“Las horas oscuras”, el regreso de Michael Connelly, es considerada una de las mejores novelas negras del 2022

El detective Harry Bosch es el personaje principal de una serie producida por Amazon de la cual se han realizado hasta ahora siete temporadas. El veterano detective de homicidios del departamento de Policía de Los Ángeles fue creado en 1992 por Michael Connelly y es el protagonista, además de la serie de Amazon, donde es interpretado por Titus B. Welliver, de 21 novelas policiacas, y participa en otras tres, incluyendo “Las horas más oscuras”, la más reciente obra de Connelly considerada ya una de las mejores piezas del género negro en el 20222.

El autor, sinónimo de superventas, regresa trayendo consigo su ya famosa pareja de detectives: Harry Bosch, uno de sus personajes más célebres, y su compañera Renée Ballard, La dupla de investigadores vuelve a unir sus mentes y habilidades para resolver un caso doble, el de un asesinato, que podría estar relacionado con un caso anterior que Bosch no pudo resolver, y una serie de violaciones, presuntamente cometidas por los denominados Hombres de medianoche.

La novela “Las horas oscuras” toma lugar en Hollywood durante la noche vieja de 2020, cuando Renée Ballard, detective del departamento de policía en Los Ángeles, recibe, después de medianoche, una llamada anunciando la muerte por arma de fuego del propietario de un taller de autos en medio de una fiesta callejera. Ballard concluye que este hecho está relacionado con otro asesinato sin resolver, investigado por el detective Harry Bosch.

Al mismo tiempo, Ballard persigue a una perversa pareja de violadores en serie conocidos como Los hombres de medianoche. En un momento, la detective siente que va a contracorriente en su departamento de Policía, todo a raíz de los cambios provocados por la pandemia y el malestar social, pero decide buscar a Harry Bosch, para que le ayude con la resolución de estos dos casos, que los mantendrá alerta y en constante tensión.

Esta es la cuarta entrega de una serie protagonizada por la detective Renée Ballard, una historia que reserva un lugar importante a uno de los personajes estelares de Michael Connelly. En “Las horas oscuras” el paso de la pandemia y las protestas lo han cambiado todo, el departamento de Policía pasó de ser proactivo a reactivo y el cambio dejó a la detective a la deriva, ante esto ya se había planteado dejar su trabajo, pero sus intenciones se borran ante el espeluznante modus operandi de los Hombres de medianoche, un caso que la llevará a trabajar junto a Bosch, un impulso y aventura que los dos necesitaban.

Originario de Philadelphia, Michael Connelly es uno de los escritores estadounidenses con más éxito en el mundo, autor de 35 novelas, muchas de ellas han ocupado el puesto número uno de la lista de Best Sellers del New York Times. Entre sus libros están los que conforman la serie de Harry Bosch, la de Renée Ballard y la del abogado del Lincoln. Ha vendido alrededor de ochenta millones de ejemplares; sus escritos han sido traducidos a decenas de idiomas y publicados en 45 países. También es productor ejecutivo de la serie Bosch, protagonizada por Titus Welliver.

Connelly encontró su vocación cuando leyó por primera vez a Raymond Chandler durante su paso por la Universidad de Florida, donde estudió periodismo y escritura creativa. Al comienzo de su carrera en medios comenzó a cubrir sucesos para diarios locales y con los años de experiencia tuvo la oportunidad de ser Crime reporter (Reportero de crimen) en Los Ángeles Times.

Con su experiencia como periodista de crímenes, mientras escrutaba cada rincón de la gran ciudad, subiendo y bajando las escaleras de la gran comisaria de Van Nuys, escuchando intrigas y destripando entresijos judiciales. Lo curtieron en experiencia para escribir sobre el mundo de los detectives, tramas cruzadas y obtener un amplio conocimiento del terreno, donde imaginariamente plantó a Harry Bosch, hijo de una prostituta brutalmente asesinada, tras una infancia en orfanatos y familias de acogida, sin conocer a su padre, a los 17 años participó en la guerra de Vietnam con la misión de introducirse en túneles estrechos y profundos en busca de enemigos, lo que le dejó una secuela claustrofóbica de por vida.

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