Desde su trinchera como periodista Lydiette Carrión busca exponer las desapariciones y feminicidios ocurridos entre 2011 y 2013 en el territorio de los municipios de Ecatepec y Tecamac, pertenecientes al Estado de México. La joven escribió “La fosa de Agua” con base en los relatos a los que pudo tener acceso gracias a su labor como periodista. La obra, asegura, es un llamado a levantar la voz contra los actos de violencia que sufren las mujeres en las calles de estos barrios populares cercanos a la capital mexicana.
En la obra se mencionan víctimas con nombre propio, entre las que se encuentran los casos de Yénifer y Mariana, que representan a una cantidad indeterminada de mujeres menores de edad que son forzadas a desaparecer, casos que Carrión destaca para exponer lo peligroso que es para algunas niñas el solo hecho de salir unos metros fuera de sus hogares. La periodista expone la problemática en la que la desigualdad y la ineficacia o la corrupción de las autoridades pertinentes han convertido los casos en un laberinto infinito de desinformación por lo cual la ardua tarea de búsqueda de las jovencitas queda casi siempre en manos del círculo familiar de las víctimas.
La cronista toma los datos duros de las historias y presenta lo inhóspito que es crecer en los barrios populares a las afueras de la gran Ciudad de México, enmarca las historias de las víctimas desde los nulos privilegios y la falta de seguridad, sumados al entorno de barrios con el asfalto desgastado, poca iluminación, gente que vive al día y se apretuja todos los días por horas en el transporte publico, calles con olor a muerte en cada esquina, situaciones de violencia y corrupción normalizadas por la propia comunidad vecinal, que no entiende lo grabe que es solapar o participar en el mínimo acto de ilegalidad.
Es una historia en la cual se puede visibilizar la bola de nieve que representa este problema que crece todos los días, la obra esta centrada en relatar los horrores que sufren niñas y jóvenes que inclusive perdieron la vida, la autora toma elementos reales de los casos que cubrió desde su labor periodística, desde la última vez que vieron a las víctimas hasta el proceso que viven las familias ante la desaparición de estas mujeres a las que les arrebataron sus sueños, Lydiette Carrión decide incluir una descripción del entorno, que rodea estos lamentables hechos.
Dentro del texto Carrión incluyó dos de los casos cometidos por feminicida Juan Carlos Hernández Bejar, llamado El Monstruo de Ecatepec, esto antes de que se comprobará la responsabilidad del individuo sobre estos casos, la mexicana describe en sus paginas los métodos que convierte a las madres y padres de familia en investigadores que bajo sus propios recursos, se ven obligados a instruirse e informarse, en un acto titánico para resolver los casos desde el hoyo negro que representa la falta de apoyo de ministerios públicos y autoridades pertinentes.
La escritora relata como los familiares pasan por un agotamiento físico y mental, tras emprender la búsqueda exhaustiva que descompone el circulo familiar y su economía, padres que buscan llevar el sustento del día, madres que emprenden la tarea de buscar y hermanos con falta de atención, en su texto expone que las autoridades del Estado de México no le dan importancia con los familiares de las víctimas, también propone que en estos lugares hace falta una verdadera alerta de genero.
El libro”La Fosa de Agua” es un llamado no solo a las autoridades, si no un retrato compuesto de letras sobre los pocos casos esclarecidos y las duras situaciones por las que pasan las familias que han recibido una negativas o promesas de investigación ante los extensos procesos, papeleos y poca ética profesional de las autoridades mexicanas, en el cuál la periodista Lydiette Carrión busca no solo exponer desde la vivencia, si no un acto de aprendizaje y admiración ante los que siguen en búsqueda de hijas, madres, compañeras, amigas y menores que ya no se ven, ni se escuchan.