Pasaron 17 años desde que México vivió uno de sus episodios políticos y judiciales más polémicos con el caso de la francesa Florence Cassez y el mexicano Israel Vallarta, ambos acusados de realizar secuestros. El escritor y periodista Jorge Volpi transformó este recordado caso en Una novela criminal, libro que ganó el Premio Alfaguara en 2018 y que ahora llega a la pantalla chica de la mano de Netflix con el recién estrenado documental Cassez-Vallarta: Una novela criminal.
¿Qué fue le atrajo al escritor de esta historia? Según contó en una entrevista con Infobae, Volpi sostuvo que la razón principal fue que se trataba de “una buena historia”: “Hay una historia de amor entre estos dos personajes, una trama policíaca, una trama política, y hay una conspiración detrás de todo. Entonces lo primero era tratar de contar bien esta historia. Y lo segundo que terminó por atraerme es que se convirtió también en un retrato de México de estos últimos 12 o 13 años. En un retrato a través del sistema de Justicia y de una Justicia que no sirve o no funciona”.
En el texto de Una novela criminal, Volpi refrescó el caso retomando las investigaciones originales de los hechos y buscó más voces que ahora también se ven reflejadas en la serie documental, como el ex presidente de México Felipe Calderón y el ex presidente de Francia Nicolas Sarkozy, quienes relatan su postura durante el caso.
En la línea de A sangre fría, de Truman Capote, La canción del verdugo, de Norman Mailer, o Limonov, de Emmanuel Carrere, Volpi retomó el caso Cassez-Vallarta, tal como se conoce a la peripecia de la pareja integrada por un mexicano y una francesa que, el 9 de diciembre de 2007, fue detenida en una casa de las afueras del DF, acusada de liderar la banda Los Zodíaco, en un operativo que culminó, al mismo tiempo, con la liberación de tres personas que presuntamente mantenían secuestradas.
“Es una novela sin ficción, un género extraño, un híbrido entre literatura y periodismo que aborda un asunto criminal que conmocionó a México y a Francia. Es uno de los mayores montajes policiales de la historia de México, con cuestiones muy impactantes, entre ellos el enfrentamiento directo entre los presidentes que terminó con la liberación de ella y le mantiene a él en la cárcel”, apuntó Volpi en 2018 al ganar el Premio Alfaguara y contar cómo había pensado el texto.
La detención de Israel Vallarta y Florence Cassez se produjo en medio de un operativo estruendoso que terminó siendo un montaje: las propias autoridades mexicanas reconocieron que el arresto se había producido el día anterior, pero que el acto fue recreado a posteriori para que los canales de TV pudieran registrarlo.
Esta simulación desató una controversia entre las víctimas de los secuestros supuestamente cometidos por Los Zodíaco -para quienes se trató de una recreación que no alteró el fondo del asunto- y los abogados de los imputados, quienes sostuvieron desde entonces que el proceso estaba sostenido en pruebas falsas y testimonios contradictorios.
Cassez, que actualmente tiene 43 años, fue condenada a 60 años de prisión por secuestro, aunque fue liberada en enero de 2013 después de que la Suprema Corte decretara que no gozó del debido proceso. Su ex novio, en cambio, sigue preso sin que de momento haya sido juzgado.
Recuperada en varias oportunidades a través de documentales y textos de investigación, Volpi eligió un formato híbrido para hacerle justicia a los hechos, desde una perspectiva literaria que se mete en los intersticios de un expediente judicial que acumula más de diez mil páginas. Esa misma concepción se trasladó a la serie documental con la producción de Pablo Cruz y el guión de Alejandro Gerber, quienes le dieron estructura narrativa a los cinco episodios que repasarán el caso.
Volpi, Cruz y Gerber señalan que desde un punto de vista neutral se apegaron a los testimonios de los involucrados para ofrecer un panorama amplio sobre el caso Cassez-Vallarta, y aunque en su momento el principal señalado, Israel Vallarta, dio entrevistas para el documental, fue imposible lograr un nuevo encuentro con el acusado: “La serie cuenta la historia de la imposibilidad de llegar a Israel Vallarta, de cómo el propio sistema judicial no permite que el principal acusado en esta historia, que no ha sido juzgado, que no tiene sentencia y sobre quien sabemos se hicieron cualquier cantidad de maquinaciones, no se le permite hablar. No nos han permitido escuchar la versión completa de Israel Vallarta, es quizá el único momento de ‘censura’ que esta serie tuvo”, acepta Gerber.
“Es un documental bastante grande en cuestiones de dimensión de lo que abarca, porque son dos países involucrados, porque estamos acostumbrados a ver el enfoque de un país, de un momento, aquí es Francia y México, los dos puntos de vista de un caso que sigue siendo controversial al día de hoy, donde sigue habiendo gente que está siendo enjuiciada o no por este caso”, contó Cruz durante el lanzamiento y contó que filmaron durante tres meses en suelo galo.
Los creadores aceptaron que el documental seguramente generará nuevas discusiones sobre el caso, al considerar que retomar esta historia también refleja los problemas actuales de México: el cambio de poder del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN), el inicio de la guerra contra el narcotráfico en el mandato de Felipe Calderón y cómo en cada período histórico el caso revive a la luz de la coyuntura.
Fuente: Télam
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