Carlos Monsiváis fue escritor, periodista, ensayista y amante de los gatos y los boleros. Estudió economía, letras y teología, pero desde muy joven colaboró con sus textos en diferentes periódicos, revistas y suplementos literarios y culturales.
Su postura política y una definida actitud crítica lo llevaron rápidamente a convertirse en una voz importante en el periodismo y la intelectualidad mexicana. Se interesó particularmente en seguir de cerca fenómenos como como los movimientos estudiantiles, los ídolos populares (fue un gran admirador de Cantinflas, sobre quien escribió varios artículos y ensayos) y las luchas de las feministas y la comunidad LGBT+, a la cual demostró todo su apoyo, a pesar de nunca haber “salido del clóset”.
Entre sus múltiples galardones está el Premio Nacional de Periodismo (1977 y 2009), el premio Mazatlán de Literatura (1989), el Xavier Villaurrutia (1995), el Lya Kostakowsky, el Anagrama de Ensayo (2000) y el premio de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo (2006).
Este domingo 19 de junio se recuerda al escritor mexicano, fallecido por una fibrosis pulmonar en el 2010.
Tras la noticia, dada a conocer por la Secretaría de Salud de México, se le dio a Monsivais una despedida multitudinaria en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México, donde estuvo expuesto su féretro, el cual, como reconocimiento a la ayuda y apoyo que le brindó a la comunidad, fue cubierto con la bandera LGBT+.
Hoy, presentamos una pequeña muestra de una casi inabarcable producción literaria, ensayística y periodística que incluye política, historia, música, arte y muchos temas más.
Entrada libre. Crónicas de la sociedad que se organiza
Este libro lo escribió en 1987 en donde se encontrará el lector con siete crónicas que hablan de México y su manera de ser ante momentos que fueron de gran impacto como el terremoto del año 1985 y la tragedia de San Juanico, entre otros.
Monsiváis se comprometió mucho con este libro, ya que lo consideraron como la profunda y clásica noción de la política Méxicana.
Las primeras versiones de la crónica se publicaron en la revista mexicana Proceso, Cuadernos Políticos y el Cotidiano.
Los mil y un velorios. Crónica de la nota roja
En 1994 Monsiváis escribió el libro como parte de una invitación a la colección Alianza Cien. Aunque nunca se imaginó que quince años después volvería a este texto con correcciones, con el fin de actualizar la demografía funeraria, el cual dice que, en vez de mil, debería de llamarse Los cien mil y un velorios.
En esa corrección que hizo Monsiváis estuvo repleto de momentos militarizados del narcotráfico y del cual modificó la nota roja del país, manifestándose en las ocho columnas de los periódicos y en la deshumanización masiva.
Las esencias viajeras
Este gran ensayo representa todos los trabajos y reflexiones de Monsiváis el cual habla de las semejanzas culturales de Latinoamérica “como una idea compartida”.
La desigualdad es uno de los rasgos que más ha predominado en la sociedad, por eso “tristemente nos iguala”.
Monsiváis da una visión de la primera parte del siglo XX y del XXI donde analiza la independencia y autonomía latinoamericana “en un mundo interrelacionado por la globalización”.
Apocalipstick
Este libro narra cómo la ciudad crear nuevas culturas, es así como empieza a colocar elementos de lo popular para poder analizarlos, es el caso de Paquita la del Barrio (cantante mexicana) y el cambio que su música hace ante el machismo.
Las crónicas que escribió Monsiváis en relación con esta gran ciudad lo contrastan con la apatía, la politización de los ciudadanos, las marchas y protestas callejeras
En cuanto al texto, el autor logra convertir la realidad tan dura del mexicano en una lectura divertida y profunda.
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