El argentino Fernando Olszanski escribe “Grandes lagos vacíos” inspirado en paisajes norteamericanos

El escritor de origen argentino Fernando Olszanski escribió un libro de cuentos motivado por la cantidad de lagos que rodean el área en la que reside desde hace años; es una oda a lo que él llama interminables mares de agua dulce; fue así que nació “Grandes lagos vacíos”. El texto se presenta como una oportunidad para que el escritor construya escenarios de pérdida, soledad y extracción del espíritu humano; se compone de veinte fragmentos con los que el autor busca tocar las fibras más sensibles y reflexivas del lector.

Fernando Olszanski escribe que, al encontrarse con la vastedad de los grandes lagos que se encuentran dispersos por diversos lados de Norteamérica, no cree que haya persona que se conmueva, ya que las grandes extensiones que los componen expresan una magnificencia que producen un estremecimiento único. Sin embargo, este sentimiento podría cambiar de repente, si los lagos se vieran vacíos, secos y sin nada que ofrecer, las sensaciones ya no serían las mismas; este panorama desolador produciría escenarios de vació, incertidumbre y hasta soledad.

A partir de esta premisa sobre la destrucción, Olszanski comienza la exploración de las almas que recorren sus páginas y que, como un lago, de repente se han vaciado y secado, sin explicación alguna, los personajes parecen comenzar a flotar extenuados en lo emocional.

Este volumen está integrado por veinte cuentos en los que el autor explora las preocupaciones, inquietudes, emociones, angustias y la tristeza que caracterizan la condición humana y sus circunstancias externas; el autor somete a los personajes a situaciones externas y extrae la lucha de sus propios demonios, al tiempo que busca resolver los escenarios de la mejor manera posible.

“Yo vivo en un área donde hay lagos, unos que uno no puede ver del otro lado, son lagos que parecen mares de agua dulce. Todos los cuentos tienen un hilo conductor, algo en común que son los lagos, los personajes siempre están frente al agua; Yo siempre digo que el agua es una memoria genética que tenemos los seres humanos, siempre encontramos calma frente al agua, cuando queremos pensar o queremos resolver un problema vamos al agua; ¿pero por qué el agua nos llama?, es por la memoria que tenemos de estar en la placenta de nuestras madres, que es el mejor lugar donde podemos estar, el más sano, salvo y de paz. Ese recuerdo es lo que nos lleva al agua en contacto con los personajes”, dijo Fernando Olszanski en la FILZócalo 2022 (Feria Internacional del Libro del Zócalo) celebrada en el centro del territorio azteca.

En “Grandes lagos vacíos”, los lagos son el hilo unitario para todas las historias, las cuales transitan por diversas coyunturas y diferentes resoluciones favorables o no. El escritor argentino dibuja estos textos como narraciones que van de lo humano a lo analítico. Fernando Olszanski, apuesta en sus más de cien páginas elementos narrativos que delatan su prosa mordaz, profunda y, sobre todo, la forma crítica de su prosa en una visión intensa, que no deja de ser provocadora, es así un texto en que Fernando Olszanski busca dejar huella en los lagos profundos del propio lector.

Fernando Olszanski es originario de Buenos Aires, Argentina. Es autor de la novela “Rezos de marihuana”, el poemario “Parte del polvo” y el libro de cuentos “El orden natural de las cosas”. El escritor fue galardonado en 2011 con el Latino Book Award por la mejor ficción popular, así mismo es autor de una antología en español del medio oeste norteamericano, titulada “Trasfondos”. En 2022 el autor fue reconocido con el primer Premio de cuento de la sociedad de escritores de la Matanza, Argentina. Ha participado en diversas antologías que reflejan la latinidad, la inmigración y la literatura en español dentro de los Estados Unidos, al tiempo que se desempeña como artista visual de certámenes de cine y muestras fotográficas en Estado Unidos, Argentina y Japón.

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