La campeona olímpica Paulo Pareto admitió que Tokio “casi seguro” marcará el final de su carrera deportiva, en el que buscará tener la medalla de oro de la categoría -48kg de judo ganada hace cinco años en Río de Janeiro.
“Es especial porque es mi último Juego Olímpico y mi última competencia casi seguro, así que estoy disfrutando al ciento por ciento cada momento”, respondió al ser consultada por sus sensaciones antes del debut en la cita de la capital japonesa. La Peque, de 35 años, afrontará su cuarta experiencia olímpica después de Beijing 2008 (bronce), Londres 2012 (diploma, 5to. puesto) y Río de Janeiro (oro).
“Este es un torneo especial para todos, la pandemia hizo que lleguemos todos de una forma diferente, que nos preparemos de una forma distinta y que hoy también vivamos una realidad opuesta a lo que eran otros Juegos Olímpicos”, consideró en declaraciones al Comité Olímpico Argentino (COA).
La judoca de San Fernando, sexta del ranking mundial, aseguró que llegará “bien” a su debut del próximo viernes, aunque “después de luchar con algunas lesiones”. De cara a la competencia, subrayó la importancia de “la actitud y lo mental” para cumplir con un buen desempeño. “En todos los deportes es importante pero creo que en el judo tiene un plus. Estoy entrenando también ese aspecto con mi psicólogo para llegar al ciento por ciento”, dijo.
La argentina, que también fue campeona del mundo en su categoría en Astana 2015, pisará el tatami de Tokio este viernes a las 23 cuando dispute su primera eliminatoria de la división femenina -48kg.
Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, que tantas veces estuvieron a punto de cancelarse y fueron aplazados por un año para julio y agosto de 2021, serán recordados como los primeros Juegos de la era moderna reprogramados por una pandemia y sin público en sus tribunas.
Por el estado de emergencia decretado para la capital de Japón ante el aumento de los casos de coronavirus y por miedo a la variante Delta, de rápida propagación, el primer ministro Yoshihide Suga impuso una restricción para que no haya espectadores en eventos oficiales entre el 12 de julio y el 22 de agosto.
Si bien había prohibido el público extranjero con varios meses de anticipación, ante un rechazo de buena parte de la población a la realización de los Juegos en Tokio, sobre el público local no hubo definición hasta último momento. Los bares y restaurantes no podrán servir bebidas alcohólicas y deberán cerrar antes de las 8 de la noche, además de que todos los sitios públicos para espectadores fueron clausurados.
Desde que se celebraron los primeros Juegos de la actualidad, en Atenas 1896, hasta ahora, solamente en tres ocasiones (Berlín 1916, Tokio/Helsinki 1940 y Londres 1944) se suspendieron a causa de las Guerras Mundiales, pero nunca por una pandemia.
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