Ricardo Sumalavia (Lima, 1968) siempre está explorando la literatura. No tiene un plan temático para sus obras; puede escribir microrrelatos, cuentos o una novela como Croac y el nuevo fin del mundo (Seix Barral, 2022).
Infobae conversó con el escritor que, como siempre, rompe las reglas canónicas —y, esta vez, no es la excepción— con esta novela de la literatura weird, algo insólito, raro e inexplicable en la ficción, un término que recientemente acaba de conocer.
—Tú eres más conocido en el oficio del microrrelato, pero otra vez —como en Historia de un Brazo— te animaste a publicar una novela.
—Originalmente la escribí como si fueran microrrelatos pensando en un libro a futuro. En el proceso de escritura me di cuenta que esta rana iba ganando mayor fuerza en la historia. Fue tomando cuerpo la novela; en ese momento me convenía crear un universo alrededor de este anfibio. Además ya he escrito novela fragmentadas en microcapítulos, aunque Croac y el nuevo fin del mundo también se puede leer como un libro de microrrelatos.
—Ya con Historia de un brazo había sucedido, pero no te gusta que tus novelas sean lineales.
—No, siempre me he dado mucha libertad para escribir como en esta novela. Ninguno de mis libros es estrictamente canónico o lineal, no pienso mucho en eso.
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—¿Por qué una rana y no otro anfibio u animal?
Fue uno de los animales que pude ver de una manera más cercana. Había tenido información en libros y revistas, pero hay una anécdota con este anfibio: un día, cuando era niño, fui a visitar a mi tía y a mi abuela que vivían en la selva, comenzó a llover y en una pileta había una rana. Yo jamás había visto una rana, así que, sorprendido, escuché cómo comenzó a croar. Tal vez no tenga una respuesta clara a tu pregunta, pero es un recuerdo que ha permanecido en mí. Luego se fue penetrando con mi vida adulta: he encontrado ranas en la poesía japonesa, en la mitología coreana y en las leyendas y mitos amazónicos.
Cuando le envié la portada a mi hija, que también es ilustradora, me contestó que esa rana era bastante parecida a mí porque tengo una estructura ósea en la que mi caja torácica es más amplia y mis piernas son más delgadas y largas. En el fondo siempre he jugado a qué animal puedo parecerme.
—Esta novela es una gran aproximación a lo que se conoce como la literatura weird, aunque tú eres un estudioso de la literatura coreana.
—El término weird lo he conocido recientemente pese a que ya lo había escuchado con otros nombres. La estructura de Croac y el nuevo fin del mundo, desde la micronovela, se aproxima a este tipo de literatura, tanto en lo raro como en lo extraño, mezcla de todo un poco. No es estrictamente una novela fantástica, tiene humor y sátira.
—Te aventuraste a incluir un cómic en Croac y el nuevo fin del mundo relacionado a una historia bíblica y, en cierta manera, la rana se burla un poco de los académicos de la literatura tradicional.
—Efectivamente es una rana, la cual se burla mucho de la solemnidad de la literatura peruana. No estoy negando que tenemos muy buena narrativa, pero es muy formal y encuadrada. Mucha gente cree que yo soy muy formal, también, porque soy un profesor universitario y ya te etiquetan como alguien muy solemne, pero quienes tienen más confianza conmigo saben que tengo un humor particular, por eso quería que esta rana tuviera la misma razón de ser.
—Se puede decir que te dio la libertad para escribir.
—Curiosamente, el narrador de la novela es muy solemne; es ese joven que quiere ser escritor y le da su novela a la rana, que lo echa por tierra debido a que no le importa nada. Sí, considero que tuve mucha libertad para contar esas historias con la rana, cada historia tuvo un punto neurálgico. Es decir, de una u otra manera, toco temas serios con desparpajo.
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—En Croac y el nuevo fin del mundo está la abuela, un personaje que me llama la atención en vista de que no sabes si es buena o mala por sus actitudes.
—Es un ser humano como cualquiera de nosotros. Nosotros idealizamos a las abuelas como amables, que aceptan los caprichos de los nietos, entre otras cosas, sin embargo, en este caso no es así. Tiene, oculta, perversidades; es ambigua.
—Con esta novela sigues la línea de Historia de un brazo, ¿te estás apasionando con la literatura weird?
—Prefiero decir que no porque luego rompo mis propias reglas. Ya me ha pasado: escribo microrrelatos, luego estos textos los convierto en cuentos; y al final, terminan en una novela. Así que solo voy a seguir con la literatura que crea más conveniente. No tengo un plan, siempre estoy explorando. La literatura es para romper las etiquetas.
—¿Romper las reglas canónicas de la literatura peruana?
—A mí me gusta mucho la literatura peruana, pero no me identifico con ella y me diferencio. Como repito: quiero seguir explorando. Por supuesto que el lector puede elegir qué quiere leer.
—¿Qué crees que le falta al lector para que busque más allá de la literatura peruana tradicional?
—La literatura peruana es muy amplia y variada. El peso del realismo ha sido impuesto por el canon literario, pero hay otros caminos que están allí, solo es cuestión de verlas. Pienso en El cuerpo de Giulia-no de Jorge Eduardo Eielson, una novela vanguardista o La casa de cartón de Martín Adán, que siempre me acompaña y mantiene ese espíritu de libertad pese a que ya va a cumplir un siglo de haber sido publicada.
Tenemos que atrevernos a aventurarnos porque si nos vamos a quedar con los mismos modelos literarios, vamos a seguir con las mismas estructuras de hace décadas. Yo admiro mucho a Julio Ramón Ribeyro, me parece maravilloso y, aunque sé que esto le puede molestar a mucha gente, ya no se puede escribir como Ribeyro ni hablar de la Lima de esa época cuando han pasado casi 70 años; nuestra mirada tiene que cambiar y nutrirse de otra manera.
Actividades en el Hay Festival
Ricardo Sumalavia participará en cuatro actividades del Hay Festival que se inicia el jueves 3 de noviembre en Arequipa:
Jueves 3 de noviembre a las 20:00 horas: Gabriela Cabezón Cámara y Vanessa Londoño en conversación con Ricardo Sumalavia.
Domingo 6 de noviembre a las 16:00 horas: Carmen McEvoy y Dante Trujillo en conversación con Ricardo Sumalavia.
Miércoles 2 de noviembre a las 16:00 horas: Jeremías Gamboa en conversación con Ricardo Sumalavia.
Miércoles 2 de noviembre a las 18:00 horas: Kathy Serrano y Ricardo Sumalavia en conversación con Giovanni Barletti.
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