Después de una larga espera como finalista del Premio Internacional Ribera del Duero 2022 (España), la escritora argentina Marina Closs por fin ha publicado “Pombero” (Paginas de espuma). Se trata de un libro de cuentos atravesados por la idea de la identidad. “Nadie tiene una identidad sin una historia, nadie tiene una historia sin una voz”; es por eso que la autora presenta en estas líneas una polifonía de personajes que deambulan por un mundo frágil, móvil e insólito.
A lo largo de los relatos, Closs atraviesa las historias con un nudo asfixiante, a veces como elemento de hastió, y otras como punto circunstancial o de apoyo. Los personajes de esta colección de cuentos parecen recomponerse y recuperase a sí mismos a medida que hablan. Pero, “Pombero” transita hacia los confines de la ficción como sostén de la identidad propia y ajena.
“En este libro, es cierto que suele aparecer anclado en vidas “realistas”, pero en el fondo, el realismo es solo una forma de hacer ficción. Yo quería enredar un poco esas distintas formas, superponerlas a la ficción de la identidad, que era el hilo principal del libro”, dijo Marina Closs en un comunicado.
La escritora sitúa a los personajes en medio de ficciones aniquiladoras, pero necesarias; dibuja mundos ajenos que guardan en esencia reminiscencias con lo real. Los personajes son sometidos y sentenciados en mundos de ficción donde alguien se hunde o emerge. De acuerdo con Closs los cuentos son resultado de temas que la atraviesan a partir de sus propias experiencias, como preguntas, dudas y hasta misterios.
La escritora argentina también ha compartido que en este título no existe una sensación muy optimista de la escritura, que, es más, el lector después de leer los cuentos se puede enfrentar a entender a las maternidades de una forma peor. Closs no descarta a Pombero como un trampolín para seguir explorando ficciones y así poder iluminar el mecanismo del cual se inventa el todo.
“Creo que mis personajes siempre tienen un aura infantil, sí, porque apenas entienden lo que está pasando, quieren entender, quieren incluso participar, pero se transforman sin querer en observadores distantes. Los transforma ese mismo mundo adulto que nunca se explica. Su manera de retorcerse ante ese mundo es mirar fijamente, como Marioka”, dijo Marina Closs.
Marina Closs compartió el tramo final del Premio Internacional Ribera del Duero 2022 con: la mexicana Laura Baeza (Una grieta en la noche); la boliviana Liliana Colanazi (Ustedes brillan en lo oscuro); la chilena María José Navía (Todo lo que aprendimos de las películas); y con el cubano Pedro Juan Gutiérrez (Un meteorito flamígero). Siendo Colanazi la gran ganadora de 2022.
El fallo fue dictaminado por el jurado compuesto entre los escritores Rosa Montero, Marta Sanz y Cristian Crusat. A esta séptima edición del premio se presentaron cerca de mil obras procedentes de 37 países; Closs llegó al certamen ya con una carrera armada desde su debut en 2013 con su primer libro de cuentos, La doncella Aguja, al cual le siguieron otros títulos como El pequeño sudario (2014) y El violín a Vapor (2016).
Después la escritora originaria de Aristóbulo del Valle (Argentina, 1990) en 2018 fue distinguida por el Fondo Nacional de las Artes por el cuento Tres Truenos, en ese mismo año ya había recibido el premio Angélica Gorodischer por la novela Álvar Núñez: trabajos de sed y de hambre. En 2021 publicó Monchi Mesa y Tascá Skromeda, al tiempo Tres Truenos llegaba a México y España, en el país vasco el cuento figuró entre los finalistas del premio Finestres.
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