Angustias, penas y retos fueron convertidos por la conductora Susana Moscatel en un libro, “Los musicales que salvaron mi vida”, con el cual le rinde homenaje a grandes producciones, en un acto de remembranza sobre los números musicales y las obras de teatro en las que participo desde principios de los 90, y como su paso por ese mundo la ayudo a crecer como actriz, al tiempo que las canciones de estas obras iban conformando el “playlist” de su vida.
Este anecdotario de Moscatel es una descripción de la vida adentro y afuera de los escenarios y los reflectores, fue escrito con la ayuda de uno de sus mejores amigos, quien le recordaba historias ocurridas entre bambalinas, propias y de amigos que el mundo actoral le trajo. La ahora autora quiso plasmar la catarsis que puede causar el simple hecho de escuchar o disfrutar un acto de tu obra favorita, ante las adversidades que te presenta la vida.
La obra está planeada desde el paralelismo, haciendo alusión a la obra musical “The book of mormon”, la actriz ha bromeado al respecto con un título que tenía en mente “The book of Susan”, asegura en las diversas entrevistas que ha dado con respecto al lanzamiento de este material con toques bibliográficos. Para complementar su proceso creativo, volvió a retomar contacto con personas con las que compartió escenario para hacer de este libro una experiencia colectiva.
Es claro el sentimiento y su cariño por los mundos de fantasía. En uno de los primeros capítulos de este libro, Moscatel relata lo que la inspiró primordialmente para compartir con el público aspectos más privados de su vida que, pese a ser una figura pública, se negaba a que vieran la luz; ahora, con este texto, quiere que el lector logre reflejarse y acercarse al gran refugio que representan musicales como “Rent”, “Hamilton” y “El violinista en el tejado”.
En “Los musicales que salvaron mi vida” la autora busca también expresar su respaldo a la comunidad del teatro y acercar a los que son ajenos a él. El libro, con el pasar de las páginas, permite darle un vistazo a experiencias, propias y compartidas, sobre la atmósfera donde el compromiso de los actores antes de entrar a escena es evidente y tajante para dejar atrás afecciones, penas y dolor, para desempeñar los roles protagónicos, antagónicos y secundarios.
Este libro se encontraba listo para salir un poco antes que se desatara la ola de contagios por COVID-19, que provocó el cierre de escenarios teatrales y una dura situación para esta industria. Moscatel, en una muestra de respeto para con sus compañeros que estaban sufriendo los estragos económicos del encierro, retrasó el lanzamiento de su obra y esperó a que los semáforos epidemiológicos permitieran la reapertura de eventos masivos, para presentar su homenaje literario, que, finalmente, vio la luz en este 2022.
Moscatel resalta que sentimientos como la depresión pueden ser apaciguados, por una simple melodía que evoqué sentimientos o recuerdos, que es lo que ella y muchos actores pasan al aprender a disfrutar desde las entrañas, el mundo infravalorado del teatro musical; La autora describe este libro como un acto de amor y respeto ante las circunstancias imposibles que, pequeñas obras llegan llegar a foros pequeños o grandes; Una de las peculiaridades de eta edición es que se encuentra escrita como un guion teatral, con obertura y dividida en actos, en los que de forma casi periodística, se narra el sentimiento de cada puesta en escena.
Susana Moscatel ha destacado por su participación como periodista y conductora de televisión durante más de 20 años, también ha participado en diversas obras del teatro musical, debuto como escritora en 2011 con “Toda mujer debe tener un marido gay” y en 2013 con “Enganchados”.
SEGUIR LEYENDO