi llegó a la FilBo y envió mensaje a las mujeres: “No se disculpen por tener una opinión”
— Después de este episodio se ha encargado de invitar a las personas a acudir a terapia ¿Por qué cree que es tan importante acudir a profesionales que nos ayuden a identificar esos rasgos desde la niñez?
— En el libro yo recalcó una y mil veces que yo no soy psicóloga, no soy especialista; les digo a los lectores que necesitan buscar ayuda psicológica, que no tienen por qué vivir esos momentos solos, que alcen la mano para pedir ayuda. Yo siento que cuando escribí el libro y cuando viví todo ese proceso en Colombia la salud mental todavía era un tabú, recuerdo que en ese momento mi mánager me decía ‘no podemos contar que tú estás acá porque se nos van a caer las campañas, las marcas no van a querer relacionarse contigo’.
La pandemia desencadenó que las personas se abrieran más a hablar más de depresión, tristeza profunda y darse cuenta que lo puede padecer cualquiera. Ahora me alegra aportar un poco a disminuir el estigma de las enfermedades mentales, que se hable abiertamente del tema, yo la verdad creo que exageré contando tantas cosas en mi libro, pero los testimonios que recibo de quienes leen mi libro e identifican sus problemas o mejoran su salud mental lo valen todo.
— Después de tres años de ese proceso ¿Cómo sigue lidiando con su salud mental y qué tanto le han ayudado esos testimonios que recibe?
— Me han servido muchísimo, hoy recuerdo todo lo que me dolió y la incomodidad que me causaba escribir todo ese proceso, pero sé que valió la pena. Hubo momentos en que me sentaba a escribir y me daban ataques de pánico y renunciaba a eso, decía: ‘Yo no voy a publicar esto’ y me salía de mi cuarto. Hubo momentos en los que yo le dije a mi editora que no era capaz y me daban otra semana para descansar. Pero cuando leo lo que mi historia está logrando en otras personas sé que si sacrifiqué mi historia por salvar una vida es suficiente.
— ¿Cómo fue la reacción que más temía, la de su familia y personas cercanas?
— Fue muy fuerte. En el libro yo hablo de una manera muy explícita de mi papá y, antes de publicarlo, mi editora me dijo que teníamos que mandarle el borrador para que él lo leyera y lo aprobara, porque estaba dando detalles de su vida. Cuando él lo leyó quedó muy impactado de todo lo que yo conté, pero me dijo que estaba bien, porque él también estaba orgulloso de todo lo que había superado en su vida. En general, ha sido incómodo, hemos tenido que ir a terapia juntos para superar todas esas cosas que yo menciono. Mi mamá casi no lo puede terminar de leer, mi esposo no lo leyó, él se quedó con las primeras páginas y me dijo que era muy fuerte, porque él lo vivió todo conmigo; yo los entiendo, porque no solo me expuse a mí, sino también a ellos.
Le puede interesar: “Se crean muchos debates cuando se habla de Dios y la homosexualidad”: el actor y youtuber Javier Ramírez habló con Infobae sobre su nuevo libro
— ¿Cómo ha cambiado la manera en la que ahora construye relaciones? y, especialmente, ahora que es madre ¿cómo aplica lo aprendido en la crianza de su hijo
— Esto es hermoso, yo le agradezco a Dios, porque yo sabía que tenía que sanar antes de ser mamá. Luego de que mi bebé nació, como a los tres meses, me di cuenta de que estaba desarrollando una dependencia con mi bebé; eso me llevó a activar las alarmas y actuar, porque yo quiero que mi hijo sea independiente, que su apego conmigo sea seguro. Lo que hice fue coger mi libro y me lo leí, porque es una herramienta para eso.
— “Aprender a amar(me)” ya va por su cuarta edición; finalmente tendrá el espacio que no tuvo en las anteriores ediciones para presentarlo en la FILBo
— Siento que el éxito de mi libro es que pensé que nadie lo iba a leer, entonces conté todo y no me cerré; tal vez, si hubiera sabido que tantas personas lo iban a leer me hubiera limitado más. No sólo va por su cuarta edición, sino que en mayo sale la edición para Estados Unidos, es algo que no puedo creer, porque mi libro va a llegar a plataformas como Amazon. Nunca imaginé que iba a vivir esto y ha pasado mucho tiempo.
Con respecto a la FILBo yo ya pensaba que había perdido esa oportunidad, primero por la pandemia y el año pasado cuando era la feria yo no llevaba 40 días de haber dado a luz a mi hijo y no entraba en mi cabeza presentarme allá. Qué felicidad que este año me den la oportunidad, es un lunes festivo y estoy muy emocionada de poder conocer a mis seguidores.
FILBo 2023
Presentación del libro “Aprender a amar(me)” de Camila Zuluaga.
Día: lunes 1 de mayo
Hora: 3:00 p. m.
Lugar: Gran Salón Raíces E
Firma de libros “Aprender a amar(me)” de Camila Zuluaga.
Día: lunes 1 de mayo
Hora: 4:00 p. m.
Lugar: Zona de firmas Ecopetrol 2
Seguir leyendo: