Agotó las entradas para su charla en la Feria del Libro en cinco minutos y asegura: “No me tengo que dejar llevar por lo que quieren los lectores”

La escritora venezolana Ariana Godoy, furor en la plataforma digital Wattpad que sirve de terreno de iniciación para muchos escritores jóvenes, pisó por primera vez el suelo argentino para asistir a la 47.ª Feria Internacional del Libro de Buenos Aires. Autora de A través de mi ventana, Sigue mi voz y La revelación, habló en exclusiva con Infobae Leamos sobre el fenómeno que su obra y ella misma despiertan entre el público lector juvenil.

Para mensurar esa masividad, alcanza con decir que Godoy, que visitará la Feria este sábado, agotó en tan solo cinco minutos los cupos que había disponibles para su firma de ejemplares y presentación de libros. Será, sin duda, una de las actividades más convocantes del primer fin de semana de la Feria en La Rural, que año a año es convocante por sí solo.

Además de hablar sobre su impacto en los lectores, Godoy conversó con este medio también sobre salud mental, las redes sociales, y su rol como docente de literatura en un país anglosajón.

Desde que se unió a Wattpad, hace doce años atrás, la escritora Ariana Godoy ha acumulado más de un millón de seguidores y lecturas. Ella nació en Venezuela y continúa escribiendo desde Carolina del Norte, Estados Unidos, donde vive junto a su marido y sus perros.

Ha publicado de forma online más de 20 historias y muchas de ellas ya recorren el mundo en formato físico y con ediciones revisadas y modificadas. Vino a la Argentina a hablar de sus libros, pero también a presentar el primer libro de su serie Almas Perdidas, La revelación.

-¿Cómo nació Ariana Godoy, la escritora?

-Empecé a escribir a los 11 años, tenía un diario que honestamente estaba bastante aburrido. Una tarde, cuando iba al colegio, nosotros lo llamamos el liceo en Venezuela, vi unos arbustos que se movían y me empecé a imaginar que había monstruos detrás de esos arbustos y eso lo empecé a incluir en mi diario, diciendo que era algo que tenía que investigar. En ese momento mi primera historia surgió así.

-¿Y cómo siguió?

-Luego, en mi adolescencia, estuvo el boom de los vampiros, como por ejemplo la saga Crepúsculo de Stephanie Meyer. Ahí empecé a escribir historias de vampiros y de romance. Pero al principió empecé con esa Ariana pequeñita, a la cual no le pasaba nada interesante y decidí ir agregándole cosas a mi vida para ver qué podía pasar. Comencé queriendo escribir aquello que tal vez no podía encontrar para leer, por lo que empecé a escribir para mí, cuadernos gigantes que una vez terminaba de escribir decía: “Ay sí, ahora ya puedo sentarme a leerlo”. Lo disfruté muchísimo porque escribía lo que yo quería leer.

-Una vez que emigraste a Estados Unidos, ¿cómo alternabas tu rol de escritora y tu rol de maestra? ¿Cómo trabajabas en el aula la literatura clásica y la literatura juvenil?

-Al principio mi faceta como escritora era mi parte oscura, no lo sabían. Pero con el tiempo, cuando fue creciendo el éxito, ya no había forma de ocultarlo porque nunca usé un pseudónimo. Como docente siempre hacía cosas divertidas relacionadas a la escritura. Muchos niños al comenzar el curso escolar escribían solo dos líneas, y para cuando el curso acababa ya te escribían una historia de tres hojas. En estos procesos de escritura creativa mezclábamos literatura clásica y nos íbamos un poquito también a lo juvenil. Intentaba hacer un balance, pero lo que más les interesaba a los niños eran las historias juveniles. Además alternamos entre actividades divertidas y obligatorias.

-¿Cómo elegías qué lecturas dar?

-Con el plan de lectura me dieron cierta libertad, yo conocía al director del colegio y él sabía que yo ya era escritora por lo que él quería que les inculcara la curiosidad por la escritura a los chicos. Por lo que me dejó que yo armara el programa, siempre y cuando los niños tuvieran ciertos conocimientos requeridos. De hecho, muchos de mis niños pasaron el State Test, que es un examen muy importante en Estados Unidos.

-Sos la primera escritora en español de Wattpad en tener una adaptación a película. ¿Cómo fue el camino desde tu primera novela publicada en la plataforma de escritura online hasta que te enteraste de que Netflix España estaba interesado en adaptar tu novela A través de mi ventana?

-Fueron doce años de trabajo. Mucha gente mira el ahora, el que ahora soy exitosa, pero no ven esos 12 años que tengo detrás del trabajo duro, de desvelos. Tenía dos o tres trabajos en simultáneo, tenía pocos ratitos de escritura. Estaba cansada, pero tenía que tener ratos de escritura por más que no tenía casi tiempo. Las recompensas, lo que estoy viviendo ahorita, todo lo que significaron esos doce años trabajando duro, tienen significado ahora. El emigrar, adaptarme a un nuevo idioma, todo fue bastante difícil. Pero es bonito ver el resultado. Por eso creo que también tengo un lazo fuerte con mis lectoras, porque ellas están desde el principio. Muchas están desde que subí ese primer capítulo a Wattpad de A través de mi ventana, hasta que la adaptación llegó a Netflix. Por lo que ese salto fue bastante largo y hasta me emociona de verdad.

-¿Hubo algún momento en el que quisiste dejar todo?

-Puff, muchísimas veces. Me preguntaba a mí misma qué estaba haciendo. De hecho ahora, que ya no trabajo como docente y estoy dedicada solo a escribir, me cuestiono cómo pude lograrlo antes, teniendo tantos trabajos en simultáneo. No solo hay que escribir: hay que editar, entregar, que te devuelvan las correcciones, no entiendo cómo la Arianita de hace 12 o 10 años atrás podía con todo eso. La Arianita del pasado no se va a dar el crédito, pero yo ahora sí. En momentos de crisis me ayudaron mucho mis lectoras, si twitteaba algo al respecto ellas me escribían enseguida, hablaban conmigo, me pasaban videos. Era como tener un grupo de terapia. Desde el principio hubo confianza con mis lectoras, nunca existió esa distancia entre escritor y lector, tenemos incluso bromas internas.

-¿Qué tan difícil o qué tan divertido es tener feedback de tus lectores en Wattpad y a veces replantearte cambiar el rumbo de una historia por ello?

-Eso es lo más difícil. Evitar que te influyan en la historia y te cambien la trama. Porque al fin y al cabo tú eres la escritora y tú solo sabes el rumbo que va a tomar. A veces tengo que dar un paso atrás, literalmente dar un paso atrás, y decirme que no, que no me tengo que dejar llevar por los comentarios de lo que quieren los lectores. Por otro lado, el feedback instantáneo es también una herramienta muy buena, ya que no es algo que pase en la industria normal.

-¿Y cuáles son las diferencias?

-En esa normalidad tu escribes la historia, la entregas, y bueno, a la de Dios. Tienes que esperar mucho tiempo para leer las reseñas y saber si les gustó o no la historia. Por eso me gusta Wattpad, porque publico capítulo por capítulo, veo qué les gustó, qué no, qué párrafo es el más comentado, y ahí decido que ese párrafo se quede en la versión final que estará en el libro en papel, creo que esas cosas ayudan bastante al escritor. Incluso a veces me ayudan con los huecos en la trama, si me olvido que algún detalle de un personaje me dicen “oye, ¿no es que este personaje era alérgico a las fresas?”, y justo yo había escrito que estaba comiendo fresas. Me ayudan bastante, es muy lindo, porque en Wattpad tienen una manera muy constructiva de decir las cosas, no pasa lo mismo en otras redes sociales que son más tóxicas.

-En las redes sociales hay mucho hate, bullying, pero también se está hablando cada vez más de salud mental. Tu libro Sigue mi voz toca de forma muy profunda este tema. Por lo que me gustaría que nos contaras un poco tu perspectiva sobre el cuidado de la salud mental dentro del ámbito de internet, redes sociales y Wattpad, relacionado a la literatura juvenil.

-Es un tema muy fuerte. Está muy bien que ahora cada vez más se hable de salud mental porque creo que siempre estuvo ahí, pero no se hablaba. Esta es la generación que lo está visibilizando porque escuchamos a las generaciones más viejitas que dicen que ahora todos tenemos algo, pero creo que lo cierto es que nosotros estamos sanando muchas cosas, muchos traumas con los que ellos no lidiaron, hacían de cuenta que no pasaban, miraban para otro lado. Por lo que esta generación nueva está más enfocada en sanar y les está enseñando a los chicos cómo identificar más cosas.

-¿Qué pasa al respecto con tus alumnos?

-Con mis alumnos me ha pasado de decirles que escriban cosas personales, si querían, y que se queden tranquilos, que no lo iba a leer nadie más, incluso podíamos quemarlo, pero me decían que querían que yo lo leyera, porque necesitaban que alguien lo supiera pero sin darles un sermón al respecto. Y me daban algunos escritos con los que no he podido parar de llorar. Me parece bien que los jóvenes sepan que quieren expresarse, que está bien decir lo que sienten.

-¿Qué rol juegan las redes sociales en el mundo de los más jóvenes?

-A mis alumnos los he hecho ver mis redes sociales para que entiendan que uno puede tener redes sociales estéticas pero que detrás hay una persona con inseguridades, yo tengo inseguridades, millones de seguidores no te dan seguridad. Yo a veces llego a casa y lloro porque tuve un mal día, no importa todos los seguidores que tengas, uno sigue siendo humano. Hay personas que están muy expuestas en las redes sociales y reciben mucho hate, no todo es color de rosa, por eso recomiendo muchas veces que se tomen un descanso de las redes. No ingresar en ellas por tres días o una semana, sé que es difícil, a mí me pasa, pero a la larga es lo más sano. Yo a veces debo recordarme a mí misma que los comentarios negativos no se deben a mí, se deben a la persona que los escribió; eso me enseñó mi terapeuta.

-¿Cómo se relacionan el trabajo terapéutico y la literatura?

-Muchos lectores, más que nada en las firmas de libros, me han dicho que Sigue mi voz les ha salvado la vida, que habían descubierto que sufrían ansiedad. Y la verdad es que no pensaba que tantas personas iban a resonar a partir de ese libro. Porque a nivel personal yo hace muchos años me enfermé y pensé que era algo físico, pero había ido al doctor y no me encontraban nada, por lo que me recomendó ir al psiquiatra, y fue allí donde descubrí que uno puede estar enfermo mentalmente y eso repercutir en lo físico. Es muy fuerte para mí conocer las historias de mis seguidores y saber que mi libro los ha ayudado.

-Contanos un poco sobre tu decisión de no quitar tus historias de Wattpad. La mayoría de tus novelas están en formato papel ya, pero al mismo tiempo siguen online, ¿fue una decisión fácil o difícil una vez que el éxito fue aumentando?

-Al principio tenía ese miedo de que al estar mis historias gratis en la plataforma nadie iba a comprar el libro físico. Pero hace tiempo atrás les dije a mis lectores que yo sé lo que es no tener dinero para comprar libros, porque sé cómo son los precios, sé lo que es vivir en Latinoamérica, cuando uno no tiene, no tiene. Y también sé lo que es buscar historias gratis online, porque yo también lo he hecho. Muchas de mis lectoras son jóvenes y tal vez no tienen dinero, a eso hay que sumarle las crisis económicas, entiendo la pobreza que hay. A veces uno tiene que ahorrar tres meses para poder comprarse un libro, por esta razón les he dicho a mis lectoras que haré el esfuerzo de que siempre estén gratis en Wattpad y si me va bien, bien, y si no bueno. Creo que gracias a esta acción el universo me recompensó.

-Hay un consenso general de que los chicos no leen, consenso que con el tiempo se ha ido quebrando a raíz de sucesos literarios juveniles extraordinarios. Vos sos uno de ellos, por lo que me gustaría saber qué crees sobre el crecimiento o declive de la lectura entre los niños, adolescentes y jóvenes adultos, y para vos, ¿qué es lo que falta para que los jóvenes lean cada vez más?

-Wattpad es una herramienta muy buena para hacer que los chicos lean ya que es una plataforma gratuita y se puede utilizar desde el teléfono, algo bueno ya que los chicos viven pegados al teléfono, y porque al mismo tiempo les da esa gratificación instantánea, que todo es rápido, que todo es ya. Creo que Wattpad tendría que tener un poco más de reconocimiento, de promoción en el ámbito escolar pero que sea algo monitoreado.

-¿Y eso cómo se haría?

-Que los docentes les digan a los chicos qué historias en específico van a leer, cómo encontrarlas, que el maestro ya las haya leído, que hagan un informe y que luego hagan devoluciones. Mi experiencia como maestra es que los chicos necesitan cosas interactivas. También creo que los eventos enfocados en el público juvenil, en librerías, rodeados de libros, sirven mucho. Que se armen comunidades online, pero que tengan encuentros, que hablen otros libros.

-¿Para qué?

-El poder del boca en boca es lo que mueve a las historias juveniles, sobre todo las de Wattpad. Muchos de mis lectores me lo han contado. Eso es algo que deberíamos potenciar a la hora de promover la lectura, darles espacio de encuentros, que hablen entre ellos y se recomienden. Son una gran comunidad, se alimentan entre ellos, hay mucha sororidad. Me ha pasado de ver en mis firmas de libros como los chicos se comparten entre ellos agua, comida, y tal vez se conocieron allí, haciendo la fila. Incluso he visto cómo una chica ha venido y no tenía el libro físico, me leía online, y un chico con libros de más le regaló uno para que se lo llevara firmado. Hay mucha comunidad y hay que promoverla.

Seguir leyendo: