Después de esperarlo por varios años, Weird West finalmente llegó al mercado con una interesante batería de promesas y una estética muy particular. Los jugadores ya pueden sumergirse en esta versión sobrenatural del Lejano Oeste y forjar su propio camino a través de cinco personajes y cientos de decisiones, grandes y chicas, que van a determinar su destino final.
Antes de que WolfEye Studios y Devolver Digital crearan su nuevo videojuego, la expresión Weird West hacía referencia a un género de ficción que mezcla la temática western con elementos sobrenaturales propios de la fantasía, el terror y la ciencia ficción. El género nació en la literatura de 1930 y se popularizó luego con los cómics en 1940, pero en el terreno de los videojuegos no es un tipo de historia demasiado explotado, al menos por ahora.
En el juego, los players recorren las historias de cinco cazarrecompensas muy diferentes que comparten una conexión. Los cinco relatos comienzan con el protagonista recibiendo una extraña marca en el cuello. Lo único que se puede deducir, gracias a personajes crípticos y algunas líneas de diálogo, es que se trata de magia de posesión. A efectos de la jugabilidad, esto permite que toda la información recolectada y las habilidades aprendidas pasen de un personaje a otro mientras el jugador “posee” al próximo héroe. En términos de historia, se trata del gran hilo conductor que empuja al player en busca de respuestas sobre esta particular versión del Lejano Oeste.
La aventura de Weird West se plantea con un gran mapa donde se pueden encontrar numerosos pueblos, minas, pantanos, desiertos, fortalezas, templos y todo tipo de locaciones con interesantes cosas por descubrir. Como si se tratara de un juego de rol de lápiz y papel, Weird West permite a los jugadores actuar con absoluta libertad, eligiendo exactamente qué hacer y cómo hacerlo. Una vez se completa la historia principal de cada personaje, se pasa al siguiente.
Una vez se elige la locación de destino, se puede interactuar tanto con personajes como con el entorno para encontrar pistas, descubrir tesoros, investigar sobre alguno de los objetivos activos, comprar y vender objetos y mucho más. Los distintos niveles cuentan con objetos que pueden generar caos, desde barriles explosivos a lámparas de aceite, pero muchos lugares también invitan a usar el sigilo y evitar ser detectado para obtener mejores resultados.
En el accionar de los jugadores también se deben tener en cuenta las particulares características de cada protagonista. La primera es una granjera que debe abrazar su pasado como cazarrecompensas para rescatar a su esposo secuestrado y es un muy buen punto de partida. Pero más adelante llegan personajes que se destacan en otros estilos de juego, lo que invita a ser creativo a la hora de encarar las numerosas situaciones que suceden en el Oeste Raro.
Son los jugadores los que determinan cómo avanza la historia de cada protagonista a través de numerosas decisiones. Aunque algunos objetivos secundarios cuentan con tiempo límite, la manera de usar ese tiempo queda completamente en manos del player. En otras palabras, se puede descubrir el mapa entero con el primer protagonista, aunque el juego deja en claro, con su dificultad, que es recomendable ir de a poco. Al finalizar la campaña de uno de los cazarrecompensas se puede ver un sumario de los acontecimientos más importantes, porque otro de los puntos clave de Weird West son las consecuencias.
La absoluta libertad del juego está contrastada por las consecuencias que pueden tener las numerosas decisiones de los jugadores. Si un pueblo es completamente masacrado por uno de los personajes, va a quedar abandonado por un tiempo hasta que vuelva a llegar gente o sea ocupado por monstruos de diferentes naturalezas. En este tipo de apartados se puede apreciar el mundo vivo que crearon en WolfEye Studios, donde personajes recuerdan a otros por lo que hicieron o dejaron de hacer, algo que más adelante puede convertirse en una ayuda infalible o un obstáculo indeseable. Incluso los que en algún momento fueron protagonistas de la historia pueden pasar a convertirse en miembros del grupo de otro y hasta pueden morir.
Weird West fue anunciado en 2019 y llegó finalmente a PlayStation 4, Xbox One y PC esta semana para ofrecer una campaña muy completa. Superar las historias de los cinco protagonistas es una tarea que lleva mucho tiempo y que, a pesar de transcurrir en el mismo mapa, logra mantenerse fresca gracias a la libertad de acción y el enorme abanico de posibilidades. El juego, además, cuenta con un sistema de guardado y cargado rápido que invita a los jugadores a probar diferentes acercamientos sin tener que sufrir las consecuencias o perder progreso importante.
Como fan de los westerns, encontré una muy entretenida experiencia en Weird West, principalmente porque se siente muy presente esa libertad de acción que, en otras palabras, significa que estamos creando nuestra propia historia en este universo. No puede haber dos campañas idénticas en Weird West y es algo que no solamente se logra con las numerosas decisiones que se toman, sino con los encuentros aleatorios, las misiones secundarias, las habilidades de los personajes y todos los sistemas creados para generar esta aventura tan particular.
Debajo de todo lo bueno que tiene Weird West para ofrecer, todavía hay algunos apartados que pueden mejorarse. Por ejemplo, la inteligencia artificial de los enemigos está muy afilada para detectar cuerpos que dejemos en el camino, si elegimos avanzar con sigilo y derribos no letales. Sin embargo, no reaccionan de la misma manera a puertas y ventanas que se abren u objetos que cambian de posición, lo que en ocasiones puede sacarnos de la experiencia y nos recuerda que estamos en un videojuego. Lo mismo sucede cuando algunos pequeños bugs o glitches hacen que algún personaje salga volando o se quede atascado en algún rincón.
No son cuestiones que ocurran muy seguido, pero sí deja en claro dos cosas. Por un lado, todavía hay algunos elementos por pulir, pero también son cosas que surgen por la enorme libertad de acción y el amplio abanico de posibilidades a la hora de superar cualquier locación.
Fuera de errores involuntarios, también podría mejorarse la navegación a través de los escenarios. Aunque la idea no es que los personajes sean omnipresentes y puedan ver absolutamente todo, a veces echar un vistazo dentro de un edificio para determinar una estrategia puede ser contraproducente. Para abrazar un poco más el costado rolero o de estrategia que propone la particular vista isométrica de Weird West, también se podría implementar una pequeña pausa típica de los juegos tactics, entre otras mecánicas opcionales para mejorar la experiencia en general.
A pesar de estos pequeños ajustes y posibles mejoras, Weird West cumplió con sus promesas y brindó a los gamers una aventura como pocas en el Lejano Oeste. Con mucha acción, muchos elementos sobrenaturales, misterios por resolver y un elenco muy interesante de personajes, el título de WolfEye Studios es un videojuego apto tanto para los fans de la temática como para los amantes del rol que buscan una estética diferente en un mar de fantasía medieval.
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