Su nombre de pila es Daniel Pennacchioni, pero el mundo lo ha conocido simplemente como Daniel Pennac. No podría decirse que la forma en que ha decidido firmar sus libros es un seudónimo. De hecho, si lo vemos bien, se trata de su propio nombre, pero reducido, como reducida ha sido su recepción por parte de los lectores en algunos de los países de habla hispana en donde su obra se ha publicado. A Pennac lo leen los estudiantes de literatura, pero qué hay de los demás.
Hoy, habiendo alcanzado los 77 años, no puede negarse que es uno de los escritores más particulares e interesantes de la literatura contemporánea en Europa. Aunque nació originalmente en Marruecos, es más francés que la baguette, y desde inicios de la década de los ochenta se inició como autor en el terreno de la literatura infantil, en donde exploró hasta conseguir relativa popularidad y se pasó a la orilla del ensayo, momento en el que gesta uno de sus títulos más conocidos: Como una novela.
Con el tiempo, se ha convertido en uno de los grandes promotores de lectura que hay en Europa y uno de los críticos más agudos del sistema educativo francés en los últimos años. Su libro Mal de escuela, es uno de los ensayos más lucidos y ácidos sobre las fallas de la educación en el país galo, además es su obra más autobiográfica. Le permitió conseguir en 2007 el Premio Renaudot. Pennac ha escrito alrededor de una veintena de títulos de los cuales un buen número han sido traducidos a diferentes lenguas, entre ellas el español.
Aquí están, tres de nuestras más recomendadas:
MAL DE ESCUELA
Este ensayo aborda la cuestión de la escuela y la educación desde un punto de vista insólito, el de los malos alumnos. Pennac, un pésimo estudiante en su época, estudia esta figura del folclore popular otorgándole la nobleza que se merece y restituyéndole la carga de angustia y dolor que inevitablemente lo acompaña.
Desde su propia experiencia como “zoquete” y como profesor, el autor reflexiona acerca de la pedagogía y las disfunciones de la institución escolar, sobre el sentimiento de exclusión del alumno y el amor a la enseñanza del profesor.
“Ningún tratado sobre los problemas de la docencia, por muchas cifras y autorizadas opiniones que aporte, podría competir con algo así, con algo contado desde las entrañas mismas del conflicto”, Clara Sánchez, Babelia, El País.
Fuente: Penguin Libros.
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EL 6º CONTINENTE
¿Cómo diablos puede convertirse una familia obsesionada con la limpieza en la fuente de polución más horrenda de la historia de la humanidad? Esta es la incógnita que se resuelve al interior de esta obra teatral creada a partir de las innumerables improvisaciones de un grupo de actores bajo las órdenes de la directora francesa Lilo Baur.
Estrenada en el teatro parisino Bouffes du Nord, este drama familiar-planetario es a su vez una ópera bufa que, ante el inevitable desastre ecológico que vaticinan sus páginas, no deja otra salida al espectador (y al lector) que la risa. Precede a esta pieza teatral el monólogo “El paciente de los hospitales de París”, en el que un médico residente de un hospital público de esa ciudad relata una larga y accidentada noche de guardia, una noche en la que encontró la fe, la perdió, la reencontró y la extravió de nuevo.
Con su habitual y aguda ironía, y echando mano del lenguaje escénico, Daniel Pennac nos enfrenta con la realidad de una sociedad posmoderna llena de excesos, inconsciente y egoísta, cuyos integrantes desestabilizan un sistema sanitario precario y un equilibrio medioambiental ya casi inexistente.
Fuente: Buscalibre.
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SEÑORES NIÑOS
Escrita de manera sencilla y con grandes dosis de fantasía, esta desternillante aventura cuenta la historia de tres niños que una mañana se despiertan y se dan cuenta de que se han convertido en adultos.
Durante la clase de francés del profesor Crastaing, tres de sus alumnos, Igor, Nourdine y Joseph, se pasan un dibujo satírico. En él una multitud enfurecida marcha tras una pancarta que reza: «Crastaing, cabrón, irás al paredón!».
El profesor, ofendido, les impone un castigo: para el día siguiente tienen que hacer una redacción sobre el tema: «Despierta usted cierta mañana y comprueba que, por la noche, se ha transformado en adulto. Enloquecido, corre a la habitación de sus padres. Se han transformado en niños. Cuenten la continuación». Así comienza la desternillante aventura de estos excéntricos personajes: los señores niños y los niños señores que deberán enfrentarse a los problemas cotidianos de sus nuevas identidades. ¡Qué difícil es meterse en la piel del otro!
Fuente: Penguin Libros.
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