Emanuel Ginóbili escribió una emotiva columna reflejando los detalles de la despedida que le tocó vivir con el seleccionado argentino tras caer contra Estados Unidos en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
El hombre de los San Antonio Spurs contó en su segmento habitual en el diario La Nación las sensaciones que recorrieron su cuerpo y los análisis del pasado y a futuro. "Me pegó cuando salí de la cancha. Mis compañeros empezaron a abrazarme, la gente aplaudía y fue entonces cuando me cayó la ficha", reconoció Manu quien se mostró conmovido tras el pitazo final.
"Tantas muestras de afecto y respeto me golpearon duramente y no pude contener más la situación emocional", explicó luego de aclarar que durante el transcurso del día había intentado no pensar en que ése podría ser su último partido para el país.
La figura de la NBA reconoció que los saludos de sus compañeros lo golpearon tanto como el gesto de los rivales, que rápidamente se acercaron a darle una muestra de afecto. "Existieron gestos de compañeros y de rivales que me descolocaron un poco", subrayó. "Sentí tanto afecto que me impactó", agregó.
El legado de la Generación Dorada no es algo que pasó desapercibido para Ginóbili, quien reflexionó: "La verdad es que escucho todo lo que dice la gente respecto de lo que dejamos como equipo y lo que pude hacer yo. No es una ficha que me caiga hoy. De a poco, uno va viéndolo en diferentes circunstancias. Pero no es uno el que debe juzgar o decir lo que se generó en la gente. Sin dudas, saberlo nos hace bien".
De cara al futuro de la Selección, marcó a Facundo Campazzo, Nicolás Laprovittola y Patricio Garino como los pilares de la reconstrucción, y dejó un anuncio que hará tambalear las estructuras de los Spurs en la temporada que se avecina: "Posible sea mi última participación allá. La última experiencia de mi carrera en la NBA".